| Capítulo 26 |

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Xiang Xi guardó la grabadora en su bolsillo y tomó un hondo respiro, abrió los brazos y abrazó a Cheng Boyan.

Sí Cheng Boyan no comía con amigos, rara vez salía a comer, ya que aquello no era saludable

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Sí Cheng Boyan no comía con amigos, rara vez salía a comer, ya que aquello no era saludable. Pero la principal razón es porque siempre estaba cansado y podría conseguir algo para comer, pero no sabía qué comer por aquí. 

Xiang Xi tenía muy en claro eso y lo llevó a un gran restaurante de ollas calientes de sopa de huesos. Había cuatro puertas en la comunidad, en el sureste y noroeste, sabiendo muy bien lo que había en la calle y Cheng Boyan, no podía entender cómo fue capaz de recordar todos estos lugares después de haberse quedado unos días y además, enfermo. 

¿Cuántos días fueron?. 

Cheng Boyan siempre ha vivido solo. Estaba acostumbrado a hacer ejercicio, comer, leer solo cuando llegaba a casa y Xiang Xi, se quedó repentinamente atrapado dentro de su vida. No se sentía muy cómodo con su apariencia despreocupada y descuidada, siempre sintiendo que había pasado mucho tiempo. 

Ahora, mirando a Xiang Xi frente a él, con la barbilla apoyada mientras escuchaba al mesero informar sobre el menú y de pronto, se dio cuenta de que el tiempo había pasado muy rápido. Xiang Xi se iba a mudar en un abrir y cerrar de ojos, pareciendo que los tres artículos del contrato jamás fueron comprendidos con claridad. 

—Puedes echarle un vistazo a este plato... —El camarero abrió el menú frente a él. 

—No lo miraré —Xiang Xi todavía sostenía su barbilla, tocándose ligeramente los labios: —No lo entiendo. 

—Déjame ver —Cheng Boyan sonrió, tomó el menú y lo abrió: —¿Ordeno yo?

—Está bien —Xiang Xi asintió. 

El mesero pasó inmediatamente cambió hacia el lado de Cheng Boyan, para que le diga los platillos. Cheng Boyan pidió una olla y junto con ello, algunos platos con pequeñas guarniciones. 

—¿Quieren beber algo? —Preguntó el camarero. 

—Sí —Xiang Xi levantó las cejas y dejó de sostener su barbilla. 

—Una Red Star Erguotou [1]—dijo Cheng Boyan: — y...

—¿Beberás Erguotou? —Xiang Xi lo miró sorprendido, pensó por un momento y dijo: —Bien, hace mucho que no he bebido Erguotou. 

—¿Quieres una botella de Erguotou?  —Repitió el camarero. 

—Dos... —Xiang Xi quiso corregir al mesero, pero Cheng Boyan lo interrumpió antes de que terminara de hablar. 

—Una botella y también, una bebida nutritiva express —Después de que Cheng Boyan terminó de hablar, lo volvió a mirar. 

—De acuerdo —El mesero se alejó. 

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