Nunca Te Recuerdo, Porque Nunca Te olvido [TERMINADA ✔]

Capítulo 60: Obsesiones

Cosenza, Italia.

Peyton:

La ansiedad no me permitió dormir en toda la noche. En el instante en que sentí que Grace cerró la puerta para marcharse un inmenso suspiro de alivio se escapó de mi boca.

Me levanto casi dando un brinco, la sonrisa que divide mi rostro es auténtica. Les echo un vistazo a las cámaras y levanto el dedo en señal de aprobación.

No fue difícil comprar al equipo de vigilancia, sin embargo, escaparme de mi habitación con la excusa de dormir con Grace sí fue todo un reto. ¡Pero lo hice! Lo logré, porque así soy yo.

Soy de las mujeres que no hacen promesas en vano, lo que se proponen lo cumplen. Y Swan me subestimó demasiado al pensar que aceptaría mi muerte con tanta rendición, debe ser que su intelecto se ha visto afectado por la extraña hipnosis que le provocó la niña dorada.

Enviar a Grace como mi suplente para morir fue una estrategia bastante obvia y sencilla, pero toda la atención de Swan está concentrada en el evento de esta noche, y me aproveché de su nublado juicio para acatar mi idea... Porque todas mis acciones tienen un claro motivo.

Saco el libro que escondí anoche en uno de los cajones de la peinadora, y de éste extraigo aquel dibujo que me obsequió McCartney hace años.

- Él es – Señaló Grace cuando teníamos 15 años, mientras veía el boceto que recién había hecho – Él es Dylan.

- Mi dulce amor – Pronuncio las palabras en voz alta colocando el dibujo en la esquina del espejo de la peinadora – ¿Está usted feliz de verme esta noche? – Le pregunto a la imagen.

Al mismo tiempo me lo imagino a él, penetrándome con esa mirada de tonalidad azabache, luciendo su sonrisa curveada a la vez que le caen mechones del cabello oscuro sobre la frente.

- ¿Qué me dices? ¿Qué quieres bailar conmigo? – Le pregunto colocándome la mano sobre el pecho – Será un total placer compartir esta pieza con el amor de mi infancia.

Lo visualizo mirándome desde la esquina de la habitación, a la cual me acerco con detenimiento, imaginando su barbilla tan masculina, sus labios carnosos y la voz tan profunda con la que habla. Elevo mi dedo en el aire como si pudiera sentirlo y comienzo a bailar con él en medio de la habitación.

Estar entre los brazos de ese hombre ha de ser la personificación de la más maravillosa fantasía.

Por ende, esta noche tengo que asistir al evento.

Cuando Swan me dio el veredicto de su decisión la cual consistía en matarme, durante unos segundos lo acepté y él lo notó. Pero olvidó decirme que Dylan Archer seguía con vida.

Aunque probablemente no lo sepa, se supone que el ayudante de Frey debía matarlo, pero Archer terminó asesinándolo a él. Por lo tanto ayer, al recibir tal noticia de parte de uno de mis informantes que trabaja en una clínica donde afirma haberlo visto malherido, tuve que improvisar un poco mi huida y el camino más fácil era Grace.

- La tonta de la niña dorada creyó que volví a ser su amiga – Le cuento al suplente imaginario de Dylan mientras bailo con él al ritmo de la música que se reproduce en mi subconsciente – Ella no entiende que nuestra relación se rompió hace tiempo – Me inclino hacia atrás sintiendo que él me está sujetando por la cintura – No me mires así – Le hablo a la proyección de Dylan al reincorporarme – Sí, Grace y yo éramos inseparables antes, pero para ese entonces yo no tenía nada; ni familia, o historia, ni siquiera alguien que estuviera esperando por mí fuera de las paredes ese orfanato – Doy un pequeño giro – Sin embargo, cuando ella accedió a darme su identidad, me alegré porque finalmente no sería una persona vacía, tendría una historia y alguien que aguardara por mí... Ese alguien eres tú, mi amor.