Capítulo tres:

74 10 3
                                    

Nuevamente en el colegio, esta ves todo a mi alrededor me molestaba y aún más la simple idea de cruzarme con ella en algún lugar del colegio; mi rostro demostraba que no pretendía hablar con nadie en el día y menos escuchar a ninguna persona.
  - ¿Qué pasó entre ustedes estos últimos días? - se acercó a mi uno de mis compañeros.
  - Nada; no se a que te refieres con eso - le dediqué una mirada sería y volví mi mirada hacia adelante, prestando atención en el camino.
  - Con TN; a eso me refiero - sonrió poniéndose frente a mi - ¿ya son novios? - preguntó emocionado
  - No; y no quiero hablar del tema. Mejor déjame sólo o me pondré de mal humor contigo también - se hizo a un lado y continúe caminando, dejándolo atrás.
Más de una persona intentó preguntarme sobre mi estado, ya que en verdad no demostraba ser el mismo de siempre. Pero no respondí a ninguno de ellos y continúe mi camino hacia el salón.
A penas cuando llegué allí, caí en la cuenta de que TN no había llegado; en parte mucho mejor para mi, no pretendo en lo más mínimo verla o hablarle.
  - Disculpe; TN no vendrá el día de hoy, está enfermera y no se siente muy bien para venir - interrumpió una chica al profesor, al ser nombrada en la lista.
  - ¿Enferma?; pero si ayer estaba muy bien y ...... - pensaba mientras observaba a la chica seriamente; sacudí mi cabeza y comencé a escribir en mi cuaderno.
Empezaba a sentirme realmente idiota; las únicas cosas que escribía eran: "I love you", "I hate you", " ¿porqué?, " ...........quiero un helado.... ahora...."
Tomé mi mochila y salí del salón sin decir nada y sin siquiera esperar a darle una explicación al profesor o el director que entraba en ese momento.
Me alejé de ese lugar, mientras le subía el volumen a mis auriculares y me distraía golpeando piedras de la vereda.

La vi caminando por la vereda de en frente; desvié mi mirada rápidamente y me alejé lo más rápido posible para no verla mucho tiempo; fue inútil, ya que pretendía más que nada, interrogarle sobre todo y quitarme las dudas y las acusaciones que hacía mi mente hacia ella.

Continué caminando, y al llegar nuevamente a mi casa, cerré la puerta con llaves y comencé a arrojar cosas contra la pared, haciendo que nuevamente mi madre se preocupara e intentara entrar puertas adentro; otra vez no lo permití, busqué en mis contactos su número, estando a sólo centímetros de marcarle y escuchar su dulce voz. Pero me limité al recordar lo de "enamorar a un chico adinerado", esto comenzó a inquiearme y lo único que dominaba mi mente eran pensamientos en contra de ella, confundiendo no sólo a mi mente,  si no que a la vez a mi corazón, que se quebraba aún más con cada acusación falsa que inventaba mi mente para disminuir la horrible sensación de tristeza.
........
A penas se levantaba el sol, tomé en mis manos el celular y le escribí a una compañera informarle con una gran mentira, de que no iría al colegio. ¿Qué más da si no voy? , de todas formas, en algún momento lo volveré a tener frente a frente y eso me causaría daño.
Desempaqué todas mis cosas, ordenándolas en todos los espacios de la casa; tomé algo de dinero de mi billetera y salí q comprar algo para el desayuno, almuerzo y cena; por que estaba segura de que no saldría por el resto del día o más.

Volvía nuevamente a la casa con algunas bolsas en mano, lo vi cruzar por la vereda de en frente; lo seguí con la mirada algunos minutos, mientras lo veía desaparecer a lo lejos. No había otra cosa que quisiera hacer en ese momento, que correr hacia él y abrazarlo, al igual de cómo él lo había hecho el día anterior. Sacudí mi cabeza tratando de borrar esos pensamientos, pero se me hizo inútil, ellos manejaban mi mente a su antojo y me hacían más daño cada minuto que pasaba.
Entré en la casa, dejando caer las compras al suelo y callando junto a ellas, con los ojos nuevamente inundados en lágrimas.
  - Tranquila, esto lo solucionaré y él volverá a confiar en mi; lo sé, se que volverá a ser todo igual - susurré, tratando de calmar mi llanto y concentrarme en alguna otra cosa.
Preparé el desayuno, cereales y yogurt de frutilla; eso me hacia acordar a Dong Hyun y me quitó rápidamente el apetito; dejé todo de lado y comencé a hacer tareas, para distraerme y no pensar en esas cosas.

Aunque hubiese querido quedarme una semana más en esa casa, aislada en mi mundo con pocos pensamientos o recuerdos de Dong Hyun; pero, tuve que regresar y volver a verlo nuevamente en ese colegio, en ese lugar dónde en algún momento fuimos completamente extraños y ahora lo volveríamos a ser, pero eso no durará mucho; se quebraba no durará mucho.
Desvíe mi mirada hacia un lado, encontrándome con la suya e intentando simplemente no actuar de forma extraña; volví mi mirada al frente y comencé a copiar lo escrito en la pizarra, para mantener mi mente ocupada en algo más.

Stupid LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora