Un amor inesperado - Julián Álvarez

Capítulo 20

Ya habíamos llegado al aeropuerto y yo estaba muerta de sueño y la tristeza invadía mi cuerpo.

- ¿Y si nos quedamos? - le digo a mi prima y después bostezo.
- Ojalá.

Nos subimos al avión sabiendo que nos esperaba un largo vuelo y no se qué problema hubo con dos pasajeros pero a mi prima y a mi nos pasaron a primera clase. Viajamos muy cómodas y la comida era muy rica.

Cuando por fin llegamos tardamos muchísimo en el aeropuerto y pasé por el free shop a comprarles chocolates a mis amigas y mis papás.

Cuando llegué a mi casa estaban mis papás esperándome con la merienda hecha.

- Te extrañamos mucho - me dijo papá mientras me daba un abrazo.
- Yo a ustedes - les dije - no saben lo que es Qatar, el próximo mundial quiero ir con ustedes.
- Dale, esperemos cuatro añitos más - dijo mi mamá jodiendo.
- Te fuimos a comprar facturitas, ¿No querés?
- Estoy muerta de sueño y comí un montón en el avión, voy a subir a dormir.
- Nena dale no le podes decir que no a unos buenos churros - me dijo papá acercándome una bandeja repleta de churros.
- ¿Compraron churros? ¡Los amo! - salté de la emoción y obvio no podía negarme a unos vuenos churros así que me comí 2 y subí a dormir.

Me levanté a la noche, antes de la cena, y tenía millones de mensajes de Julián preocupado porque pensó que no había llegado, me había olvidado de escribirle.

Julián❤️🐔

Amor
Llegaste?
Por qué no me respondes?
Ju
Hola???
Llegaste?
Cuando puedas escribime
Por favor
Contéstame bostera
Morocha me vas a hacer llorar

Juliii perdón
Me quedé dormida
Llegué hace un rato

Julián no me respondió, supongo que estaba entrenando o algo así.

Me fijé cuando jugaría argentina y todavía faltaban 4 días, jugaban el 9 de diciembre los cuartos de final contra Países Bajos. Me ponía triste saber que no iba a estar en el estadio alentando a Juli y me daba mucha fiaca pensar que al día siguiente iba a estar trabajando y volver a mi rutina.

Bajé a cenar y mi mamá me puso al día con el trabajo, es como mi secretaria.

- Te llegaron un par de mails de marcas lujosas como Dior y YSL pidiéndote que seas su nueva cara - me dijo mamá orgullosa y yo recién levantada no podía entender lo que estaba pasando.
- También fuimos al shopping uno de estos días con mamá y, ¡Vimos tus fotos en Gucci! - papá está más feliz que yo.
- Es un sueño todo lo que estoy viviendo y gracias a ustedes - me paré de la mesa y les di un abrazo a los dos.
- Comé - mi mamá me pasó la bandeja con carne.
- Gracias ma - la agarré y me serví.

Terminé de cenar y lo llamé a Juli pero no me contestó así que me fui a dormir.

Por el cambio de horarios me costó mucho dormirme, habré dormido unas 5 horas y me quería matar porque tenía que hacer fotos hoy y mi cara no daba para más.

- Hija baja a desayunar - me despertó mamá.

Bajé y habían unas tostadas con palta y huevo en la mesa y la máquina de café estaba prendida.

- ¿Querés cafecito también?
- No ma, gracias - dije después de morder un pedacito de mi tostada.
- ¿Segura? Capaz te saca la cara de dormida - se rio de mi.
- Bueno, dale.

Mamá me hizo un café, con leche obvio, y subí para cambiarme e ir a trabajar.

- Necesitas una secretaría nena - me dijo mi mamá - estás a mil.
- Ya se ma, no doy más - dije mientras me frotaba los ojos - igual te tengo a vos.
- Tenés razón - me dio un abrazo - ¿Querés que llame a Bimba y Lola para pedirles que cambien el horario de las fotos? La tarde la tenes libre, podes dormir ahora y en tu tiempo libre vas a hacer las fotos.
- Si se puede si, pero lo veo difícil - le dije - estoy cancelando unas pocas horas antes, no me van a dejar.
- Espérame acá que llamo y vuelvo.

Hoy tenía fotos con una marca que amo, se llama Bimba y Lola. Nunca había trabajado con ellos por eso me daba vergüenza pedir mover la sesión de horario pero más vergüenza me daba caer con las ojeras que tenía.

Volvió mamá a mi cuarto.

- Solucionado - dijo mientras abría la puerta - a las 6 de la tarde te esperan en el estudio.
- Sos una genia - le di un abrazo con una sonrisa - te amo ma.
- Yo a vos chiqui.

Me tiré en la cama y me fui a dormir hasta que se hicieron las 5 y ya tenía que empezar a cambiarme para ir.

Mamá me llevó hasta el estudio y ahí me maquillaron y me pusieron su ropa que amo, también tuve que hacer fotos con un par de accesorios súper lindos.

- Qué bien que quedaron las fotos - me dijo la fotógrafa - sos muy linda, tenés mucho potencial.
- Ay, gracias - le dije con una sonrisa.

Agarré mis cosas y volví para mi casa, cené y me quedé dormida.