Capítulo 4

11 4 5
                                    

Isaac

Después de la alocada fiesta de Smith y que ella y yo termináramos en el que sería nuestro "último" encuentro. Me lleve a mi alcohólico amigo hasta su casa donde me quede a dormir ya que estaba muy cansado para irme a la mía, por no decir que no podía negarme a dormir en un colchón suave.

Al día siguiente se suponía que iba a trabajar pero mi jefe me había enviado un mensaje para decirme que no llegara debido a ciertos problemas y de inmediato yo pensé en la respuesta «Seguramente su esposa lo volvió a echar a la calle por descubrir su aventura con alguna mesera –Pensé en el instante que me lo dijo, ya que no era la primera vez».

Por lo que al día siguiente tuve que irme temprano ya que quise pasar mi día libre con mi hermanita, que se sorprendió al verme de nuevo en el domingo ya que se suponía que iría a trabajar, pero poco le importo al momento de lanzarse a abrazarme. Y ver la cara de desagrado de mi tío al verme solamente aumento la satisfacción en mi sistema.
Pasamos el día yendo a los lugares que Urs, quería y mientras tanto ella me comentaba como le iba en la escuela.

La verdad ella es feliz donde está, pero sé muchas veces que los niños con algún desorden, enfermedad o incluso un mísero tic son vistos por los demás niños como raros. Tal vez uno creería que no sería tan grave ya que son infantes pero incluso los niños pueden decir palabras hirientes a los demás sin darse cuenta, ya sea porque lo escuchan en casa o lo aprenden en otro lugar. Muchas veces o al menos las que he podido ir a recoger a mi hermana a su escuela, he visto como algunos niños se burlaban de mi hermana aprovechándose que ella no podía escucharlos bien. La sangre me hierve por eso pero siempre me recuerdo que son solamente unos niños que no saben ni como limpiarse el trasero.

Pero lo que me enfurece más son algunos de los maestros que ven a mi hermana como si fuera un alíen que camina por los pasillos de la escuela. Tal vez no fue la mejor elección de escuela para Urs, pero la verdad era la única cerca donde podía pedir la ayuda de una profesional en el tema de poder cuidar a mi hermana y de poco a poco irla ayudando a sobrellevar sus trastornos.

Por eso la hice pasar un gran día llevándola a alimentar a los patos que tanto le gustan y le compre un peluche de Tiger para que llevara a su colección.

Después de eso la deje con mis tíos y me regrese a mi departamento donde me lleve la (aún no sé si catalogarla como buena o mala) sorpresa, de ver a Rachel ahí. La verdad no me sorprendía ni me preguntaba como rayos fue que entro, ya que sé que lo hizo por la escalera de incendios o simplemente abrió la puerta con algún broche, esa chica de verdad es ingeniosa para entrar a mi casa y solamente le pregunte que rayos hacía ahí. Ella solamente dijo que había estado con una amiga pero que se fue porque había llamado a su novio y pues las cosas se subieron de tono, ella simplemente se fue de ahí. Uno pensaría que se iría a su casa como una persona normal pero no, la muy descarada vino a mi casa para empezar a ver su serie en mi televisión.

Pero se lo perdono al ver que trajo una pizza con orilla de queso y aceitunas, ósea mi favorita.

Ella no me dijo porque no regreso a casa y yo no le pregunte, sabía un poco de lo que pasaba en su casa o al menos lo que ella ha soltado pero lo demás no sé nada.

Solo pasamos hasta tarde viendo las películas que a ella le gustaban que se resumían en: Miedo, muertes y armas. Sinceramente desde que la conozco pienso que tiene un tornillo suelto pero no es como que el resto del mundo esté muy cuerdo que digamos.
Y pues sí, tuvimos sexo pero así se resumía nuestra interacción, de alguna forma éramos como confidentes, nos usábamos el uno al otro como antes mencione, ella usa mi casa y a mí como su medio de distracción y yo la uso para bajar un poco el estrés que llevo.

Mortuus Ante VictusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora