Destinada al Alfa

Capitulo 27. Alfa

Dos semanas han pasado desde la partida de Caleb y no ha pasado ni un solo día en el que mis pensamientos no fuesen suyos.

En su ausencia me he ido a vivir a la casa que me ofreció la doctora, Isabella y Fede no estaban de acuerdo con mi decisión. Pero es algo que no iba a cambiar yo quería que ellos disfrutasen de su intimidad, bueno de su compañía y de sus besos.

Ya que Fede había decidido respetarla hasta su mayoría de edad y hasta que ella se sintiera preparada, ella por desgracia solo había experimentado dolor y amargura con el sexo. Necesita amar y sentirse amada para dar ese paso. Estoy segura de que al lado de Fede lo logrará.

Termino de trabajar, voy a comer con mi familia porque eso es lo que son, después de comer voy a entrenar junto a Fede, lo he pospuesto demasiado y no quiero volver a pasar por algo similar sin poder usar todas mis armas.

Isabella también quiere aprender a defenderse pero ella entrena con Fede por las mañanas y por lo que me ha dicho Fede aprende muy rápido, tanto que pronto no tendrá nada más que enseñarle.

Nada más salir al bosque Fede me pide correr, veo que esto no cambia aunque cambie de lugar. La antigua Serenety habría llorado y pataleado por tener que correr pero la nueva va obedecer y aprender.

Comienzo a correr y aunque estoy cansada no me detengo hasta que mi entrenador me dice que puedo hacerlo.

Después de correr practicamos lucha cuerpo a cuerpo y aunque recibo una soberana paliza soy capaz de golpearlo en varias ocasiones. Me siento feliz.

Es el momento de transformarme, hace tanto tiempo que no lo hago que no se si voy a ser capaz de conseguirlo.

Me concentro y pienso en mi forma de loba, cierro lo ojos y visualizo a una gran loba blanca de ojos violetas. Después de unos segundos los vuelvo a abrir. Miró como mi cuerpo no ha cambiado, no lo entiendo por qué no lo he conseguido? Fede me explica que al igual que yo mi loba a sufrido, si nota que yo tengo miedo ella también lo tendrá.

Esta bien ya lo entiendo, vuelvo a cerrar mis ojos vuelvo a visualizar esa figura pero está vez hago algo más nos doy ánimos:

Nunca más de rodillas, nunca más humilladas, nunca más esclavas, nunca más asustadas,nunca más, nunca...

Abro los ojos y puedo ver unas patas blancas rascando en el suelo, le doy el control y dejó que juegue, que corra, que cace, que sea libre..

****

He escuchado la alarma de la comunidad, cojo a Luz y me dirijo hasta la zona segura, dejo a mi hija junto a Isabella y me dispongo a luchar, al principio me lo impiden, pero no por mucho tiempo. Somos pocos y la mayoría mujeres y niños. Por lo que un lobo más nunca es mal recibido.

- Si no regreso...-

- No te permito que digas eso- responde Isabella enfadada, aunque yo sé que más que enfado es miedo.

- Escúchame, voy a hacer todo lo posible por volver pero si no lo consigo prométeme que cuidaras a Luz como si fuese tu propia hija-

Ella asiente con la cabeza y comienza a llorar. Me acerco a ella y la abrazo con fuerza y cariño.

- Te quiero, eres fuerte, mucho más que yo. No lo olvides nunca hermana...-

Salgo del pequeño refugio con un nudo en el estómago, aunque estoy un poco asustada el miedo no es malo del todo, produce adrenalina y bien gestionado una fuerza sobrenatural.

Llegó al claro me transformo en loba y me situo al lado de Fede, este me dedica una mirada desaprobatoria, yo por el contrario le gruñó y le saco los dientes

** Sofía son unos veinte, no estamos seguros de sus intenciones aunque tenemos claro que no vienen en son de paz**

** Espera, cómo nos podemos comunicar por el link? eso solo lo pueden hacer miembros de una misma Manada y con su Alfa o con su mate y no me llames Sofía!**

** Que pesada eres, digamos que tú y yo compartimos una línea de sangre familiar. Pero no te ralles que es muy lejana y no preguntes más y céntrate. Vienen por la izquierda unos pocos y los otros por la derecha. Ataca a cuello y cúbrete**

Después de esta pequeña charla, todo es silencio, todo está demasiado tranquilo. Esto es la calma que precede a la tormenta.

Unos segundos después cinco lobos aparecen por mi derecha somos tres contra cinco, solo espero que su ventaja no lo sea tanta.

De un momento a otro un lobo marrón con una gran cicatriz en el rostro se lanza sobre mí, es tal el impacto que caigo al suelo, intenta morderme pero gracias a todo lo aprendido puedo esquivarlo. Una idea cruza por mi cabeza. Debo de estar loca por si quiera pensarlo...

Solo lo he hecho dos veces y ninguna de ellas me ha salido bien, pero ahora mismo no veo otra opción. Espero poder lograrlo y no morir en el intento.

Me transformo en humana, el lobo parece desconcertado aprovecho ese justo momento y golpeó con mis piernas lo más fuerte que puedo su estómago. No se cómo lo hago pero cae hacia atrás, ahora o nunca me transformó rápidamente y me lanzo sobre su cuello desgarrando la carne y arrancando un gran pedazo de su carne.

La sangre brota a chorros, colocó mi pata sobre su pecho y veo como se desangra. No me siento orgullosa de quitar una vida, pero era la suya o la mía.

Las peleas cesan, los lobos invasores se paran y agachan su cabeza en sumisión. No entiendo que es lo que pasa, miro hacia Fede confundida, el parece leer mis pensamientos y me parce ver cómo esboza una sonrisa.

** Querida has matado a su Alfa, uno es dueño de lo que mata**

** Qué estás insinuando?**

** Nada, ahora tú eres su Alfa, y creo que no lo eres solo de ellos sino de toda la comunidad**

Pero que demonios dice! La gente del refugio comienza a llegar, todos y cada uno de ellos se arrodillan ante mi y me muestran su cuello.

Cómo voy a ser yo la que cuide de ellos, cuando apenas estoy aprendiendo a cuidar de mi.