Love or Obsession [Niragi]

XII

--Esa chica se ve que es bastante agradable,o al menos eso parece-- Chishiya me miraba mientras le hablaba sobre la chica de antes,pero lo que me sorprendió es que me miraba atentó,cosa que  nunca hizo al escucharme hablarle sobre alguien nuevo.

--Kuina ya te dije que no se quién es,así que no puedo decir lo mismo,aparte ya sabes que no puedes dejarte llevar sobre la apariencia de las personas,sobre todo en este lugar-- Solo lo mire,sabía que tiene razón este lugar no es para confiar en la primera persona que se te crucé por la vista.

Pero la verdad es que logró llamarme demasiado la atención aquella chica. Al lado de la piscina alcance a verla,pero no estaba sola estaba con Usagi y Arisu.

Un ruido hizo que vuelva a la realidad,Niragi había llegado a la terraza azotando la puerta al salir. Me largo una mirada indicando me que fuera del lugar,cosa que hice enseguida.

--¿Te enteraste que entro una chica nueva?-- Mire atento a Chishiya mientras miraba a cualquier otro punto tratando de ignorar mí pregunta -- Shuntarō te estoy hablando.

--Si,me enteré por Kuina que entró una nueva,pero no me importa eso-- Rode mis ojos al escuchar eso,era verdad que este chico no confía en nadie en este lugar pero era demasiado entendible,nadie hace eso.

--¡Es Leía!-- Note que me miró rápidamente atento a lo que acabó de decir con un brillo en sus ojos,pero negó -- Chishiya es Leía,yo la vi cuando el Sombrero fue a darle la bienvenida.

A pesar de estar en un lugar demasiado extraño su amistad sigue en pie,casi nadie sabe sobre ello,solo Kuina. Chishiya,no creía nada de lo que si mejor amigo le decía,no creía que en su momento su pequeña estaba en el mismo mundo que ellos dos,en un mundo desagradable.

--No...no puede ser ella Niragi-- El pelo blanco se levantó rápido de su lugar al ver que su mejor amigo señaló a algún lugar con la mirada,al lado de la piscina la vio,riendo con Usagi y Arisu,sintió sus ojos arder con la sensación de salir corriendo hasta allí a abrazarla.

Ambos la habían extraño,y demasiado.

Pero se quedó en su lugar, mientras que su mejor amigo se acercaba a el,ambos miraban atentos a la chica que en el otro mundo era demasiado importante para ellos,la que había mejorado la vida de ambos por completo. Niragi contuvo sus ganas de ir corriendo a abrazarla cuando la vio,pero no podía hacerlo.

--Si es ella...

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Mis pensamientos volvieron al chico pelinegro de hace rato,estaba demasiado convencida que era el,no tenía ninguna duda sobre eso.

Estaba riéndome junto a Usagi, mientras ambas escuchábamos los chistes nefastos de Arisu. Admito que tuve un deja vu,este momento lo había vivido con Niragi y Chishiya.

De pronto,sentí miradas sobre mí,trate de restarle importancia pero era imposible al sentir eso todo el tiempo. Busque por todo el lugar para ver quién era,pero no había señal,o hasta que mire a una especie de azotea y allí alcance a ver al mismo chico de hace rato,junto a un peli blanco.

Me levanté rápido  mientras ponía de excusa que iría al baño,corrí por todo el lugar hasta que logré encontrar una puerta que me llevo a la azotea. Tenía esperanzas de que sean ellos dos,pero cuando llegue no había absolutamente nadie.

Pero si acabo de verlos aquí...

La castaña estaba demasiado ilusionada de que vería a sus dos amigos en este azotea,pero que de un segundo a otro solo se encontraba ella sola parada allí intentando descifrar lo que ocurrido.

La verdad que tiene esperanza de verlos en este extraño mundo,ya que uno de los militares era idéntico al pelinegro que llego a robarle su corazón. Apartó aquel pensamiento volviendo a la realidad percatandose que seguía sola en aquella azotea.

En sus ojos se notaba la verdad desilusión,bajo con algo de pereza y tristeza las escaleras,a lo lejos vio a los chicos con los cuales habia estado hace un rato al lado de la piscina.

--¿Estás bien Leía?-- Se sobresaltó al escuchar una voz detrás de ella encontrándose a la chica que la llevó hasta su habitación,Kuina-- Digo te ves algo...¿Triste?

--Oh,si estoy bien no te preocupes-- Le regale una sonrisa mientras la veía irse.

Me fui para mí habitación moría de sueño.

Me acosté en mí cama quedándome dormida al segundo,la verdad si era cómoda,supero mis espectativas esto.

02:05am

Escuché un ruido que supuse que fue un disparó, porque todos estaban gritando desesperados mientras se escuchaba por el pasillo que corrían. Yo me quedé en la habitación no tenía ganas de levantarme e ir a ver qué había pasado.

Tape mis oidos con la almohada intentando recuperar el sueño que fue interrumpido gracias a los ruidos de recién. Comenzaba a odiar este lugar por completo.

Pero para mí suerte se escucharon cinco disparos seguidos,rode mis ojos al no poder conseguir de nuevo el sueño.

Y de nuevo...las personas eran demasiado ruidosas,seguian corriendo por el pasillo mientras gritaban como si no hubiera un mañana.

O al menos para los que acaban de matar.

Decidí levantarme e ir a ver qué pasaba ya que no podía dormir. Al salir de mí habitación vi que la gran mayoría estaban todos aquí en el pasillo pero un poco más tranquilos.

Baje las escaleras mientras trataba que no me empujaran al subir corriendo sin ver a su alrededor. El lobby estaba casi vacío,solo estaban los paramilitares,el sombrero y los que supuse que serían los ejecutivos.

Mis ojos se posaron al ver a un chico algo bajó, peli blanco y cabellera algo larga,trataba de verlo bien pero me era imposible al ver qué estaba de espalda,pero daría mí vida que es Chishiya.

Volví a sobresaltarme al escuchar otro disparó mientras el sombrero largaba una carcajada, aproximadamente habían ocho cadáveres en el piso.

Mis ojos recorrieron todos los cadáveres tirados en el piso ya sin vida,algunos ya estaban siendo llevados a no se dónde mientras que una chica alta,pelo corto bastante bonita los seguía.

Llevaban el cadáver de un chico que parecía que había sido asesinado,ese no lo había visto ya que estaba más escondido.

Supongo que de hay vinieron los disparos.

--Lamento que hayas visto todo esto en tu primer día de hospedaje,pero así es este lugar-- Pude sentir un escalofrío en mí columna al ver qué estaba el sombrero mirándome con una sonrisa algo macabra.