¿Los Han Visto?. Parte 1

16. La boca del lobo.

El par de chicas, regreso al interior de la escuela, procurando no toparse con algún adulto.

– Fue aquí. Aquí debe estar el frasco – señaló Lauren.

Apretó los puños, alerta de todo, para no dejar que la castaña saliera más herida.
Camila se arrodilló, viendo el líquido viscoso. No quería tocarlo, teniendo náuseas de solo verlo.

– ¿Por qué no solo nos dices donde están? Te puedo llevar a la enfermera para nosotros buscarlos – sugirió Lauren.

– Todos me han llamado cobarde, las únicas personas que creían que yo era valiente, son mi padre y Dinah. No quiero huir está vez.

Tocó finalmente el líquido.

Gabriel había sido atrapado por alguien que tomo la apariencia de su amiga, para pasar desapercibido.
También quería llevarse a Verónica, y lo hubiera hecho, de no ser porque Lauren estaba con ella.
Vio flashes del bosque, intentado reconocer donde era el lugar donde estaba esa "cueva".
Fue difícil, tomando mucho tiempo sin deja de tocar el líquido, intentamos identificar donde era.

– Demonio – maldijo Camila.

Cayó sentada, limpiando sus dedos con su chaqueta que tenía puesta.

– ¿Que pasa? ¿Que viste? – Lauren se acercó a Camila.

– Son cinco. Uno puede cambiar la forma y el otro, se puede transformar en un animal cualquiera, los otros solo se mantienen en la cueva. La baba es del cambiaformas. Su... Su cueva está en el bosque, solo eso pude ver. No se dónde está exactamente, pero vi sus alrededores.

– ¿Puedo ver? Tal vez sepa dónde es.

Camila miró directo a los ojos de Lauren, creyendo que era lo más hermoso que había visto, transmitiendo tranquilidad.
Levanto su mano, dando acceso a Lauren.
La ojiverde acercó su mano a la de Camila, disfrutando de la calidez de la castaña.
Pudo ver todo lo que había visto Camila al tocar la baba de uno de ellos. Llegando a la parte de la cueva, centro toda su atención, internado reconocer el lugar, se tomó su tiempo.

– Se dónde es – dijo alejando su mano – Mi padre nos había llevado a un paseo hace unos años, pero se dónde es exactamente.

Se levantó, extendiendo la mano a Camila, ayudandola a ponerse de pie.

– No estará cerca, dudo que pueda llegar antes de terminar las clases – dijo Lauren.

– Sabremos que escusa dar. Debemos darnos prisa como... Oh, unas criaturas feas se llevaron a nuestros amigos y fuimos por ellos

– No tienes que hacer esto, Camila.

– No dejare a mi mejor amiga sola... Ni a ustedes

Lauren dejo de insistir, llevando a Camila a la salida, encontrando a las chicas en el estacionamiento con sus bicicletas.
Zoe no tenía bicicleta, por lo que Verónica la llevaría.
Lauren subió a su bicicleta, esperando a Camila.

– Se dónde están. No será nada agradable – informo Lauren.

Camila subió a su bicicleta, aguantando el dolor de los golpes.
Verónica aprovecho el momento, metiendo la pulsera de Camila, ya arreglada, en el bolsillo de Lauren, dando una segunda oportunidad a su amiga.
Lauren miro con extrañeza a Verónica, quién solo señaló a Camila con disimulo.

Zoe comprendió que pasaba, entre las chicas.

– No lo arruines de nuevo, maldita perra imbécil cara de mierda – sonrió, empezando a pedalear, cuidado de no tirar a Zoe.