Ok...Eso es nuevo

Capítulo 21

Wednesday no iba a mentir, estaba nerviosa. Era indiferente a las opiniones de su madre sobre las cosas que hace y la compañía que tiene. ¿Pero su padre? Esa es una historia totalmente diferente. En secreto anhela la aprobación de su padre. Ella se dedicó a la esgrima y se convirtió en la mejor para él, practicando todos los días y toda la noche hasta que era perfecta. Ella estudió mucho y salió adelante en la escuela solo por su aprobación. Realmente admiraba a Gómez, la única otra persona a la que le importaba apaciguar de la misma manera era su tío Lucas. Mientras piensa en ello, se da cuenta de que ahora también le importa lo que Enid piense. Toma la mano de la rubia y comienza a llevarla escaleras arriba hacia el estudio de su padre. La mano libre de Enid corre a lo largo de la reluciente barandilla de caoba mientras sigue a la chica más baja.

—Entonces, cuando conozcas a mi padre, él será demasiado acogedor o distante— Wednesday mira por encima del hombro mientras la rubia escucha con ojos hiperenfocados, asegurándose de escuchar cada palabra. —Eres la primera persona que traje a casa y aún no le he dicho que estamos juntas, así que no tengo idea de cómo reaccionará— Esto no hace nada para calmar los nervios de disparo de Enid, todavía se estaba recuperando de conocer a Morticia y ahora ya estaba conociendo a Gómez. —Él puede ser protector, pero también puede ser simplemente... ¿extraño?— La cabeza de Wednesday se inclina mientras trata de pensar en la palabra apropiada para describir a su padre. Sus travesuras eran realmente únicas, y Wednesday no tenía idea de si desafiaría a Enid a un duelo o si le ofrecería un cigarro. Después de los eventos con Tyler el semestre pasado, Wednesday piensa que podría estar un poco más alerta de Enid al principio. Los ojos de Enid se agrandan ante eso; Si Wednesday pensaba que su padre era extraño, entonces realmente debía ser un espectáculo digno de ver.

Las chicas comienzan su viaje a través de un largo pasillo, una alfombra roja en toda su longitud que casi hace que Enid se sienta como si fuera una celebridad a punto de entrar en una gala. No puede evitar notar que todas las pinturas en las paredes están un poco torcidas, no estaba segura si fue una elección consciente o si a los Addams simplemente no les importaba. Fue entonces cuando sus oídos se aguzaron con un ruido distante en el aire, –¿qué demonios fue eso ?– Wednesday no parece darse cuenta, o al menos no lo reconoce mientras sigue dando algunos giros más. Enid casi choca con ella cuando se detiene de repente y se vuelve hacia una puerta de madera roja pulida. Ella se estira, golpeando suavemente su mano contra él. Está en silencio y después de no recibir respuesta, Wednesday abre la puerta lentamente.

—¿Padre?— ella asoma la cabeza hacia adentro, mirando a su alrededor solo para ser recibida por una habitación vacía. Por lo que Enid puede ver a través, es una oficina. Los libros cubren completamente las paredes, una alfombra de piel y un gran globo terráqueo de aspecto muy antiguo se destacan a la derecha. Wednesday da un paso atrás y cierra la puerta comodamente. Entonces es cuando otro choque resuena en los pasillos, esta vez lo suficientemente fuerte como para que Wednesday lo escuche y definitiva lo suficientemente cerca como para que ambas lo sientan. Sus pies vibran, la sensación de hormigueo le sube por los tobillos cuando el suelo tiembla y los cuadros en la contraventana de la pared. Así que por eso están todos torcidos.

—Ah. Está jugando con sus trenes— Wednesday dice con un asentimiento de complicidad, caminando por el pasillo hacia el estruendo.

—¿Trenes? ¿Como trenes de juguete?— dice Enid, haciendo un pequeño trote para alcanzarla. Wednesday asiente de nuevo.

—Es un entusiasta de los trenes, pero no por la razón que crees— ella reflexiona sobre lo que eso podría significar por un momento mientras recorren los pasillos, definitivamente se iba a perder aquí.