Y yo que no creía en el amor... me di cuenta que, a veces, las cosas más bonitas de la vida pasan dónde y cuándo menos te lo esperas.
HISTORIA TOTALMENTE FICTICIA E INVENTADA.
-Aquí tenéis las llaves de la habitación de nuevo -nos dice la recepcionista mientras nos facilita las tarjetas de las habitaciones. Esto de que las guarden mientras sales fuera del hotel es ideal para personas propensas a perderlas. Como yo, claro.
-Gracias -respondo mientras cojo la tarjeta, aunque la chica me mira de nuevo y se dirige a mí-.
-Perdone -llama mi atención, y me giro hacia ella-, han dejado esto para usted.
Me entrega un sobre blanco, bajo la atenta mirada de Samuel y Lucas.
-¿Para mí? -pregunto extrañada. No conozco a nadie en Sevilla y por la cara de sorpresa de mis compañeros sé que ellos no han sido-.
-Sí, Lara F, habitación 204, ¿verdad?
Afirmo con la cabeza y procedo a abrir el sobre. No tiene remitente y eso me extraña todavía más. Aunque cuando abro la solapa, se me enciende la bombilla.
-Ya sé quién ha sido -digo dirigiéndome a mis compañeros y caminando hacia el ascensor-.
¿Os suena alguien alto, moreno, gracioso y bueno... que mañana tiene un partido de fútbol justo aquí?
Lucas y Samu no paran de mirarme, no entienden nada. Sin embargo, cuando saco tres entradas para el Sevilla - Real Madrid, se quedan sin palabras.
Tras someterme a un tercer grado y contarles cómo han llegado esas entradas hasta nosotros, consigo irme a mi habitación a descansar y coger fuerzas para el día siguiente.
Aunque, antes de tumbarme sobre la cama, vuelvo a mirar el sobre y lo cojo. Ojeo la entrada mientras decido si hablarle a Marco o no.
En ese momento, encuentro un papel doblado dentro del sobre:
"Espero que no te haya molestado, he tenido que esforzarme para conseguir tu número de habitación para hacerte llegar las tres entradas."
Me río imaginando al mallorquín haciendo de las suyas para conseguir información.
Parece que tus encantos surgen efecto y has podido sonsacar información. 😂 21:47h
Pasan apenas cinco minutos cuando ya tengo respuesta de Marco:
Ni te imaginas lo complicado que ha sido ponerle ojitos a la chica de recepción 😉 21:53
Espero que esta vez sí aceptes la invitación 😜 21:54
Mañana intentaré pasarme a saludar a tus compañeros. Solo les conozco de la inauguración del nuevo hotel de Asier y queda un poco extraño regalarles una entrada, ¿no? 😆 21:54
Como quieras, se han sorprendido muchísimo. Y bueno... no te voy a negar que me han preguntado cómo y porqué las he conseguido jaja 🙊 21:57
Aprovecho para darte las gracias por el detalle, de parte de los tres. No hacía falta ☺️ 21:57
Al día siguiente todo va rodado: de una reunión a otra y tiro porque me toca. Tanto es así que soy consciente de la hora que es cuando nos paramos a comer. Tras una comida amena con mis compañeros de trabajo y el jefe del hotel, decidimos salir a dar un paseo y tomar un café.
Decido subir una historia a mi estado de WhatsApp e Instagram. Esta ciudad es preciosa y me enamora a cada paso que doy:
"Sevilla, qué bonita eres ☀️ "
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Tras ver un poco más de la ciudad, volvemos al hotel para acabar de hablar de trabajo. Vamos a ser honestos, la visita era para no perder a este cliente. Así que nos ponemos manos a la obra.
Sobre las seis y media de la tarde zanjamos todas las negociaciones del día para poner rumbo al estadio. Y sí, los altos magnates de aquel hotel también estaban invitados a ver el partido. Según nos comentaron, solían asistir al Ramón Sánchez-Pizjuán para ver los partidos y esta vez no iba a ser menos.
No todos los días podías disfrutar de un partido así, claro.
Los sevillanos abrieron el marcador en la primera parte y le pusieron las cosas muy difíciles a los de Madrid. Tanto que al descanso iban perdiendo 1 a 0. A la vuelta, fue Marco Asensio el jugador que consiguió el empate. Aunque, pocos minutos después, el equipo local volvió a hacerse con el partido marcando otro gol. Sin embargo, en los últimos minutos, de nuevo el Real Madrid consiguió vencer a portería y acabar el encuentro con un empate a dos.
A mi gusto, un partido muy entretenido. Ya sabéis que no soy demasiado fanática y, por lo tanto, ni voy con unos ni con otros.
También subo una foto del partido a mi redes sociales, aunque no me guste el fútbol en exceso... la foto siempre es la foto. Al acabar, de vuelta al hotel, veo que tengo un mensaje privado por Instagram y me sorprendo cuando veo de quién: Igor.
@Igorasensio: ¿Casualidad? 🤔 Primero una foto en Sevilla y ahora viendo el partido...
Solo puedo reírme. Visto así... tiene razón. Así que, decido responderle y dejar todo bien claro.
@larasetze_: Y tanto que casualidad, estoy aquí por trabajo. Hemos coincidido en el mismo hotel y tu hermano nos ha regalado un par de entradas. ¡Muy majo! jaja 😝
@Igorasensio: ya hablaré yo con él, ya... 😬 Disfruta, la ciudad es preciosa jeje
Una vez en el hotel, me doy una ducha para despejarme y descansar tranquila. Mis compañeros de trabajo me han preguntado antes si quería algo de cenar, iban a pedir take away. A mí no me apetece nada, así que les he abandonado.
Cuando menos lo esperaba, recibo otro mensaje interesándose por mi alimentación:
Marco:
Ya he visto que sí has ido al partido, muy bien. 😆 22:23h
Por cierto, ¿has cenado? 22:23h
Yo estoy con un par de compañeros en la habitación, vamos a pedir unos pokes sanos. Si te apetece uno, ya sabes... estás invitada. 22:24h
¿Cómo? Si os soy sincera no me esperaba aquella propuesta, para nada. Ni mucho menos esas confianzas. Creo que eso es lo que me choca y más me hace plantearme la posibilidad de decirle que sí.
Además, todavía más me sorprende su actitud pese al partido fatídico y el resultado poco favorable para él y su equipo.
