Evidencias
Volvimos al edificio, me dijo que entraramos sigilosamente.
- ¿por qué hacen esto?
- solo deja de hacer preguntas por un momento, ¿está bien?
- bien- me callóLuego el corrió y sujetó a un hombre de las solapas.
- ¿por qué estás aquí?
- mi señora me dijo que le enviará esto a su superior
- ¿qué es esto?
- una invitación
- ¿invitación de qué?
- le quiere invitar a cenar
- bien, ahora veteEl hombre salió huyendo mientras yo contemplaba al otro.
- ¿quién era él?
- un maldito espía
- ¿espía?
- así es, son tan horrendos que hemos tenido que desaparecerlos cuando vienen
- ¿por qué los espiarian?
- saben que tenemos contratos, aún así pueden timarnos y llevarnos a la ruinaMe callé, si ellos también tienen problemas ¿por qué hacían esto?, ¿acaso esto les iba a conceder un placer eterno?, ¿podrían olvidar sus pérdidas de esta forma?
Entré al edificio librandome de los desquiciados de mis compañeros.
Entré en una habitación oscura, no había nadie lo que era una rareza para mí, decidí explorar algunas habitaciones del edificio.Descubrí que en algunas solo tienen mesas o aparatos eléctricos, puede llegar a una cocina pequeña con tres o cuatro cafeteras, luego puede ver un refrigerador.
Vagué por los corredores y llegué a unas habitaciones, pensé estúpidamente en abrir la puerta y están ellas ahí, cerré rápidamente y salí de aquel pasillo.¿Quiénes eran ellas?, así que también trae a chicas a vivir aquí.
Subí las escaleras y abrí la puerta de un desvan, apestaba.- puedes quedarte si quieres- sugirió una voz
- ah, ¿quién dijo eso?
- no temas, solo estamos los dos solosMe helé, él estaba detrás mío vistiéndose, dí la vuelta y cerré los ojos.
- creo que es mejor que me vaya- murmuré
- puedes quedarte si quieres
- ¿quién eres?
- para muchos Nuñez pero para ellos cincuenta y seis
- ¿por qué todos son números?
- ¿son?, somos querrás decir
- yo…
- no lo sé, no se saben nuestros nombres con certeza
- creo que debo irme
- pero esto apenas está comenzando
- adiósDi la vuelta y caí al piso.
- interesante, aún no lo han hecho
- ¿hacer qué?- pregunté tímidamente
- oh ya sabes, sus perversiones
- ¿de que habla?
- ya sabes esoJunto sus manos a la altura del pecho y con una hizo un círculo la otra atravesó el círculo con el dedo índice.
- váyase
- solo te advertí algo que pasará
- no me interesan sus estúpidas advertencias, se cuidarme solo
- bien, he oído que te han llamado perro, ¿no es así?
- usted no sabe nada
- sabes amigo, las noticias viajan rápido es simple, no debes enojarte
- debo irme
- no te lo autoricé, ¿o sí?Me levanté del suelo y el volvió a taclearme, estaba sobre mí mientras lo veía directo a los ojos.
Intenté moverme pero este había inmovilzado mis piernas, me subió los brazos hacia lo superior y me desabrochó la camisa, intenté girar y este me regresó al suelo en un golpe sordo.- déjame imbécil
- ¿por qué te haría caso?
- solo vete
- no lo haré, me estoy divirtiendo y tú no arruinaras estoMe puse de pie con dificultad, escuché una puerta abrirse y éste volvió a caer sobre mí.
- déjalo ya es suficiente- dijo uno de ellos
- oblígame
- ¿ahora debo de pedirte permiso?
- lárgate Pat
- soy Patrick para ti, cerdo
- bien Patrick- se burló
- ¿ahora sigues así?
- déjame yo se lo que hago
- deja a ese chico ahora
- noPatrick se acercó a él y le empujó de mí.
Rodé a la esquina de la habitación y me encogí sobre mí, me abroche de nuevo mis pantalones y me senté en el suelo.El pervertido salió de la habitación refunfuñando, Patrick se acercó a mí y me miró a los ojos.
- mírame, ¿te hizo algo más?
- no
- ¿estás seguro?
- sí
- bien, será mejor que salgas de aquí
- no puedo moverme
- no es probable que puedas quedarte aquí solo ven conmigo
- lo intentaréMe puse de pie y lo seguí detrás.
Volví a abrocharme la camisa con lentitud.- date prisa con eso, puede que nos metan en problemas
- bien, ya lo haréMe terminé de colocar la camisa correctamente y alisé el cuello de esta.
- bien
- ¿cómo llegó el ahí?
- oh, yo tuve la culpa pensé que la habitación estaba sola
- eso no es decir que tuviste la culpaPatrick era delgado, era más alto que yo y tenía cabello ondulado y rubio, también tenía los ojos verdes, vestía un traje negro con un saco carmín sobre los hombros, estaba algo despeinado pero no parecía incomodarle.
- supongo que él no es de ustedes, ¿o sí?
- sí lo es desafortunadamente, pero no podemos hacer nada
- ¿por qué les dicen cerdos?
- solo son tratados, así suelen llamarles a los que no pueden acatar órdenes en ese caso los demás son sabuesos o lobos
- ¿tú que vienes siendo en este caso?
- ellos dicen que soy un lobo pero no me lo tomo en serio- sonrió
- ¿entonces sí eres Patrick?
- el mismo en persona, supongo que ya te han hablado de mí
- ¿eres el más arraigado al Mayor cierto?
- así es pero no es tan grandioso como se escucha, es más trabajo
Cerró los ojos frotándose los párpados.
- ¿no puedo irme?
- ya lo he intentado, varios lo han intentado y aveces no regresan para contarlo- dijo con cierta desilusión
- ¿son amenazas?
- ¿por qué lo serían?, yo no me encargo de ello si lo dice Douglas o cincuenta y seis deberías preocuparte
- ¿por qué ellos son así?
- no eran así, unos llegaron a transformarse en eso después de hacer trabajos o cuando les ceden cierto poder
- ¿poder?
- encargos o algo así, encomiendas más bien, ahora creo que debo irme, un gusto conocerte...
- Ernesto
- bien, un gusto conocerte Ernesto
- adiós
Se fué y me dejó solo.
Temí por lo sucedido anteriormente, mis pensamientos estaban revueltos en mi mente y no podía arreglarlos.
Ahora me dolía la cabeza de solo pensarlo, la cabeza me estaba matando y yo seguía con mis malditas preocupaciones.
Me derrumbé en el suelo llevándome las manos al rostro.
Volví a levantarme tambaleandome por las paredes.Pero ya había conocido a Patrick y si el era realmente un lobo yo podía realmente ser un cerdo y me llevaría humillaciones en la tumba.
ESTÁS LEYENDO
"El castaño" (EN EDICIÓN)
RandomSolo él solía decirme así, luego se lo apropiaron ellos y me incomodó. ¿Por qué acepté en ese entonces?, ¿dejé que llenaran el vacío de su ser?, ¿o fué el mío?. Solo no quiero volver a esto, si voy a terminar huyendo al menos que sea con dignidad. E...