Rivales - Jenlisa -

Capitulo 15°

El fin de semana había sido un nuevo descubrimiento para Lisa. Ahora que podía desahogarse con sus amigas, descubrió que estar clandestinamente enamorada de Jennie no era tan malo. Bueno, era una mierda, pero ella no podía evitar sonreír al pronunciar su nombre y sus amigos a sentir nauseas, cada ves que lo hacia ( Por amigos hablamos de Jisoo y Bambam, Jihyo vivía la vida feliz y tranquila)

El lunes todo iba bien. Estaba con sus amigos caminando directamente a su casillero, pero cuando intento abrirlo, este no le dejaba.

-Intenta otra vez- le dijo Bambam y Lisa volvió a introducir la combinación, pero no quería abrir.

Estaba segura que era el suyo, lo había sido durante dos años. Le dio unos cuantos golpes a la puerta y esta no parecía querer ceder, ya iba a ser la primera clase y su tarea de ingles (¡JUSTO LA DE INGLES!) estaba en el casillero. Al final tuvo que desistir y fue hasta la clase, el profesor le resto puntos y ni se tomo el tiempo de escuchar la excusa de Lisa.

Ella apreto los dientes, el dia no podía empeorar. Milagrosamente ninguna de las chicas plásticas la habían molestado, aun. Esperaba que lo hicieran, ya que quería ver a Jennie.

Después de las primeras clases, al tomar su mochila las dos cuerdas se rompieron y le quedo colgando de la espalda.

-¿Pero que? -comenzó, observo como Kai y Taehyung chocaban los cinco disimuladamente antes de irse al salón.

Miro las correas y era obvio que alguien las había cortado, asi que tuvo que llevar su mochila con las manos.

-Creo que lo del casillero fueron ellos- murmuro Jisoo, un poco enfadada también.

Ya le habían informado al conserje y este había logrado abrir el casillero. Alguien manipulo la cerradura para cambiar la combinación de apertura, asi que Lisa tuvo que buscar otro. Llevo los libros junto con sus amigos a un nuevo casillero. Lo abrió, introduciendo la nueva contrasella, mientras a lo lejos se contemplaba como Kai se carcajeaba. -Joder- sus amigas la habían ayudado a traer todos los libros y sus cosas, pero ya que tenían clases diferentes tuvieron que retirarse, disculpándose con la oji verde.

Lisa fue guardando cada libro, no podía creer que tuviera tantos. Fue casi una sorpresa cuando escucho el ruido de unos pasos acercándose y al levantar el rostro se encontró con Jennie. Ella vestia una blusa y una falda, al igual que siempre y se había detenido, observando con asombro a la ojiverde.

Lisa no retuvo la sonrisa que se le formo en los labios, mirándola con una cara boba. Jennie, después de durar un rato sin decir nada y mirar a Lisa con la boca entreabierta, se sonrojo y carraspeo secamente.

-¿Qué haces aquí?

Lisa frunció el ceño hacia el chico que las observaba con cautela, parecía estar vigilándola.

-Tu querido novio me saboteo el casillero, así que me mudaron a este- dijo encogiéndose de hombros, sentía muchas mariposas en el estómago.

-Eso suena a algo que haría yo- dijo Jennie arrugando la nariz, y Lisa no pudo evitar mirarla con felicidad.

Era muy hermosa, debería ser un delito ser tan adorable y sexy al mismo tiempo. Si dependiera de ella, Jennie ya estaría tras las rejas por el crimen desde hace años.

Jennie, ante el silencio de Lisa y sus ojos verdes estructurándola, volvió a sonrojarse e intento abrir la puerta del casillero contiguo a Lisa, ignorándola. Sus dedos fallaban y tenia que comenzar desde el principio mientras que Lisa la contemplaba, estaba feliz ya que eran vecinas.

Levanto la vista y observo con burla a Kai, que abria los ojos dándose cuenta del error que había cometido.

Lisa se rio de su expresión y Jennie volteo a verla, con los ojos asesinos.