Capítulo 07

2K 119 34
                                    

Maeve.

Ya lo he decidido.

Le diré que si.

Estuve toda la noche pensando en ello, en como ya lo había dejado sin respuesta por ya una cantidad considerable de días.

Aunque la verdad, primero pensé en decirle que no. Pero después de tanto pensarlo me di cuenta que eso no era lo que yo quería decirle en realidad.

Quería decirle que si a pesar de todas las palabras y miradas que vendrían después hacia mí. Quería decirle que sí aunque no supiera cuánto tiempo durariamos de esa manera. Quería decirle que si sin saber cuando el tendría que casarse ni cuando yo tendría que irme lejos.

Pero le diría que sí y eso es lo que haré.

Así que estuve toda la noche planeando como haría mi trabajo del día siguiente al ir a limpiar las habitaciones.

Muy temprano iría a limpiar primero su habitación con la esperanza de encontrarlo y poder hablar con él sobre el tema. Después limpiaría las demás habitaciones.

Solo esperaba que él estuviera ahí ya que de una forma u otra el podría haber empezado su día desde muy temprano o podría no encuentrarse en su habitación por una razón u otra.

Así que una vez me despierto, me levanto, me preparo y salgo de la habitación para dirigirme a las habitaciones, me dirijo primero a la de él.

Y al llegar junto con mi carrito de limpieza, confirmo que él si está adentro porque Sr. Arryk todavía está en sus puertas lo cual significa que él todavía no se ha ido de aquí.

Intercambio una mirada con Sr. Arryk y él me da un leve asentimiento con su cabeza que le devuelvo, permitiendome la entrada a la habitación.

Y al entrar, mis esperanzas son altas al encontrarlo aquí antes de que inicie con su día. Pero todo está en completo silencio y no hay nadie.

Su cama está destendida y no parece que haya desayunado todavía ya que su mesa está limpia, sin platos sucios ni nada.

Cautelosa, me dirijo a su cuarto de baño, teniendo la intención de tocar y llamar su nombre, pero las puertas están abiertas y él no está.

Entonces ¿en dónde está?

Todavía es temprano.

¿Tal vez decidió no desayunar y empezar con su día antes de que amaneciera? Porqué si es así, entonces no podré hablar con él hasta la noche y eso si el momento está a mi favor.

Entonces otra idea cruza por mi mente.

¿Debería de preguntarle a Sr. Arryk allá afuera si volverá pronto?

No. Será inapropiado.

Tal vez a el príncipe no le guste saber que le pregunté por él a su guardia, por lo mismo de que es inapropiado y eso definitivamente llama mucho la atención.

Pero... necesito saberlo.

Así que sin pensarlo demasiado y una vez más rompiendo las reglas como lo he hecho ya incontables veces por mis acciones, abro la puerta y me asomo cautelosa observando al guardia de pie como estatua.

—¿Disculpe? ¿Sr?

Mi pequeña voz a su lado, llamandolo, hace que Sir Arryk me observe, un poco confuso, pero lo hace y después gira todo su cuerpo hacia mi.

—¿Si?

Y me sentí ridículamente pequeña por su alta figura y también por su tono fuerte de voz.

𝐆𝐑𝐄𝐘 𝐀𝐍𝐃 𝐁𝐋𝐔𝐄──𝐀𝐄𝐌𝐎𝐍𝐃 𝐓𝐀𝐑𝐆𝐀𝐑𝐘𝐄𝐍.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora