Las puertas del salón se abrieron de par en par y los hermanos ingresaron, al fondo del pasillo se encontraba Will quien no pudo evitar llorar al ver lo hermosa que se veía Alice con el vestido, a su lado estaba Daniel y sus amigos quienes eran los padrinos, por el otro lado se encontraban las damas de honor quieres eras amigas de Alice, cuando se acercaban al altar Alec se encontró con los ojos de Johan quien estaba sentado en los asientos de la familia de la novia, al verlo allí sintió un profundo alivio y lo inundaron las ganas de abrazarlo, sin embargo decidió esperar al final de la ceremonia. Al llegar con Will, entrego la mano de su hermana.
- Debes hacerla muy feliz.- dijo Alec.
- Lo juro con mi vida.- contestó Will.
Cuando la ceremonia terminó todos los invitados se dirigieron al salón de banquetes donde Johan se acercó a Alec y lo tomó de la mano al entrar.
- Te extrañe.- dijo Johan.
- Yo más.- contesto Alec molesto.
- No lo creo.- replicó Johan mientras lo besaba.- no sabes lo celoso que me sentí por no ser quien dormía a tu lado estas dos semanas.
- Eran camas separadas.
- Eso no hace diferencia para mi.- dijo seriamente.
- Tendrás que esforzarte por hacerme pasar un mal rato.
- Por supuesto.
La celebración de la boda salió perfecta, Alice no invitó a sus padres por lo que Alec se encargó de dar el discurso para los novios y cubrir el rol del padre de la novia. Luego del vals de los novios las parejas invitadas también se unieron a la pista y por supuesto Johan también extendió su mano Alec para bailar.
Luego de la fiesta Alec pensaba en volver a la casa de Alice ya que ella se iría de luna de miel, sin embargo Johan tenía otros planes, había reservado una habitación en un hotel con vista al Big Ben, cuando llegaron a la habitación Johan no pudo evitar las ganas de abrazar a Alec y comenzó al besar su rostro, luego fue desvistiéndolo y besó cada parte de su cuerpo, lo tiró suavemente sobre la cama y beso sus pies.
- Sabes que me tienes rendido a ti cierto?.- dijo con una expresión seria mientras sostenía el pie de Alec cerca de su boca, Alec sintió un escalofríos y su rostro enrojeció.
Johan comenzó a desvestirse y siguió besando a Alec mientras lo tocaba. Alec se percató del miembro erguido de Johan y se levantó empujándolo hacia atrás, se inclinó y metió el miembro a su boca.
- Haa.. es suficiente Alec, quiero hacerte sentir bien.- dijo Johan entre gemidos.
- No eres el único que puede tocar.- dijo Alec mientras lamía el miembro de Johan con una sonrisa.
Johan dejó escapar un suspiro a modo de derrota y comenzó a estimular a Alec con sus dedos. Cuando sintió que estaba cerca de terminar empujó a Alec y comenzó a meter su miembro, Alec dejó escapar gemidos mientras las caderas de Johan no dejaban de moverse, comenzaron a besarse y a entrelazar sus lenguas mientras el calor de esparcía por sus cuerpos, Johan jaló a Alec de su brazo para que ambos quedaran sentados mientras aún tenia su miembro adentro y siguió embistiendo hasta que ambos llegaron al climax, luego se miraron a los ojos y se dieron un apasionado beso donde unieron sus lenguas. Los dos habían estado dos semanas sin sentir el cuerpo del otro por lo que siguieron hasta quedar exhaustos y satisfechos.
Ya rendidos en la cama Alec se encontraba con su cabeza en el pecho de Johan mientras este acariciaba su espalda y contemplaban la hermosa vista nocturna que mostraba el gran ventanal en dirección al Big Ben. Los rayos del sol comenzaban a asomar para dar paso al amanecer.
- Sabes Alec estas dos semanas que estuvimos separados me dieron mucho tiempo para pensar en que me siento vacío al despertar y no tenerte a mi lado.- dijo Johan.
- Me siento igual, me hizo falta ver tu rostro cada mañana al despertar.- dijo sonriendo Alec.
- Eso es perfecto.- dijo Johan mientras se levantaba de la cama.
- Qué cosa?- preguntó Alec mientras se sentaba en el borde de la cama. Johan lo miró fijamente y se arrodilló ante él tomando su mano.
- No quiero volver a despertar sin ti a mi lado, te gustaría que viviéramos juntos?- Alec se sorprendió ante la pregunta, pensó que sus oídos le habían jugado una broma pero al ver la cara seria con la que lo miraba Johan se percató de que era real.
- Estas seguro de que quieres vivir conmigo?- preguntó aguantando las lagrimas.
- Si.- respondió seriamente.
- Soy muy posesivo.
- Si.
- Y celoso.
- Si.
- Tendrás que volver todas las noches.
- Si.
- Y pasar todos tus días libres conmigo.
- Si.
- Soy exigente con la limpieza.
- Si.
- No quiero ser el único que cocine.
- Está bien.
- Aún así quieres vivir conmigo?
- Por supuesto.
FIN
ESTÁS LEYENDO
Lluvia de besos
Teen FictionAlec un dulce chico de veintidós años recién salido del closet, jamás ha tenido novio y mucho menos dado un beso, un día conoce a Johan de veinticuatro años quien se declara a si mismo como bisexual, así que decide pedirle consejos sobre como besar...