Plan de amor

Capitulo 4

Emilio y Nadia llegaron a casa, la menor se fue a su cuarto y cerró la puerta para que su papá no escuchara porque haría una llamada.

Llamada
-Hola Nadia, estaba a punto de marcarte- dijo Jade al otro lado de la línea.
-Pues tuvimos el mismo plan- dijo Nadia-. Y hablando de eso, tenemos que comenzar la primera parte del plan para que nuestros padres se enamoren. Un reencuentro.
-Eso será fácil y puede ser a la hora de la salida. Cuando tu papá llegó por ti mi papá no dejaba de voltear hacia atrás porque según él creía haber visto a alguien.
-Y entre más pronto empiece este plan, más pronto se enamorarán.
-¡Ya lo tengo! Mi papá mañana llegará un poquito tarde por mí, puedes distraer a tu papá un rato hasta que llegue el mío y así podrán reencontrarse.
-¡Es una buena idea!
-Jade, ya ven a comer- se escuchó la voz de Joaquín.
-Me tengo que ir, después seguimos con el plan.
Fin de la llamada

Jade salió de su cuarto y bajó a comer. Joaquín sirvió agua en dos vasos, pero notaba a su hija rara porque comía con mucha emoción y nunca hacía eso. Jade sintió la mirada de su papá y sonrió.

-¿Qué pasa, papá?- preguntó Jade.
-Te noto un poco rara, hija- dijo Joaquín-. ¿Está todo bien?
-Si papi, ¿por qué?
-Nunca comes con esa emoción que cargas y desde que te hiciste amiga de Nadia no has dejado de sonreír.
-Solo estoy feliz porque hice una nueva amiga. Por cierto papi, ¿te agradó mi amiga Nadia?
-Claro hija, se ve que es una niña agradable. Me siento feliz de que hayas encontrado una buena amiga.
-Y espera a que conozcas a su papá.
-¿Qué?
-Nada.

Jade por poquito la regaba, pero ya estaba emocionada de comenzar la primera parte del plan.

Emilio se encontraba en la sala mirando televisión, aveces se sentía triste de no tener una pareja pero al menos sabía que tenía a su hija. Sonrió al sentir que su hija se sentó a su lado y lo abrazaba.

-¿Qué pasa, papi?- preguntó Nadia.
-Nada mi niña, solo necesitaba un abrazo tuyo- dijo Emilio-. Me alegra que te vinieras a vivir conmigo.
-Eres mi papá, tú estuviste conmigo desde que nací y si me quedaba con mi mamá me sentiría solita, además a ella no le importo.
-Tú siempre me vas a importar porque eres lo más importante de mi vida.

Padre e hija se dieron un abrazo, estaban felices de estar juntos y que nadie los hubiera separado. Continuaron mirando televisión, le llegó un mensaje a Nadia y rió al leerlo.

-¿Qué pasa, hija?- preguntó Emilio.
-Nada papi, mi amiga Jade me mandó un mensaje- dijo Nadia-. Ya quiero que la conozcas, te va a agradar.
-Estoy seguro que si. Aún no llevamos una semana aquí en México y ya hiciste una buena amiga.

Nadia estaba feliz de que su papá conociera a su amiga, pero también ya estaba emocionada de que los papás de ambas volvieran a reencontrarse y el plan comenzara a crecer.