Keep secrets to keep you

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Queridos lectores.
Han llegado a oídos de esta autora que han visto a la hija del Duque Queen, la señorita Taylor, salir de su hogar justo al atardecer con lo que parecía una valija y sólo dios y su cochero sabrán a dónde se dirigía con tanta prisa.

-Lady Whistledown.

Felicity casi llora al ver a su nieta entrar por la puerta principal con un vestido palo de rosa, el cabello suelto y una mirada que jamás había visto en ella, una mirada de libertad.

—Lamento haber llegado tarde.

Taylor les sonrió a todos los presentes y Lily se acercó a ella con una sonrisa para tomarla del brazo y encaminarla junto a su padre.

—Creí que no vendrías.

—Me dolía un poco la cabeza, pero Robbie me dio un té maravilloso y decidí acompañarlos en esta velada tan importante.

Taylor miró a su abuela y le sonrió de la manera más sincera que podía, ella le devolvió el gesto; su padre se acercó a ella y besó su mejilla, frunció el ceño ligeramente y se acercó a su oído.

—¿Por qué hueles a humo? — susurró.

—Quemé unas partituras viejas antes de venir.

Harry le dio una mirada de sospecha, pero no dijo nada. Taylor tampoco le diría que había salido corriendo de su casa en camino al parque con una valija llena de las cosas de Lucien, cada flor, cada carta, cada regalo que aquel hombre le había dado, había ido a un lugar poco concurrido de la ciudad y le había prendido fuego a todo, si iba a dejarlo definitivamente tenía que cortarlo de raíz, dejar ir todo lo que alguna vez fueron y sólo Taylor sabía el peso que se había quitado de encima cuando vio todo convertido en cenizas.

No supo cuándo, pero Simon y Anthony habían llegado al salón diciendo que habían rechazado su licencia para su matrimonio, pero su abuela los tranquilizó diciendo que hablarían personalmente con la reina.

—¿Con la reina? — preguntó Simon.

—Sí, si ambos están tan enamorados, ella lo notara y no tendrá ningún reparo en aceptar su matrimonio.

—Abuela. — interrumpió Taylor. — No estoy segura de que tan factible sea, recuerda que está de por medio el príncipe.

—Para eso está tu hermana.

—Madre... — dijo Harry. — No pretendes que mi hija sea una distracción.

—Jamás me atrevería, pero sería una excelente oportunidad.

—Abuela ¿Podemos discutir esto en casa? Es inapropiado para la mesa.

Taylor le dio la razón a su hermana y Harry le ofreció una disculpa con la mirada a Lady Bridgerton.

—¿En dónde se encuentra su encantador hijo, Lady Bridgerton? — dijo Harry desviando el tema. — Benedict.

La atención de Taylor se dirigió hacia aquella conversación, sin importarle lo poco disimulada que había sido al respecto.

—Me temo que no nos acompañará esta noche, ha tenido una reunión.

—Es una lástima, tengo entendido que mantiene una amistad con mi hija Taylor. Tenía la esperanza de que compartieran un momento juntos.

Taylor casi se ahoga con el vino en cuanto su padre pronunció aquellas palabras, Lily no pudo evitar soltar una pequeña risa mientras su abuela sonreía tratando de contener la suya. Daphne colocó su mano sobre sus labios para ocultar su diversión y miró a Taylor con una sonrisa.

Enchanted | Benedict Bridgerton |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora