Avatar; domador del mundo

Todo Empieza

"Toda la gente del cielo está muerta, a diferencia de este sujeto" dijo Sume'y, arrastrando un hombre uniformado y tirándolo frente a los pies de Aleyx.

"Escoria humana"

Fue lo único que pronunció Aleyx, para luego dirigirse hacia su 'mano derecha'; "Sume'y, ¿cuantos hermanos perdimos?"

"Perdimos a 122 guerreros, además de 12 Slinth" dijo con pesame Sume'y, apretando la mandíbula por el dolor de la pérdida.

Al cabo de unos segundos de procesar la información, Aleyx volvió a hablar; "Encierra a este demonio, y brindemosle su último adiós a nuestros guerreros caídos, al mismo tiempo que cantamos sus canciones, ¡y denle atención a los heridos!"

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No fue sino cuatro días después, que los diferentes líderes de los guerreros se reunieron en una sala grande, bajo el árbol madre de la tribu Mate'yia.

De hecho, dicha tribu había logrado evitar la aniquilación total gracias a Aleyx y su ejército, algo que Aleyx descubrió luego de una fuerte y larga investigación, fue que en realidad los explosivos situados alrededor del tronco del árbol de las almas en realidad no estaban activos.

Es decir, los humanos habían hecho demostraciones de la eficiencia de los explosivos, pero a la hora de implantarlos alrededor del árbol no los activaron, puede que haya sido por la posibilidad de que los Na'Vi lo activaran accidentalmente, provocando que los Coleccionistas perdieran a su 'gallina de los huevos de oro' o simplemente pensaron que como los nativos ya habían visto el poder de los explosivos, no harían nada estupido por miedo a perder su conección con Eywa. 

De igual modo, terminó siendo beneficioso para Aleyx, además, otra grata sorpresa fue todo el equipo militar encontrado en las zonas utilizadas como descanso y reposición de los soldados, o mercenarios.

En ese equipo estaban varias cajas llenas de armamento, como lo fueron los rifles ak-12, granadas tácticas y el premio gordo; seis aeronaves AS-2 Samson y cuatro trajes AMP, y si bien no podía hacer uso de las aeronaves y los trajes, uno porque su tamaño no era el adecuado para utilizar los trajes y por el otro lado, ninguno de los Na'Vi o incluso él, sabía cómo pilotar una aeronave.

Sin embargo, había suficiente munición para entrenar a un lote de 200 guerreros en el uso de los rifles, y aún así quedaba bastantes balas y granadas para armarlos en preparación de atacar la base de los Coleccionistas, algo que daría mucha más ventaja a los guerreros Subaiyanos, y si bien al principio se negaron a usar algo que fuera remotamente humano, Aleyx logró convencerlos luego de decirles la gran importancia de esas armas, además de hacer la batalla mucho más fácil.

"Yo ingresaré solo a la base, entraré a su sala de comando, y la destruiré, así, los guerreros podrán llegar hasta el nido de la gente del cielo sin ser detectada por ellos" dejó Aleyx en claro su plan a todos los líderes frente a él.

"¡absolutamente no! Aleyx, eres el hijo del Olo'eyktan, eres el siguiente en la línea de liderazgo de la tribu, no podemos dejar que te suceda algo, además, ya estamos infringiendo las órdenes de nuestro Olo'eyktan, si llegamos sin tí, todos y cada uno de los guerreros serán expulsados de la tribu" comentó Sume'y.

Y era cierto, si bien los Na'Vi creían en la fuerza y seguían y confiaban en los más fuertes para ser sus Olo'eyktanes, eso no significaba que fueran estúpidos y dejaran que su próximo Olo'eyktan fuera derecho a la muerte en una misión que podría resultar en su muerte. 

"Mi plan funcionará, tengan eso por seguro, si demoramos más días en idear una idea sobre como atacar a la gente del cielo estaremos en desventaja, por si no lo saben, la gente del cielo en su fortaleza no se ha comunicado con su gente en la tribu Mate'yia durante varios días, entonces

Una vez que vean que sucede algo extraño aquí, enviarán exploradores para que investiguen, y una vez que sepan que están muertos, nosotros perderemos el factor sorpresa".

No fue sino luego de varios minutos, que todos acordaron seguir el plan de Aleyx, el cual consistía en interrumpir en la sala de control de los Coleccionistas y destruir la sala de radares de la base, haciendo que los guerrero pudieran acercarse a esta sin ser notados antes de que llegaran.

"pero, ¿cómo sabremos cuándo será el momento perfecto para cargar contra la gente del cielo?" preguntó un guerrero, dando a mostrar un punto importante en el plan.

"tranquilos, lo sabrán, solo escuchen los temblores" respondió Aleyx con una sonrisa, mientras salía de la sala en dirección a Fang.

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Frente a Aleyx estaba una gran cerca metálica, de más de diez metros de alto, y detrás de esta estaba una gran instalación, muy parecida a un aeropuerto moderno, con varias aeronaves AS-2 Samson, y no solo eso, sino que también había tres C-21 o más conocida como Nave de Asalto Dragón.

De pie ante la cerca, Aleyx no pudo evitar asombrarse por el nivel de tecnología que poseía la tierra, viendo las naves de más de cuarenta metros de largo, una completa obra de ingeniería, pensando en cómo sería para los Na'Vis si pudieran tener en sus manos una de estas naves, pero luego desechó esos pensamientos, ahora no era momento de soñar despierto, puesto que tenía una misión muy importante que realizar.

Así que pidiéndole a Fang que se escondiera entre la selva y que no se dejara ver, decidió saltar, y si bien saltar una altura de más de diez metros sin tomar impulso sería una tarea difícil para un Na'Vi normal, pero para Aleyx, la palabra normal no estaba como verbo para definirlo.

Ya que luego de ingerir la fruta llamada Su'tre, la cual ingerían todos los guerreros del clan Subaiya, Aleyx poseía un físico mayor que el que otros Na'Vi que no habían ingerido la fruta, así que saltar diez metros no era algo difícil para alguien como él.

Así que agarrando al humano que sobrevivió del primer conflicto en la tribu Mate'yia, Aleyx saltó la cerca, luego de eso se volvió hacia el humano que traía consigo, el cual estaba con unas esposas plásticas en sus manos y piernas; "¿donde queda la sala de control?".

El hombre sólo pudo señalar en una dirección en particular, luego de eso, Aleyx se acercó a toda velocidad hacia un AS-2 Samson, el cual descansaba en la zona de despegue.

Desbrochando un conjunto de cinco granadas, Aleyx las colocó en el interior del avión, y activando una, corrió hacia la ubicación de la sala de control antes de que se detonara la granada.

¡¡Boomm!!

El plan de Aleyx tuvo éxito, ya que la granada explotó, ocasionando una reacción en cadena que hizo que la aeronave explotara, y así ocasionando que las aeronaves que estaban situadas al lado de esta también explotaran, dando como resultado que ocho aviones quedaran reducidos a escombros. 

Aleyx solo miró eso desde la distancia con una sonrisa en su rostro, para luego esperar a que se produjera la magia, y así poder empezar con el paso número 2 de su plan. 

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Hola chicos, aquí tienen el nuevo capitulo, no pude actualizar ayer por motivos personales, pero bueno, aquí lo tienen. 

No olviden tomar mucha agua, y cuidense.