Pasillos y más pasillos, que horror, devuelvanme a mi cama, solo pido eso
—Tami— la voz de Rouse resuena por los pasillos, me doy vuelta para verla y por poco chocamos nuestras frentes una contra la otra
—¿Que haces?— pregunté molesta con un puchero
—Lo lamento, tengo que hablar contigo— dijo ella
—Pues yo también tengo que conversar contigo, pero primero cuéname tu cariño— enrollé mi brazo en el suyo y caminamos rumbo al lindo y hermoso césped dónde estaba haciendo solecito
—Tu mejor que nadie sabes porque no vine la semana pasada al instituto— asentí con la cabeza —Pues, quería venir el viernes pero mi papá me llevo a un viaje improvisado
—¿Un viaje? ¿A dónde?— la pereza me ganaba y ya quería dormir en el pasto pero escuchar a mi mejor amiga me resulta relajante
—Colombia— susurró, mi sueño se esfumó por completo, gire mi rostro para verla
—¿Por qué Colombia?— mi ceño estaba fruncido
—Pues, allí comenzó todo, mi padre conoció a mi madre, Jacob y yo fuimos concebidos— su mirada estaba clavada en el suelo, ya habíamos dejado de caminar y estábamos una frente a la otra
—Eso lo sé, pero, ¿Por qué te llevo allí? No creo que...
—Tamara...
La voz de Jacob me toma por sorpresa, una de sus manos está en mi hombro mientras que la otra está en mi cintura, obviamente mi cara prendió en llamas sacandole una risa a Rouse
—Te contaré los detalles más tarde— y con eso se alejo... Por favor no me dejes sola con él
—Ven, quiero hablar a solas contigo— respire hondo y me calme, tenía que ser fuerte y enfrentarlo
—Muy bien, vamos— tome su muñeca y lo jale rumbo al gimnasio, obviamente estaba solo porque las clases aún no habían terminado, lo empuje hasta el baño de chicas y lo hice sentar en una de las banquetas del lugar
—Muy bien, de que quieres hablar— dije con un tono de voz moderado
Él respiro hondo, se tomó unos segundos para analizar las bacterias del suelo y luego me miró a los ojos, maldita sea, no me mires así , eres muy guapo y no me resisto a eso
—Me gustas Tamara, y antes que digas algo... Soy un idiota, lo arruine, lo sé— él... él dijo que yo le gustaba, mis ojos se llenaron de lágrimas ante su declaración, llevo más de 10 años enamorada de ese idiota y ahora resulta que yo también le gustó, maldito idiota
Dí dos pasos hacia él algo insegura, por su semblante podía notar lo tenso que se encontraba, deslice mi mano por su hombro, pasando por su cuello y luego llegar a su mejilla, eso hizo que su mirada se encontrará con la mía, me sentía poderosa mirándolo desde arriba. Mi corazón se saltó unos cuantos latidos al sentir su mano tocar mi cadera y subir hasta mi cintura, era obvio lo nerviosa que estaba, intenté dar otro paso con seguridad
—¿Realmente te gusto o solo quieres algo en específico de mi?— susurré, me sentía tan insegura, no de él, sino de la situación
—Mi linda Cerise yo te lastime una vez, te ví llorar por mi, no quiero volver a lastimarte, por eso no quiero que me perdones ahora, quiero ganarme tu perdón— mis lagrimas caen sobre su rostro y se mezclan con las suyas
Respire hondo y mire el techo unos segundos
—Muy bien Jacob, así será— una sonrisa ladina se formó en sus labios, ya no estaba llorando, sus ojos estaban brillosos y ya no era por las lágrimas
Ya había olvidado aquella mano en mi cintura, estaba tan ocupada mirando y detallando su rostro que no note como se deslizaba por mi espalda
—¿Que haces?— susurré
—Nada— dijo alejando su mano de mi cuerpo, fue un poco gracioso verlo nervioso
—No te detengas— susurré, tome su mano y la acerque nuevamente a mi cuerpo, a horcajadas me senté en sus piernas, nuestros rostros estaban tan cerca que con tan solo movernos dos centímetros encontramos los labios del otro
—¿Y ahora que es lo que haces tu?— preguntó mirándome a los ojos
—Esto no significa que ya te perdone— tras decir esto corte la distancia entre nosotros, llevaba tanto tiempo deseando al menos besar su mejilla
Sentí sus manos acariciar mi espalda baja y luego bajar un poco mas, gemi ante el contacto, mis nervios a flor de piel logrando que sintiera cosquillitas en mi panza (tal vez las famosas mariposas)
Nos separamos para recuperar el aliento, sus ojos aún cerrados y los míos detallando su rostro
—¿Debería seguir?— preguntó él aún con sus manos en mi cuerpo
—No lo sé— susurré —Estoy muy nerviosa y... Pues... Es mi
—¿Tu que?— mordí mi labio, era algo tan fácil de decir, que estupidez, solo es una frase
—Soy virgen— solté finalmente
—Lo se, por eso te pregunté, quiero que estés segura de lo que haces, no quiero hacerte daño— acarició mi mejilla y coloco un mechón detrás de mí oreja
—Creo que quiero esperar un poco más— respondí
—Entonces así será— una sonrisa en su rostro me hizo sentir mis mejillas calientes, seguramente parecía un tomate —Ven, llevamos un tiempo largo aquí encerrados y los entrenamientos no demoran en comenzar
Se puso de pie conmigo en sus brazos, mis piernas enrolladas en su cintura y mis manos en sus hombros, me rei divertida y le dejé un pequeño beso en sus labios
—Bajame por favor— ya cuando estaba en el suelo me acomode un poco la ropa y camine rumbo a la salida —Esta en tus manos que te perdone, también me gustas pero aún no mereces que sienta todo lo que siento por ti
—Lo entiendo Cerise— sonreí ante el apodo, si supiera cuánto me encanta tal vez lo dirias más seguido
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Hola, hola mis pequeñas
Habichuelitas del conocimientoCapitulo corto, ya lo sé, pero sustancioso jsjsjsjsj eso es lo importante ;)
Estoy un tanto inspirada últimamente
y por eso decidí hacer un POV
sobre Tamara, (a decir verdad
yo tengo cierta debilidad por los
pelirrojos ya sean hombre o
mujer) re loco jsjsjsEspero que les gustara el capítulo y dejen
su muy apreciado votoDéjenme saber que les pareció aquí ;)
ATT: NatalyV
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Maldito Romance: Locos de Amor (#3)
RomansaLibro 3 de la saga "Maldito Romance" para leer este libro debes leer los dos primeros ________ Vivir bajo la sombra de la inigualable diseñadora de moda Laura Evans y su amado esposo el CEO de la mayor agencia de entretenimiento es más que tener un...