Lluvia de besos

Capitulo XI

Alec miraba su teléfono impaciente, desde el día en que salió con Johan no había podido sacárselo de la cabeza, sabía que era guapo pero ahora brillaba ante sus ojos, esa noche que no tuvieron sexo había cambiado algo en su relación, ahora Alec era consiente de que Johan lo trataba tiernamente, cada mañana le escribía y todas las noches lo llamaba, algo comenzó a aflorar dentro del corazón de Alec quien ahora esperaba a que el teléfono sonara, fue entonces cuando recibió un mensaje, rápidamente lo abrió para leerlo pero se decepcionó al ver que no era de Johan.

- A pasado un tiempo, quieres salir a beber?

Era Liam, desde la ultima vez que se encontraron con Johan en el club le había estado rechazando las salidas, no sabia porqué pero temía que Johan se enfadara con él, sin embargo ahora mismo necesitaba distraerse y sus amigos se encontraban ocupados con los exámenes de la universidad por lo que pensó que salir un rato con Liam no sería tan malo.

- De acuerdo.

- Genial, nos vemos a las 18:00 en la estación.

Luego de encontrarse fueron al mismo bar que la última vez, el ambiente era bueno, a decir verdad Liam era excelente como amigo, la conversación fluía sin momentos incómodos y era agradable charlar con él, debido a las similitudes en sus pasados Alec se sentía cómodo hablando de sus problemas. Por otra parte Liam sentía lo mismo, nunca había hablado de su pasado con alguien que lo escuchara seriamente como lo hacía Alec, siempre eran charlas superficiales y respuestas cortas, en cambio con él podía charlar largos ratos sin sentirse incómodo de dar a conocer su historia.

Liam le contó como fue mudarse y vivir por su cuenta después de abandonar su casa, como le había afectado dejar de hablar con su familia y cuánto le había costado confiar en alguien lo suficiente como para iniciar una vida con esa persona; Alec escuchaba atentamente mientras bebían y se daba cuenta de lo solo que se sentía Liam. Por su parte si bien dejó su casa aún mantenía contacto con su hermana, además tenía a su tío y a Johan por lo que no se sentía solo, su proceso fue un poco más sencillo ya que no estuvo solo, tenía dos amigos de la escuela quienes habían comenzaron a salir en primer año, cuando él los conoció en segundo año los encontró besándose en la azotea por lo que ellos se asustaron de ser expuestos y le rogaron que no dijera nada, sin embargo Alec no tenía la más mínima intención de decirle a alguien, al contrario le alivio saber que había más gente como él a su alrededor, en ese momento sintió que podía confiar en ellos y les dijo que él también era gay, luego de eso fueron inseparables, la ciudad donde vivían seguía siendo pequeña y conservadora por lo que era un tormento ser gay abiertamente, así que para ellos tres fue un alivio tenerse como amigos, aunque no eran de la misma clase se juntaban en todos los descansos e iban a casa juntos, también salían en sus días libres y Alec iba a sus casas a jugar videojuegos, ellos hicieron que toda la tensión de Alec se aliviara y cuando llegó el momento de que su familia lo supiera se fue sin mirar atrás. Sus amigos habían decidido abandonar la ciudad cuando comenzara la universidad y el tío de Alec le había ofrecido el espacio sobre el café para que viviera allí por lo que tomar la decisión fue mucho más sencillo que para otras personas, y ahora mismo era mucho más feliz de lo que pensó que sería alguna vez. 

Conversaron por horas como si fueran amigos de años, cerca de las diez decidieron que ya era hora de irse a casa por lo que caminaron entre risas a la estación, ambos estaban borrachos y se tambaleaban al caminar, cuando llegaron a la estación llegó el momento de separarse y Liam abrazó a Alec.

- Jamás había hablado tanto con otra persona, hay que hacerlo de nuevo.

- Claro que si.- dijo Alec riendo.

Cuando iban a separarse Liam se aferró a la cintura de Alec y lo besó, un beso intenso y profundo. Las piernas de Alec temblaron debido al alcohol, se sentía muy bien, quería dejarse llevar en ese mismo momento, sus manos se dirigieron al cuello de Liam para aferrarse pero antes de que pudiera hacerlo el rostro de Johan pasó por su mente y rápidamente volvió a estar sobrio, empujó hacia atrás a Liam y dijo:

- Lo siento.... no puedo.

- Por qué? la ultima vez estuvo bien.- dijo Liam con un rostro dolido.

- Ahora no lo está, perdón.- dijo Alec con la cabeza mirando el piso y con sus manos aún en el pecho de Liam apartándolo.

- Entiendo.- dijo Liam mientras tomaba las manos de Alec y las bajaba, había entendido lo que quería decir, probablemente tenía algo que ver con el chico llamado Johan.- pero aún podemos seguir siendo amigos cierto?

- Por supuesto que si.- dijo Alec mientras levantaba la mirada, se veía como si fuera a llorar. Luego de eso Liam hizo algunos chistes para aligerar el ambiente y se despidieron.

Alec estaba a punto de subir al tren cuando su teléfono sonó, era Johan. Sintió como su pecho se encogía, como le iba a explicar esta situación, tenía miedo de que su relación acabara, en medio de todos esos pensamientos el teléfono dejó de sonar.