Avatar; domador del mundo

reconocimiento

Saliendo de la cámara luego de decirle a mi madre que estaba bien, me encontré con una vista hermosa, por mis recuerdos como Na'Vi sabía que algunas tribus vivían en grandes árboles, parecidos a Hometree, el árbol gigante en el cual vivía la tribu Omaticaya, y si bien Hometree era un árbol magnífico, no se comparaba con la vista del árbol frente a él.

El cual a simple vista supera los 200 metros, era un gran árbol, y recordando sus enseñanzas con su madre y padre supo que el árbol tenía más de 30.000 años de antigüedad, sirviendo todos ellos como refugio y hogar a la tribu en la que a base de los recuerdos de este cuerpo había pasado 16 años.

Pensando en sus recuerdos como humano en su antiguo mundo, no pudo evitar soltar unas cuantas lagrimas, si bien nunca había tenido familia puesto que había vivido su niñez en un orfanato, eso no impedia que no extrañara a esas pocas personas que ocupaban un espacio en su corazón.

En especial la matrona del orfanato, la cual le dio las herramientas y el apoyo para convertirse en uno de los mayores Zoólogos de su país natal, y viendo el mundo en el que estaba ahora, no pudo evitar emocionarse un poco, puesto que para alguien como él, una persona amante de la naturaleza, de sus cambios, su biología, su evolución, el comportamiento y la vida de los animales, estar en este mundo era como darle el regalo favorito a un niño.

Caminando en dirección de la zona común de la tribu, la cual estaba ubicada en el centro del gran árbol, Aleyx pudo ir viendo la vida diaria de la tribu, como los cazadores traían las partes de sus presas, a las madres alimentando a sus hijos, y los niños corriendo y jugando por todas partes, era una vista magnífica y encantadora, de cómo una tribu vivía en armonía con la naturaleza.

Por donde iba caminando Aleyx todos los miembros del clan le mostraban respeto, puesto que él era el próximo Olo'eyktan, algo que Aleyx todavía no estaba acostumbrado, claro, el en su mundo tuvo personas que lo veían con respeto puesto que él era su maestro de la facultad, pero tener estudiantes que te respetaran, a obtener el respeto de más de 20 mil Na'Vi por el hecho de que tendría que guiarlos como Olo'eyktan eran dos cosas muy distintas.

Algo sorprendente de su tribu era que eran domadores de las criaturas conocidas como Txumre' un depredador- carnivoro de 2 metros de alto, un animal de color azulado, el cual la tribu utiliza para cazar ademas de utilizar su veneno para fines medicinales, por lo que no es raro ver una pequeña manada de Txumre's corriendo alrededor de la aldea, además de que también se veían Thanator, puesto que algunos jóvenes guerreros, si culminaban su fase de iniciación, tendrían la posibilidad de donar a un Thanator.

llegando a su destino, Aleyx se encontró con el Na'Vi que era el padre del Na'Vi que habitó este cuerpo, el cual ahora le pertenecía a Aleyx, el cual era un Na'Vi alto, con semblante serio y mirada fría, pero eso cambió cuando vio a Aleyx caminando hacia él, y dejando salir una sonrisa se acercó hacia su hijo para darle un abrazo fuerte.

"Gracias a la gran madre que estás bien, hijo" le dijo el padre de Aleyx a este, "madre dice que estoy bien padre, que solo debo descansar un poco y estaré completamente bien para cazar de nuevo" le respondió Aleyx con media sonrisa en la cara.

"¿Sabes dónde está Luak?" preguntó Aleyx, queriendo visitar a su amigo, al cual no había visto desde que se despertó.

"Según tengo entendido, está en el árbol de las almas"

Caminando hacia El Árbol de las Almas el cual se vislumbraba en la distancia a medida que se acercaba Aleyx, su enorme tronco y ramas eran visibles incluso desde la distancia. Desde tierra, el árbol parecía una estructura orgánica colosal, sus ramas intrincadas e interconectadas se extendían hacia el cielo, creando un dosel natural que parecía fusionarse con la jungla rodeada.

los intrincados detalles del árbol se hicieron más evidentes. Las ramas estaban cubiertas de un musgo espeso y aterciopelado, que parecían brillar con una luz sutil y luminiscente. El tronco era similar áspero y nudoso, y estaba salpicado de pequeñas aberturas y estructuras a cuevas donde Navi podía colocar objetos de adoración. Los zarcillos cayeron de cada rama como una corriente interminable de lluvia rosa que bañó el área con un aura de poder.

Era una vista hermosa de presenciar, otra muestra de la belleza que este mundo tenía para ofrecer, algo que lamentablemente los humanos no se dignaron a entender, sino que con fines egoístas buscaban destruir al intentar minar el planeta. 

Al acercarse al árbol, Aleyx pudo vislumbrar a varios nativos adorando a Eywa, y junto a ellos pudo ver a Luak, el cual tenía su cola neuronal unida a un zarcillo del árbol.

No fue sino varios minutos después que Luak dejó de adorar a Eywa que vio a Aleyx, para luego acercarse a este y darle un abrazo fraternal.

"Pensé que no despertarías" dijo Luak luego de separarse del abrazo, "bueno, estoy bien, ¿como sigues con eso?" preguntó Aleyx viendo el muñón izquierdo de Luak, el cual estaba cortado justo debajo del codo.

"Ya no duele, aunque a veces pienso que aun tengo el brazo e intento agarrar algo con él, aunque de resto esta todo bien".

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ya en la noche, cuando toda la tribu estaba reunida disfrutando de la cena, Sukai, el padre de Aleyx se dirigió hacia toda la tribu, la cual estaba expectante hacia su Olo'eyktan; "nuestra tribu ha estado desde hace miles de años, sobreviviendo y aprendiendo, llevados de la mano por Eywa, guiados hacia el equilibrio, eso ha mantenido a nuestra tribu fuerte y unida, y hoy estamos reunidos para celebrar que mi hijo Aleyx ha despertado, gracias a la gran madre, la cual nos regreso a nuestro proximo Olo'eyktan".

Con esas palabras dichas, todos los reunidos empezaron a cantar cantos, mientras se reunían alrededor de la gran fogata, sin embargo, la festividad pronto se vio interrumpida cuando los cazadores de la aldea buscaron a toda prisa sus lanzas y arcos para proteger a los miembros de la tribu, ¿el por qué? el conocido Thanator que había estado rondando por los alrededores de la tribu había ingresado al claro, el lugar donde estaban reunidos todos.

El Thanator olfateaba y rugía cuando se acercaba a los Na'Vi, pero no atacaba a ninguno, solamente saltaba entre las ramas del gran Hometree, mientras veía a cada Na'Vi con escrutinio, observandolos y juzgandolos, al parecer buscando algo.

Justo cuando los cazadores se disponían a soltar sus flechas con la intención de matar o hacer retirar al animal y así empezar un conflicto, una fuerte voz se hizo escuchar desde el interior de una de las varias chozas parecidas a tiendas.

"¡Nimwey! (paz) hermanos, Nimwey" dijo Aleyx, el cual salió de su choza junto a sus padres gracias al alboroto producido, y al ver al conocido Thanator no dudo en salir en su defensa, puesto que puede salir muerto al igual que algún miembro de la tribu.

Así que caminando en dirección del Thanator, siendo seguido de cerca por los cazadores con sus arcos listos por si este atacaba, Aleyx solo extendió su mano, esperando que algo pasara, y no tuvo que esperar mucho, puesto que el Thanator pronto se acercó luego de olfatear un poco, para luego poner su hocico en la palma de la mano de Aleyx.

los demás miembros de la tribu se quedaron sorprendidos, puesto que esa era la primera vez que se registraba a un Thanator actuando de esa manera, ya que eran conocidos por su agresividad y su total firmeza contra todo lo que estuviera en su territorio, además de que Aleyx no había pasado aún por su fase de iniciación.

"¡Palulukan Makto!"

"¡Palulukan Makto!"

"¡Palulukan Makto!"

No se sabe quién empezó el canto, pero más y más se unieron a él, aclamando al primer jinete de el portador de miedo de boca seca desde las épocas de las primeras canciones.