Capitulo 21

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Se llegó el día del viaje, ya tenían sus maletas preparadas y esa noche partirían.

Ya se encontraban en la central de autobuses esperando la llamada de su salida, Nadia estaba sentada en las piernas de Joaquín y Jade en las de Emilio, ellas estaban emocionadas por conocer la playa.

-¿Qué es lo primero que harán cuando lleguemos a la playa?- preguntó Joaquín.
-Meternos al mar- dijeron ambas y los padres rieron.
-Pero no se metan tan profundo, no se nos vayan a perder- dijo Emilio.

Se escuchó el llamado a su autobús, tomaron sus maletas y abordaron. Nadia y Jade se sentaron en sus lugares que estarían a lado de los asientos de sus padres. Emilio y Joaquín cubrieron a sus hijas con unas mantas para que pudieran dormir agusto ya que viajarían toda la noche.

-¿Vamos a viajar toda la noche?- preguntaron las niñas.
-Si princesas, ustedes duerman tranquilas- dijo Emilio y les dieron un beso en sus frentes-. Descansen.
-Descansen papis.

El autobús comenzó a andar, las niñas se durmieron, la pareja disfrutaba de su compañía. Joaquín se acostó sobre el pecho de Emilio y sonrieron mientras se abrazaban.

-¿Emocionado por viajar?- preguntó Joaquín.
-Mucho, especialmente porque iré contigo y las niñas- dijo Emilio dándole un beso en la frente y miraron a sus niñas-. Se llevan tan bien.
-Lo sé, se llevan como hermanas y eso me hace feliz.
-Fue buena idea meterlas en la misma escuela, sin ellas no nos hubiéramos vuelto a reencontrar.

Joaquín miró a Emilio con una sonrisa y se estiró un poco para poderle dar un beso. Finalmente ambos también se durmieron.

La noche transcurría con calma, los pasajeros dormían ya que aún faltaban muchas horas para llegar. Emilio despertó un momento para sacar una botella de agua, sonrió al ver a Joaquín dormir con tranquilidad, pero lo más tierno fue que Nadia estaba dormida en sus brazos. No supo en qué momento se pasó con ellos, pero era bonito para Emilio ver a su novio e hija juntos. Emilio volteó un momento para ver a Jade, esta estaba despierta.

-¿Qué haces despierta, Jade?- preguntó Emilio-. Duerme, aún falta mucho para llegar.
-No puedo dormir, Emilio- dijo Jade.
-Ven aquí.

Jade se levantó y se sentó en las piernas de Emilio, al acomodarse en sus brazos sonrió ya que sentía un calor paternal. Se sentía más tranquila estando con él.

-¿Por qué no puedes dormir?- preguntó Emilio.
-Solo es la emoción de llegar a la playa- dijo Jade.
-Tranquila, es normal. Duerme y cuando despiertes ya estaremos en la playa.

Jade sonrió y se volvió a dormir, Emilio estaba feliz porque comenzaba a encariñarse con la hija de su novio. Joaquín entreabrió los ojos y sonrió al ver esa escena, se acercó un poco para darle un pequeño beso en la frente a su hija y a Emilio en la comisura de sus labios.

-Mis amores- susurró y al ver a Nadia dormida en sus brazos también le dió un beso en la frente-. A ti también te quiero, princesa.

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