Capitulo 42. Más cerca de las respuestas

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Estamos en la entrada del edificio del Consejo, he venido con Caleb no como Luna sino como Alfa, mi Manada ya está registrada por lo tanto tengo derecho a asistir a la reunión.

Es hora de entrar y comentar nuestras inquietudes, después de varios minutos terminamos de hablar, se escuchan murmullos y cuchicheos eso algo que siempre te detestado pero en fin no puedo hacer nada.

-En mi comunidad también han desaparecido varios niños- dice un hombre con orejas picudas y piel muy pálida, creo que se trata de un elfo, la última vez que estuve aquí no creo recordar a alguien como el.

Detrás de él se levantan varias personas más afirmando lo mismo, las voces se elevan y se forma un pequeño alboroto.

-Silencio, no creo que sea necesario alarmarse son casos aislados-dice el presidente del Consejo.

Me armo de valor y me dirijo a él con desprecio:

-Casos aislados? Cómo se nota que usted no ha perdido a nadie de su familia... Hasta ahora hemos contado más de cincuenta niños desaparecidos solo de las Manadas del Norte, ahora sí sumamos los niños de las demás especies, sumarán muchos más-

Todos miran con desprecio a ese señor, después de más de hora de debate, quedamos de acuerdo en buscar pistas y culpables. Firmamos un tratado en el que nos ayudaremos unos a otros y buscaremos y juzgaremos a los culpables.

Volvemos a la Manada con una buena sensación, no estamos más cerca de hayar a los culpables pero al menos ya tenemos más ojos y oídos para encontrar al culpable o los culpables.

-Alfa, Alfa mi hijo no está lo he dejado solo un minuto y cuando he vuelto ya no estaba-dice una mujer con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada.

Mierda, no puede ser, solo hemos estado unas horas fuera y ya se han llevado a alguien.

Llámanos a todos los guardias y a todos los hombres, también llamamos a las mujeres sin hijos para que ayuden en la búsqueda, quizás solo ha sido una falsa alarma.

Durante toda la tarde hasta llegada la noche no cesa la búsqueda, por desgracia no parece ser una travesura. Pero hay algo que se me escapa como pueden entrar y salir sin ser vistos?

Es hora de llamar a la bruja, la llamo así porque ella me pidió que lo hiciera prefiere que se refieran a ella como bruja que por su nombre. Dice que así despierta miedo.

Me siento en el sofá de casa y espero a su llegada, diez minutos más tarde alguien llama a la puerta.

- Voy a dejar de usar esto, cada vez que lo uso me deja más agotada-dice limpiándose el polvo de la ropa.

No digo nada ella se sobra y se basta, va a la cocina y se sirve una copa de vino, después de tomarsela saca unos objetos de su bolso y pinta algo en el suelo.

En otro momento me enfadaría por manchar el suelo de esa manera, pero no es momento para quejas. Comienza a recitar unas palabras y puedo ver un humo azul saliendo del suelo.

Ella se queda en silencio observando con atención. Pasan varios minutos así hasta que ese humo desaparece totalmente.

-Esto es obra de un brujo o bruja, no viene solo tiene ayuda de vampiros y hombres lobo-

-Pero...-

- No me pidas más explicaciones, solo he encontrado magia aquí y el aroma de los otros-

- Eso lo entiendo, lo que no entiendo es porque se llevan a los niños-

- No tengo respuesta para eso, pero al menos ya tenéis algo para empezar a buscar-

Dejo a Luz con la bruja y salgo en busca de Caleb, agradezco que no me cobre nada por sus servicios, aunque tratándose de ella seguro que algo pedirá, si no es en este seguro que será en el siguiente.

Llegó hasta Caleb, este no parece muy contento, está vez no le diré nada porque yo tampoco lo estoy y me imagino como se siente al perder alguien de su Manada.

- Caleb, la bruja ha descubierto algo... acompáñame hasta la casa donde el niño desapareció y pídele a tu mejor rastreador que nos acompañe-

Por extraño que parezca no dice nada solo obedece, en serio aveces pienso que me lo han cambiado por otro, ahora confía en mí y no cuestiona mis decisiones.

- Qué hacemos aquí? Ya hemos mirado y no hemos visto nada.-dice Caleb con frustración.

- Jack dime qué hueles por favor?-

El rastreador comienza a examinar y a olfatear toda la estancia, pasados unos minutos se acerca a mi lado.

- Alfa, digo Luna...-

--Serenety también vale!- respondo sonriendo.

- Perdón, como se me ha podido pasar, yo lo siento...-

-Qué sientes? Qué pasa?-

-Déjalo hablar y no te pongas como un basilisco-

- Huele a vampiros al menos dos y hay otro lobo su aroma esta aquí, además hay otro que no se distinguir. Todo es muy tenue lo han debido ocultar muy bien pero ha debido de pasar algo para que hayan cometido un error-

-Tú ya lo sabias!-dice Caleb mirándome.

-Algo sabía, creo que se que ha podido pasar... Siempre se llevan dos niños por ataque y está vez solo se han llevado uno. Algo o alguien los debió interrumpir.-

- Vamos otra vez a hablar con la madre para ver que recuerda, además si sigue tu bruja aquí quizás ella pueda ayudar con los recuerdos de esta señora-dice Caleb saliendo de la casa.

-Sabes qué nos costará cara su ayuda? Ella no quiere dinero ni bienes materiales, al menos espero que no nos pida ningún año de vida.-

-Creo que te ha cogido cariño, por lo que no será muy mala-

- Eso dices tú-

****

-Quiero el bebé que crece en tu vientre-dice mirando mi barriga inexistente por el momento.

Me quedo pálida por la petición, primero aunque imaginaba que podría estar embarazada no podía llegar a pensarlo como algo real, al menos por el momento. Y segundo como comprende que le voy a dar la vida de mi hijo...

-Era broma, solo quería ver la cara que ponía tu querido Alfa, aunque para ser sincera me ha defraudado, no ha intentado matarme y se ha quedado estático-

Creo que el también se ha quedado impactado por la revelación.

- Voy a hacer una regresión con ella, pero aunque no me lleve la vida del bebé está vez necesito un pago, si quiero seguir usando magia tengo que pagar por ello-

Todos asentimos y dejamos que la bruja se ponga con la regresión. Le pide a la señora que se tumbe en el sofá y que cierre los ojos.

Destinada al AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora