57. Goodbye

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Nadie esperaba aquella noticia, pues los que hablaron antes de reencontrarse eran los únicos que sabían del nuevo plan.

Rubius estaba verdaderamente sorprendido, su pequeño e inofensivo plan había causado todo esto.

-Lolito -todos voltearon a verle- él se a ofrecido a acompañar a Mangel junto con dos guardias para protegerle.

-¿Qué? -dijo Rubius con enojo por todas las atenciones que le daban a alguien que no lo merecía- no podemos quedarnos sin un alcalde, ¿Estais locos?

-Entiendo que yo tengo un puesto importante aquí en el pueblo, es mi deber y entiendo que estoy incumpliendo -explicó Lolito- pero no puedo dejar a mi niña solo.

Mangel le vio con alegría, una alegría verdadera de ver a su amado preocuparse por el en situaciones como esta. Rubius estaba cansado de ver esa jodida mirada dirigida a Lolito, estaba cansado de eso.

No pensaba aguantar más, estaba decidido a irse aun si tenía que estar ahí, poco le importaba lo que los demas podían decirle.

Intentó alejarse pero Vegetta le tomó de la muñeca para detenerle, eso causó un pequeño quejido de dolor.

Había olvidado que se lastimó por forcejear anoche.

Las había notado cuando se cambió pero al llevar siempre una sudadera no pensó que fuera importante curarse antes de ir donde sus amigos. Ahora sabía que eso lo había jodido.

Pudo ver a Vegetta preocuparse por ello, había sido muy evidente para el ojimorado. No podía dejar que los demás supieran que estaba lastimado e hicieran preguntas al respecto, por lo que decidió quedarse hasta que Mangel se fuera.

-Si Lolito se va, ¿Quien será el nuevo alcalde? -preguntó para desviar la atención al tema principal- ¿Volveremos a tener elecciones?

-Nuestro alcalde a decidido dejar a Auron como su remplazo temporal -dijo Merlon, Luzu resopló en desacuerdo- sí en el transcurso del tiempo llegan a haber problemas se harán unas nuevas elecciones, esperamos que eso no suceda para no complicar las cosas.

Todos asistieron en afirmación, aún si a un par no le parecia en absoluto.

Tras todo lo acontecido Mangel y Lolito estaban listos para irse. Sus amigos se despidieron de cada uno, esperando verlos muy pronto y con un mejor ambiente para todos.

El de orejas de oso se mantuvo detrás de todos, no tenía la mínima intención de acercarse a ellos para despedirse, por lo que se quedó explicándole a Nieves las cosas que no había entendido en todo esto.

La pareja tomó cada uno una mochila que tenia lo necesario para cuando llegaran al que sería su hogar por seis meses. Los dos guardias asignados para protegerlos les seguirían, era hora de partir.

-Kom igjen -dijo el rubio hacia la única que le entendía en noruego, ya que no tenían nada más que hacer ahí.

Pero su compañera no pensaba igual que él.

Antes de que ambos salieran del pueblo Nieves se acercó a Mangel, el rubio estaba por acercarse a ellos pero se detuvo al ver a Nieves abrazarle.

El de lentes estaba sorprendido, no correspondiendo al instante, sin embargo ese abrazo era tan cálido que no podía rechazarlo. Le correspondió con un abrazo con el mismo cariño que le estaba dando la chica.

-Vær forsiktig, jeg vil ikke at noe vondt skal skje deg, te quiero -dijo, sabía que no le entendería todo pero lo último si y era lo importante.

Con ese último abrazo Mangel y Lolito dejaron Karmaland.

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Terminamos con el mini maratón.

Espero que a partir de ahora voy a publicar constantemente, esperemos que sea así.

En todo caso si llega a volver a pasar les voy a avisar antes de ausentarme por tanto tiempo sin dar señales de vida.

Nos vemos pronto.

Maratón 3/3

I H̶ᴀ̶ᴛ̶ᴇ̶ (ʟᴏᴠᴇ) ʏᴏᴜ || RᴜʙᴇɢᴇᴛᴛᴀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora