19.

5.5K 272 81
                                    

El ambiente había mejorado desde el partido de ayer, y con ello Pedro también. Toda la noche estuve mimandolo y al parecer hizo efecto, cuando me despertó estaba mucho más feliz y de buen humor.

Yo no dormí mucho sinceramente, me la pasé pensando en todo el cambio drástico que tuvo mi vida de un día para otro y llegué a la conclusión de que fue lo mejor que me pudo pasar, es decir ¿quién está con la mejor persona que existe? Solo yo.

Pedro me levantó más temprano de lo habitual porque hoy vería si me dan el alta médica para entrenar con los demás o no, eso también me quitó un poco el sueño.

–. Pablo...– Susurró Pedro mientras me atraía un poco más hacia él con el brazo que tenía en mi cintura –. Despierta príncipe– Dejó un suave beso en mis labios, cosa que me causó cosquillas y me hizo reír un poco, solamente negué y escondí el rostro en su cuello.

–. Hmm... Déjame dormir un poco más, por favor– Él rió y negó suavemente.

–. No puedes, dentro de media hora tenemos que bajar con tu fisio y con el mister a ver que te dicen– Me separé para verlo con el ceño ligeramente fruncido.

–. No quiero...– Él suspiró y se acercó un poco más a mi para besarme suavemente tomándome con cariño del rostro. Al instante todo mi "mal humor" se fue y me enfoque exclusivamente en poder disfrutar del sabor de sus labios, ese ligero sabor a café que parecía ser parte de él y simplemente me traía loco.

Me subí en su regazo durante el beso comencé a mover suavemente mis caderas, él se separó y me detuvo con sus manos.

–. Príncipe, ahora no– Me dio algo de risa su tono de voz y me arrime más a él.

–. ¿Aunque sea uno rapidito?– Volvió a negar y cerró los ojos antes de suspirar.

–. Me tientas, pero no– Me deje caer sin mucha fuerza sobre él y volvió a rodear mi cintura.

–. ¡Pero no me quiero bañar!– Proteste ¿mi actitud parecía de niño pequeño? Sí, pero estaba demasiado cómodo así tal cuál.

–. ¡Pero tienes que hacerlo! Así te despiertas, además como hace un poco de frío te voy a dar una de mis sudaderas para que la uses, si quieres claro– Asentí rápidamente y me levanté de la cama para buscar la equipacion para ponerme.

–. Si me lo dices así me baño en 3 minutos– Entre rápidamente al baño, me quite la ropa y comencé a ducharme.

Efectivamente no tardé más de 4 o 5 minutos, pero sali con el polo y el pantalón de la selección y luego ya tomé la sudadera de Pedro y me la puse.

Él siguiente en ducharse fue él, tardo un poco más que yo pero el simplemente se puso la equipacion y chaqueta de la selección. Bajamos a paso lento hasta la sala de fisioterapia y fuera nos esperaba Luis Enrique, al vernos a los dos juntos preguntó por Pedri, pero el alegó que me acompaño porque me cuidó todo este tiempo (me dejó tirado en los vestuarios) y porque tenía curiosidad de saber que tal estaba.

Todos pasamos y yo me recoste en la camilla con Pedro de un lado y con el mister del otro. Comenzó examinandome y haciendo todas esas cosas para determinar mi posibilidad de volver a entrenar o no.

El fisioterapeuta anotó todo en lo que parecía ser una ficha médica y después determinó que ya podía volver a entrenar con mis compañeros, me emocioné un poco y mientras salíamos le comenté al mister como fue mi recuperación y demás. Le dio las gracias a Pedri por atenderme bien y luego volvió a su habitación pero dijo que nosotros ya podíamos ir al comedor para desayunar.

Pov. Pedri:

Al entrar vimos que ya varios de nuestros compañeros estaban allí desayunando, pero me llamó particularmente la atención que en nuestra mesa todos estaban con la equipacion menos dos personas: Gavi y Eric.

La noche más linda [Pedri & Gavi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora