Capítulo trece:

77 6 0
                                    

- ¿Dónde está Dong Hyun? - corrí en dirección a Dereck, cruzando todo el pasillo que nos dividía.
- ¿No está contigo?
- No lo estaría buscando si fuera así; no lo veo desde ayer en la tarde y recibí un mensaje preocupante.
- ¿Mensaje? - se acercó a mi y fijó su miranda en mi celular.
- "Esto no es un juego; alejate o será dañado. Sabes muy bien a lo que me refiero, ¿a caso no eres su reina; plebeya?" - subí la mirada - ¿En serio no lo visite?
- En verdad no; pero no te preocupes por él. Debe de estar aún en su casa o de camino - sonrió levantarme.
- Intentaré ser positiva. Llámame si lo ves, por favor - bese su mejilla y me aleje corriendo nuevamente.
- ¿Alguien a visito a Dong Hyun? - entré corriendo al salón.
- No - todas las respuestas fueron un "no".
Tomé en mano mi celular y marqué su número.
- El número con el que intenta comunicarse está fuera de servicio o se encuentra apagado - repetía una y otra vez el mismo mensaje - El número....... - colgué la llamada.
- ¿Dónde estas?
Su horario es algo fácil; pero debería de estar en clases o en el orfanato. Pero es muy temprano para eso. No creo que halla ido a ver a Robert.
- ¿Su casa? - susurré.
Marqué el número de su abuela.
- ¿Hola? - se oía algo dormida.
- Buen día; ¿Dong Hyun ya ha salido para el colegio?
- ¿TN?
- Si; ¿aún está en casa?
- No; hace más de una hora que salió. ¿Aún no llegó?
- No; gracias igual - colgué la llamada, ya desanimada.
Entré al salón y esperé allí durante toda la mañana; al terminar el horario de clase. Corrí a mi casa con la esperanza de verlo ahí; pero no estaba en la casa.
Parecía que se lo había tragado la tierra o algo peor.
¿Dónde estás Dong Hyun?
Pasó el medio día; las horas y los minutos transcurrieron y nada. Ese chico no apareció en todo ese tiempo.

Subí a mi habitación y tomé una ducha; y me encamine a visitar a David.

- ¿Cómo estás? - me abrazó.
- Preocupada. ¿Nuevo corte de cabello? - sonreí al ver su cabello muy corto; aún más que el día anterior.
- Día de corte de cabello - sonrió y se sentó en la mesa junto a nosotros.
- Te queda divino - reí.
- Deja de bromear; mi cabello largo era más lindo - hizo un pequeño puchero.
- Está bien; necesito preguntarte algo.... - suspire - ¿vino Dong Hyun por aquí?
- No; ¿sucede algo?
- No logro comunicarme con él.
- ¿No creerás qué...
- Eso me temo. Pero es imposible, ¿verdad?
- Si es imposible; ellos ya están tras las rejas y .... - comenzó a sonar mi celular.
- Es el número de Dong Hyun.
- ¡Atiende! - se veía más preocupado.
- ¿Dong Hyun?
- ¿Esto ya no es divertido verdad? - era una vez distorsionada.
- ¿Quien habla?; ¿dónde está Dong Hyun? - mi voz temblabla.
- Está en buenas manos. Por ahora - se escucharon unos golpes. Como si estuvieran golpeando a una persona- al menos aún está vivo.
- ¿Quien eres y qué quieres? - no importara que le hicieran; esto no era un juego.
- Tu sabes que alguien tiene que pagar el precio por haber enviado a esas personas delante de la justicia. ¿Cómo está tu amigo?, ¿aún tiene salud verdad?. Deberías agradecer eso.
- Aún no respondiste; ¿qué quieres?
- ¡A ti!
- ¿A mi?
- Un trato es un trato. La vida de tus amigos, por tu propia libertad.
- ¿Porqué yo?
- Me gustan las chicas con carácter y tú tienes mucho. También por que esto es un trato; alguien no cumplió sus cláusulas de vida.
- Maldito desgraciado; ¿a caso crees que esto es un juego?. No se que cosas has tratado con mi padrastro, pero yo no entro en esos juegos.
- ¿Quieres ver a tu noviecito en lo profundo de una zanja?
- No; ¿cuando y dónde? - ahora si estaba seria y David me observaba preocupado.
- En el almacén abandondo cerca de tu antigua casa. Ve sola o se muere el niño con dinero.
- Estaré allí en media hora - colgué la llamada.
- ¿Qué sucede?
- Tienen a Dong Hyun y necesito que este a salvo.
- ¿Qué harás? - sujetó mi rostro.
- Necesito verlo a salvo. Cuida de tu salud por favor.
- No te dejaré hacer esto.
- No te estoy pidiendo autorización; lo hago por voluntad.
- TN - me aleje de él.
- Cuida de tu salud.
- ¡TN! - fue lo último que escuché.
La visita terminó y salí del edificio.
Respire hondo. Necesitaba ser fuerte; Dong Hyun estaba en peligro. Cada minuto era muy importante, y dejarlo con esa clase de personas, era un peor.
Llegué a es lugar y esperé por algunos minutos; nada sucedía y menos aparecía alguien.
Se escucharon unos pasos que se acercaban; Dong Hyun venía junto a un grupo de hombres enmascarados. A su lado - ¿su chofer? - un hombre moreno, con un arma en manos; apuntaba directamente a la cabeza de Dong Hyun.
- Aquí está tu novio. Ahora ven con nosotros - lo empujó, haciendo que cayera al suelo.
- TN - dijo con las últimas fuerzas que le quedaban.
- Estoy bien - lo abracé - estoy feliz de que estés bien. Cuida de tu salud y ...... - seque algunas lágrimas de mis ojos - Te extranaré - me puse de pié - Te amo - susurre y me aleje. Acercándome a los tipos frente a mi.
- Ya es hora. No dejen testigos - lo escuché decir.
Alguien golpeo mi cabeza y lo último que escuché fue un disparo y luego mi cabeza tocó el suelo.
Todo se volvió oscuro.

Perdón por demorar tanto en subir, estuve algo ocupada últimamente.

Stupid LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora