Capítulo 16

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16- Río de sal.

Millane.

-No estuvo descansando correctamente y es por eso que su cuerpo colapso con la repentina presión -Escucho una voz fuera de la habitación.

-¿Pero es normal que duerma tanto? -Pregunta Jazmine.

¿Tanto?

¿Qué carajos esta pasando?

-Es completamente normal y le recomiendo la verdad que comience a regularizar su ciclo de sueño o puede terminar en algo peor. Diecisiete horas no es un número menor y la sobre exigencia a la que somete su cuerpo no es sana.

¡Diecisiete horas!

Me siento y apoyo la espalda al respaldo de la cama aguantando un quejido por el dolor de mi cuerpo al estar tanto tiempo aquí.

-Espero tengas una explicación para esto -Dice Izan haciendo notar su presencia y asustándome al mismo tiempo.

-¿Qué haces aquí?

-Dormí aquí.

Me quedo en silencio observándolo perpleja provocando que vuelva a hablar.

-Digo no aquí. No aquí contigo, sino aquí en esta casa.

-Era obvio -Digo dejando el cabello detrás de mis orejas-. No pensaba otra cosa, lo hubiera notado.

-¿Me dirás ahora por qué descuidaste tanto tu salud?

-No la descuidé.

-¿Dormir cuatro horas al día te parece suficiente?

-No estaba...

-¿El que haya estado molestándote este tiempo ha provocado esto? -Pregunta con preocupación.

-No es eso.

-¿Entonces que es?

-He tenido mucho trabajo ¿Bien? -Me excuso-. Estaré bien los próximos días, siempre pasa esto antes de que salga una nueva edición.

Se queda observándome con los ojos entrecerrados mientras se apega al respaldo del pequeño sofá cruzando sus brazos y es entonces donde noto que trae una camisa deportiva que NO trae mangas y que por ende puedo ver perfectamente como se tensan sus músculos y cierro los ojos para olvidar esta imagen a alguna otra que no me haga sentir como solo este desgraciado pudo hacerlo, me niego a esto, a sentir lo mismo de años atrás y es por eso que de la nada vienen las imágenes de la estúpida conversación que tuve con Aarón días atrás para tragarme todos mis sentimientos por Izan y dejarlos donde los iba guardado en los años que no supe de él.

-¿Por qué dormiste aquí? -Pregunto en su lugar.

-La prensa estuvo toda la noche afuera.

-¿Y creíste que por eso también podías hacer ejercicio en mi casa? -Pregunto lo evidente por su vestimenta.

-Era lo mejor que podía hacer mientras dormías como si lo hicieras por primera vez en tu vida.

Guardo silencio recordando las veces en las que estuve sin dormir por dedicarme únicamente en mi trabajo y en mis hijos y a pesar de no arrepentirme de haberlo hecho la verdad si fue mi culpa no saber encontrar el espacio para mi.

Soy una mujer joven que solo quería hacer lo mejor intentando ser la madre perfecta ya que nunca supe como se comportaba una realmente y todas estas idas y venidas de emociones realmente me han hecho des coordinarme por completo. No sé como ser una madre y una mujer al mismo tiempo. Supe trabajar, ser madre pero no vivir la vida que como mujer quería descubrir, sí, fui de fiesta y dejé que personas coquetearan o intentaran algo conmigo con el puto celular en la mano hablando de trabajo ya que era lo único que me estaba saliendo bien.

Más de ti #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora