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Quien no produce, muere.

La producción a sido, y naturalmente será, la base sobre la cual le es posible al Individuo tener una vida digna.

Las relaciones con otros individuos son más o menos gratas en el marco de la producción, siendo este el único aspecto real que determina la valía de una persona, o resumidamente: "Las personas valen en base a su capacidad de Producir".

Esta frase puede sonar incomoda, repudiable y equivocada, ya que podemos imaginarnos múltiples escenarios donde personas con capacidades limitadas pueden ser queridas, valoradas y amadas, a pesar de sus limitaciones (Como Neurodivergentes, Discapacitados, o personas que sufrieron una lesión en alguna parte del cuerpo), sin embargo, esto no nos sirve de Contra-agumento, puesto que se trata de una interpretación errónea del significado real de la frase.

La Producción no debe ser entendida en materia de trabajar el entorno de forma tangible, sino como la capacidad de generar sentimientos en las otras personas, bajo este marco una persona Discapacitada sigue siendo igual de capaz que una persona completamente íntegra y funcional, dado que la Estima que se les puede tener a ambos individuos no guarda relación con el trabajo físico que puedan realizar, ni con los cambios tangibles en el ambiente, por ende, el término "Discapacitado" debe ser entendido como "Alguien con dificultades para ejercer un cambio fisico y tangible en el mundo material", y no como "Alguien incapaz de producir sentimientos de ningún tipo".

Una vez aclarado esto, se hace evidente que, incluso en el caso de las personas con discapacidades, la producción sigue siendo el único medio por el que se determina el valor de una persona, su capacidad de producir sentimientos.

Si, las personas discapacitadas valen, pero esto está lejos de servirnos como argumento para refutar la teoría del valor en base a la producción, porque estos aún pueden producir sentimientos, tales como la Empatia, el Amor, la Estima y el cariño, además, esto se acopla muy bien a las ideas Sentimentalistas (Véase Entrada 22).

La Moral, pese a ser el fenómeno social que nos mantiene como especie, se encuentra teñida por una clara selectividad que es intrínseca al ser humano, una selectividad que se decanta por aquellos individuos que Produzcan más, aquellos que más Sentimientos logren alcanzar.

Ecos De Un Alma.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora