🌧️ 🦋 𝒞𝒶𝓅𝒾𝓉𝓊𝓁♡ 𝟤𝟤 🦋 🌧️

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Qué cosa más bonita
es verte, mientras me
ves, viéndote a ti
~José Urbano

No se olviden de dejar sus comentarios porfii, lxs amo 💜🦋🖤

Luca

Llevo dos días sin hablarle a mi diablillo y siento que el sol ya no ilumina mi habitación de la misma manera que hace unos días atrás. Esta vez el alcohol no me sirvió de nada porque cuando desperté después de la fiesta recordaba todo lo que le dije a Emmanuel y a esa pobre chica. En esta ocasión, ahogar mis penas en alcohol no me sirvió de nada, solo hizo que me enfadara conmigo mismo y que no quiera hablarle.

Desde que me fui de la casa de mi amigo lo único que hago es imaginarla con él en su cama abrazados, protegiéndola del mundo, siendo su lugar seguro y eso me provoca náuseas así que estoy sin comer porque si lo hago voy a vomitar todo. El día de ayer estuve en la cama todo el día mirando el techo pensando en que todos tenían razón, pero odio el hecho de haber llegado tarde porque él está en primer lugar y yo estoy en la banca mientras los miro entregarse el uno al otro.

No me gusta estar así con ella, no quiero evitarla, cada estímulo de mi cuerpo quiere hablarle, verla y sentirla pero mi orgullo me lo impide y eso me frustra porque no se lo merece, porque desde aquel desayuno, mi mente comenzó a crear un libro con su nombre grabado al pie de cada página. No puedo borrarla de mi cerebro, mi espíritu quiere pasar cada instante del día con ella.

En muy poco tiempo se volvió el motivo por el cual me levanto en las mañanas, por el cual salgo al balcón esperando verla dibujar mientras que la luz del sol refleja su maravilloso esplendor.

La extraño y no solo yo, también la extrañan mis sentidos, mi mente, mi piel, mis ojos y hasta mi brazo que ahora que no la tengo cerca me duele más que mil inyecciones, aunque eso no es lo único que me duele. La extraño tanto que hasta mis demonios imploran por su regreso

El dolor de mi muñeca es insoportable, no pude pegar un ojo en toda la noche, intente tomar un analgésico pero cuando tuve la píldora en mi mano recordé su voz diciéndome que no lo haga, sé que le preocupa que tome muchas píldoras al dia y en ese momento pude sentirla dándome su fuerza para rechazar el medicamento pero ya no puedo tolerar más la punzada en mi hueso.

Me siento en la cama y tomo un poco de la crema para el dolor que ella me dió. Masajeo la zona con movimientos circulares para darle calor y después de unos segundos me pongo de pie y camino hacia el espejo. Paso mis manos sobre cada uno de mis músculos y mis ojos rechazan la vista, ya no me reconozco, está no es la imagen que este espejo estaba acostumbrado a ver, no veo la hora de volver a sentir mis manos sudadas junto al metal de las barras del gimnasio.
Mi mano dibuja un camino por mis borrosos abdominales, inhalo mientras que siento mi estómago aplanarse y exhalo con el máximo cansancio mental que estoy padeciendo en este momento

Me pongo una remera para cubrir lo que no quiero ver y vuelvo a sentarme sobre el borde de la cama, enciendo mi cigarrillo electrónico y con cada inhalada pienso en si debería dejar mi orgullo de lado o no. Agarro el móvil y deslizó las notificaciones de su chat, quiero responderle y hacer planes para lo que queda del día, pero ahora que mi corazón despertó por el cariño hacia ella, ya no puedo verla como una amiga.

Creo que estás paredes están ejerciendo más presion en mis pensamientos así que salgo al balcón mientras que veo como el humo del cigarrillo desaparece en el aire.
Me siento en el suelo con las piernas dobladas pero mi subconsciente proyecta las imágenes de la noche de ayer, ella sentada sobre el borde de la piscina mientras movía sus pies en el agua esperando por mi beso de las buenas noches que nunca llegó. No se dió cuenta, pero la observé durante todo ese rato y la note preocupada, con la cabeza baja mirando sus pies en el agua, pero eso no fue peor que escucharla llamarme a través de su balcón y luego recibir su mensaje disculpándose por molestarme y preocupándose por mi bienestar.

SIN CONTROL DE MIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora