Pregúntate a ti mismo,
quién es el jefe de tu mente,
tú, o los pensamientos sin importancia que eres
incapaz de sacudir.
~ Remez SassonNo se olviden de dejar sus comentarios porfii, lxs amo💜🦋🖤
Callie
La visita inesperada de Eric me ayudó a calmarme un poco, a pesar de que no me gusta estar acompañada cuando tengo ansiedad, su presencia me calma muchísimo, porque no me hace preguntas solo me acompaña durante el proceso sin incomodarme.
Después de que Luca se fue el cansancio se apoderó de mi porque no pude dormir nada por estar cuidándolo de sus pesadillas, tenía miedo de que se despierte asustado y que yo estuviera durmiendo sin preocupaciones. Pero después de un par de horas me di cuenta que estába descansando como un bebé así que me permiti cerrar los ojos por unos simples instantes pero al parecer me desmaye porque amanecí con él a mi lado para darme los buenos días, y puedo decir que es una de las imágenes más lindas que quedaron grabadas en mis ojos
Eric me conoce bastante bien, mejor de lo que me gustaria, sabe perfectamente que no puedo dormir siesta porque me da ansiedad así que ideo una tarde de películas en el balcón y la distracción funcionó de maravilla porque cuando mire la hora ya eran las 10 de la noche, así que me acosté a dormir tranquila sin una gota de ansiedad
Me despierto por el grito de hambre que produce mi estómago, veo la hora y son las 10 de la mañana, me doy vuelta y Eric entra con una bandeja de desayuno. Realmente lo amo
— buen día corazoncito— deja la bandeja sobre la cama y me da un beso en la frente
— buen día corazoncito, gracias por traerme el desayuno— me froto los ojos y hablo con voz de dormida
— no seas tonta, no me agradezcas, además sé que ayer tuviste ansiedad y no comiste así que pensé en hacerte un jugo de naranja para recuperar tu energía. Además use tu llave para ir a comprar y te traje muchas oreos porque ya no tenias— se sienta a mi lado y enciende el Smart TV.
— a ti no puedo ocultarte nada, gracias por el jugo pero no tenías que comprarme oreos— palmeo su pierna y me pongo de pie para cepillar mis dientes
— sabes que no me importa si no me dejas comprarte algo, lo voy a hacer igual aunque tú no quieras, si fuera millonario te compraría la fábrica de otros solo para verte feliz— vuelvo a su lado, me encierra con su brazo y me apoya sobre su pecho mientras que frota con cariño mi brazo
— sabes, quiero que llegue el día en el que podamos salir a algún sitio y hacer cosas de amigos normales. Vivo imaginando esos momentos, como ir al cine, emborracharnos en un bar y cosas así. ¿Acaso no te cansas de venir siempre a mi casa y estar encerrados en la habitación?—
— no, no me canso porque no vengo a tu casa para nada, vengo para verte a ti y estar contigo. Yo también pienso en esos futuros días, pero ya será el momento de que lleguen, por ahora tenemos que disfrutar estos. Cada día que pasamos juntos es un regalo, no te atormentes con cosas que no son importantes para el ahora— gira su cabeza para mirarme y mis ojos se llenan de lágrimas. Tengo miedo de no poder mejorar y que él se sienta obligado a estar conmigo por pena. Quizás por eso ellos le abandonaron porque sabían que esto iba a pasar y que me iba a poner deprimente, ahora que lo pienso bien, no los culpo, sin mi están mucho mejor. No tienen que estar cargando con un peso extra sobre sus espaldas, se que soy un estorbo, lo sé.
— tengo miedo de que un día te canses de mi, de toda esta mierda que me rodea. Tengo miedo de que te des cuenta que este no es el tipo de amistad que quieres y que yo no soy la mejor amiga que puedes tener en tu vida. Eres muy especial para ser amigo de alguien como yo, no te merezco. No me voy a enojar si algún día te cansas de mí, de verdad esta bien, no puedo arrastrarte a esto sin saber cuándo voy a terminar está batalla— mi dedo índice hace círculos en su pecho mientras que mi voz rota me delata
ESTÁS LEYENDO
SIN CONTROL DE MI
Lãng mạnA veces los seres humanos no estamos destinados a curarnos a nosotros mismos, si no que vivimos nuestra vida para curar a otros y gastamos hasta la última gota de nuestra alma en ellos. Por otro lado Callie jamás pensó que volver a confiar en un chi...