Avatar; domador del mundo

Cuanto dolor.

En la anterior base del grupo conocido como los coleccionistas, el movimiento dentro de esta ya estaba en furor, como hormigas bien entrenadas, se podia ver a cientos de Na'Vi llendo de un lugar a otro, entrando y saliendo del gran complejo o cargando cajas pesadas hacia puntos especificos.

Algunos caminaban en grupos, con pesados libros y vietiendo un sueter sin mangas blanco, los cuales eran batas de laboratorio, pero debido a la diferencia de tamaño entre un humano y un Na'Vi, las batas tuvieron que ser recortadas de mangas y la parte baja de ella, para que fuera más comoda y fácil de usar.

A parte de eso, otros Na'Vi ahora portaban grandes rifles, siendo los remplazos temporales de los arcos que usaban, eso sí, no es que ya no usaran sus armas tradicionales, sino que ahora, como llevaban más de cuatro meses entrenando en el uso de las armas de fuego, llevó a que se familiarizaran más con ellas, acto que se tradujo en que cada Na'Vi autorizado por Aleyx y los maestros Na'Vi portara un rifle, junto con varios equipos humanos, trales como pequeños explosivos, inyecciones de penicilina y anestesia en spray.

Esos cuatro meses no habían sido fáciles para nadie, ni para Aleyx, ni Grace, ni para cualquier otro Na'Vi, pero con un esfuerzo conjunto, y con el sueño de poder acabar con la gente del cielo, creó una motivación escencial en todos.

logrando que los guerreros alcanzaran un avance enorme y significativo en operar armas humanas, aunque hasta el momento, no se habían adentrado en el uso del manejo de las naves de la base, cosa que cambiaría hoy, comenzando por Aleyx.

¿Cómo comenzaría? pues con Aleyx frente a un AS- 2 Samsom.

Luego de una larga consideración entre Aleyx y sus comandantes, Aleyx llegó a la conclusión de que ningún Na'Vi se ofrecería como tributo en torno a ser el primero en pilotar una nave humana, por lo que Aleyx decidió ser él el que diera el ejemplo.

"Espero de todo corazón que no intentes algo extraño, porque yo puedo salvarme y tu no, y si eso pasa, es decir; salvarte, desearás no haberlo hecho" dijo Aleyx con un extraño tono frio en su voz, mientras se dirigía a Maicol, un piloto de los coleccionistas, el cual estaba delgado y traía un collar en su cuello.

El collar, diseñado para suprimir a los Na'Vi desobedientes, se usó para dejar liberar cargas de energía con el proposito de controlar y adiestrar a cualquier Na'Vi con fuerzas para desobedecer ordenes, y siendo grande la ironía, ahora eran los humanos quienes usaban los collares, siendo el hombre frente a Aleyx uno de los pocos que no había sentido su efecto gracias a su buen comportamiento, razón por la que lo escogió Aleyx como su instructor de vuelo.

Junto a Aleyx y el piloto, irían otros dos Na'Vi, ambos Alfas, siendo los veladores de que a Aleyx no le pasara nada, incluso si eso significara sacrificarse por eso, además, junto a la nave, volarían otros seis en Ikran para velar por los Na'Vi dentro del Samson.

"Está bien, hagamoslo" ordenó Aleyx, subiendo a la nave detrás de Maicol, siendo seguido por los guardias del primero.

Ya en la nave, Maicol se sentó en el asiento del piloto, inspeccionando los controles y oprimiendo botones, mientras le explicaba a Aleyx cada uso y función del mismo.

"Luego de velar que el control de vuelo esté bien, se procede a subir, con ayuda de las paletas de control y el centro de equilibrio" dijo Maicol, mientras hacia lo que iba explicando, haciendo que la nave tomara vuelo.

Luego de varios horas de vuelo, con Maicol mostrando como virar, descender y hacer elevar la nave, Aleyx decidió que era suficiente, haciendo que Maicol regresara a la base, ya que el dia estaba empezando y Aleyx debía atender algunas cosas.

"Olo'eyktan, se ve bien" comentó Ferlu, un guerrero Na'Vi que esperaba en la base a Aleyx.

"Te ves sorprendido Ferlu, ¿tan poca fe tienes en mí?" comentó a la ligera Aleyx, viendo como el rostro de Ferlu se contorsionaba.

"Ohh no, Olo'eyktan, tengo mucha fe en usted, en lo que no confío es en esa gente del cielo y sus monturas sin vida"

Riendose, Aleyx posó su mano en el hombro de Ferlu, mientras se dirigían al interior de la base, "Bueno, no te puedo pedir lo contrario, pero si te pido que confies en nuestros hermanos una vez que empiezen a manejar estas monturas sin vida".

Asintiendo, Ferlu le dirigió una pequeña sonrisa sin dientes a Aleyx, para que luego sus ojos se abrieran de sorpresa; "¡ohh! Olo'eyktan, Grace me dijo que se habían logrado avances con la flor Su'tre, y lo espera en el laboratorio para mostrarselo".

Asintiendo, Aleyx tomó camino hacia el laboratorio, pensando en lo que Grace podría mostrarle, y la verdad estaba entusiasmiado con la idea.

No fue sino hace dos meses que Aleyx le confió tres especimenes de flor Su'tre a Grace, puesto que conocía su amplio conocimiento en botanica, ciencias naturales y sin duda era la indicada para el tema, en especial porque Aleyx no podía hacerlo por el momento, quien diría que ser líder no era tan sencillo como parecía.

Doblando en un pasillo, Aleyx se detuvo de repente, mientras su rostro sereno era cambiado por una mirada confusa, para luego pasar a una de dolor.

"Muhm" se quejó Aleyx, apoyandose en la pared del pasillo para evitar caerse.

"Olo'eyktan" dijeron en coro los cuatro Alfas que seguían a Aleyx, con el rostro preocupado y ayudando a Aleyx a mantenerse de pie.

"Me... Me duele.. ¡AHHHH!" terminó gritando Aleyx, siendo incapaz de mantener la compostura.

"¡Les duele, NO, dejenlos.... AHHHH!" siguío quejandose Aleyx, preocupando a sus acompañantes.

"Llama a Grace y a los sanadores presentes, ¡Ahora!" ordenó uno de los Na'Vi, pidiendo ayuda de manos capaces.

"Detenganse... por favor" siguió diciendo Aleyx, con el rostro lleno de lagrimas y los ojos blancos, como si estuviera en trance.

"¡AHHHHH!" gritó por ultima vez Aleyx, quedando inconsciente a costa del dolor profundo que sentía y dejaba ver en su rostro.