Capitulo IX

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Johan había comenzado su día como era lo habitual, tomó un baño, hizo las compras y en  la tarde se preparó para el trabajo. Después del maravilloso tiempo pasado con Alec podía estar aún más seguro de sus sentimientos, era la primera vez que alguien le gustaba tanto, quería estar con él todos los días, lo que sentía al tocarlo no lo había sentido con nadie más.

Cuando llegó al trabajo se cambió de ropa y se puso a atender en la barra, era un día normal hasta que sus ojos se enfocaron en una de las parejas de chicos que se encontraban en la pista bailando, los observó con detención y dejó caer un vaso al ver que uno de los chicos era Alec, tenia una expresión de felicidad en su rostro, se notaba que estaba disfrutando el momento, el pecho de Johan se encogió. Limpió el desastre que había causado e intentó concentrarse en su trabajo, sin embargo no podía evitar mirar como Alec parecía ser cercano al chico con el que bailaba, que hacia ese chico con Alec? sería alguien que había conocido allí o era el chico con el que fue al motel?, las dudas no lo dejaban tranquilo. Entonces vio que ellos se dirigían a la barra y se acercó a ellos, al ver que su compañero iba a atenderlos lo paró y le dijo que él se encargaría.

- Alec?.- preguntó al acercarse, intentó sonar lo más normal posible para que no se notara su ansiedad. Alec levantó la mirada con una expresión de sorpresa.

- Johan, trabajas aquí?- contestó con una sonrisa.

- Sí, vengo cuatro veces a la semana.- 

- Que coincidencia.- dijo con una sonrisa. el corazón de Johan se calmó un poco, Alec no estaba haciendo nada malo, aunque eran exclusivos no estaban de novios, por lo que no había nada que reprochar, lo sabía, pero aún así no quería verlo con otro chico.

- Se conocen?- preguntó Liam dirigiéndose a Alec.

- Si, somos amigos, Johan me ha ayudado mucho.- amigos, escucharlo decir eso hizo que Johan se sintiera un poco triste, pero al menos tenían algún tipo de relación.

- Ya veo.- respondió Liam.

- Él es Liam, nos conocimos en un bar hace unos días.- dijo Alec un poco nervioso. Así que realmente era el chico del motel pensó Johan, por qué se habían juntado nuevamente? sentía como comenzaba a enloquecer, sin embargo al mirar la cara de Alec quien se encontraba incomodo sintió un poco de alivio al ver que se preocupaba por como él reaccionaria.

Alec no sabía porque pero se sentía nervioso al ser visto por Johan, presentar a Liam lo hizo sentir incomodo, solo había sido ayer cuando dijeron que serían exclusivos y él había salido a bailar con el chico con el que había ido a un motel, sin embargo no quería mentirle a Johan, pero tenia miedo de como reaccionaria, y si quería terminar su relación? por alguna razón se sentía mal de solo pensarlo. Elevó la mirada para ver la cara de Johan, estaba sonriendo, no era una mirada de reproche, solo era la mirada amable de siempre, no sabía porque pero se sintió mal al ver que no le importaba.

Liam le pidió a Johan un cóctel dulce para Alec y para él una cerveza, Johan los preparó y los entregó, luego se excusó ya que debía seguir trabajando.

- Espero que se diviertan.- dijo sonriendo y luego se marchó a atender a los demás clientes.

- Es un tipo muy agradable.- dijo Liam.

El resto del tiempo Alec no pudo quitarse el mal sabor de boca que le había provocado la reacción de Johan y aunque siguieron bailando Alec solo pensaba en si Johan lo estaría viendo, tomó un momento para dirigirse al baño y vio como un lindo chico estaba coqueteando con Johan aunque este no lo estaba tomando en serio, Alec se enfadó por la insistencia del chico, como podía molestar a Johan de esa manera mientras trabajaba, entonces vio como Johan recibía un papel de su parte y por fin se iba. 

...

Cuando terminó el turno Johan se cambió y salió por la puerta de servicio, se sorprendió al ver a Alec en cuclillas esperando.

- Qué haces aquí?- preguntó.

- Buen trabajo, te estaba esperando.- Alec tenia sus mejillas coloradas por el frio.

- Por qué no te fuiste con tu amigo?

- Quise esperarte, le dije que se fuera solo.- decía la verdad, luego de ver como le coqueteaban a Johan tuvo la urgencia de verlo y hablar con él, cuando lo vio entendió porque el chico lindo era tan insistente, Johan era muy guapo.

Al escucharlo decir eso Johan se sintió muy feliz, estaba a punto de sonreír involuntariamente pero se contuvo.

- Tienes que trabajar hoy?- le preguntó.

- Tengo el turno de tarde.

- Entonces ven a mi casa.- Alec asintió y se dirigió al departamento.

Cuando llegaron Johan pensó en preparar una comida simple para que comieran, luego de eso podrían dormir y despediría a Alec cuando debiera irse al trabajo, se sentía en las nubes. Estaba a punto de entrar a la cocina cuando de repente Alec lo empujó contra la muralla y lo besó.

- Espera...- dijo Johan, pero Alec no le hizo caso, siguió besándolo mientras le desabrochaba el pantalón.- espera, comamos antes Alec.

El intento por detenerlo solo hizo a Alec más agresivo, no quería parar, la imagen de alguien intentando robarse a Johan le hacia hervir la sangre, miró a Johan a los ojos mientras se arrodillaba, bajo el boxer que estorbaba y observo el miembro erguido que aparecía.

- Qué estas haciendo?- dijo Johan justo antes de que Alec metiera el miembro a su boca.- Esto es una locura.- la imagen de Alec lamiéndolo era demasiado estimulante, era la primera vez que hacia tal cosa, sentía como perdía la cordura, no pudo controlar el impulso de tomar por el cabello a Alec y controlar su movimiento, la cara llorosa de este solo hacia que se excitara cada vez más.

Johan no podía apartar la vista de Alec, la habitación estaba repleta de sus gemidos, el pantalón de Alec mostraba que estaba a punto de explotar, en ese momento Johan sacó su miembro de la boca de Alec y sostuvo su cabeza con ambas manos.

- Si quieres continuar, muéstrame cómo juegas con tu trasero.- decidió actuar un poco malo como castigo.

Lluvia de besosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora