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La Igualdad de condiciones conlleva a la igualdad de resultados, por ende el rechazo a la Igualdad nace del apego a la Voluntad. La única razón por la que existe gente diferente es por haberse desarrollado en entornos diferentes, y toda Desigualdad entre individuos nacería producto de una Desigualdad inicial y ajena a su Voluntad. No tiene sentido castigar a alguien por portarse "Mal", ni tampoco glorificar a alguien por portarse "Bien", al fin y al cabo solo están ahí debido a sus causas, las cuales estuvieron fuera de su control. En este punto es donde surgen las preguntas: "¿Hasta que punto deberíamos Igualar a las personas unas con otras?" "¿Deberíamos ser todos iguales producto de haber comprendido la Inexistencia de una Voluntad ajena a las causas?" Sin embargo, mi pregunta favorita es: "¿Hasta que punto se puede considerar como positivo el deseo de Igualdad entre seres humanos?" Porque a pesar de sentirnos bien cuando vivimos en equidad con otros individuos, también nos gusta sentirnos Superiores.

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