Los nervios se habían apoderado de su cuerpo cuando la puerta delante de él fue abierta por Jay, quien le invitaba a pasar amablemente.
Su corazón estaba acelerado, sentía pánico, como si por alguna extraña razón Sunghoon estuviera ahí vigilando cada movimiento que hace.
—Oye, no puedo dejar abierta la puerta todo el tiempo, ¿Quieres pasar o quieres tomarte tu tiempo?, Dejo las llaves puestas para que vuelvas a abrir la puerta.—Jay miro la expresión preocupada de Sunoo, ¿Acaso él se sentía obligado a ir?
Si algo que Jay no quería era que Sunoo se sintiera obligado a hacer todo lo que él quiere, tal vez sintió que lo presiono demasiado para que dijera que si sin siquiera saber si se sentía lo suficientemente cómodo para entrar a su casa.
—No...—Sunoo entro sin ningún problema después, cambiando su preocupada expresión a una sonrisa de lado a lado al ver a un joven con un delantal sirviendo unos platos en la mesa
—¡Hey, Jake!, Es casi un milagro verte ser taaaan servicial.—Dijo entre burla al ver al contrario acomodar la mesa y los platos con comida, haciendo que este le de una sonrisa forzosa viendo su claro fastidio, aunque se lo tomo más como una burla
—Nunca es tarde para ser servicial con nuestros invitados, ¿No crees?—Jake lo dijo entre dientes, haciendo que Sunoo se sintiera ajeno a lo que estaba pasando, aunque se notaba que el tercero ya había notado su presencia
Sunoo vió como el otro chico dejaba un trapo en una silla y se acercaba al frente de él, notaba un leve sonrojo en sus mejillas y tan solo le extendió la mano para presentarse.
—Hola, es un gusto poder conocerte en persona, tal vez Jay ya te lo haya dicho pero me llamo Shim Jaeyoon, aunque todos me dicen Jake.—Sunoo tomó la mano contraria para poder estrecharla, con una sonrisa también procedió a presentarse
—Un gustó conocerte, Jay me ha dicho cosas lindas de ti, me llamo Kim Sunoo.—Las miradas de ambos conectaron por un momento, haciendo que ambos se avergonzarán y mirarán a otro lado
—Bien, pueden pasar a almorzar, voy a quitarme esto y llevaré este trapo a la cocina y estoy con ustedes en unos segundos.—Caminó hacia donde estaba el trapo que había soltado hace unos minutos, así mismo se fue
Jay tomó a Sunoo de la mano y lo dirigió hacia el comedor, movió una silla e invitó a Sunoo a sentarse en ella, luego Jay procedió a sentarse delante de él para poder mirarlo.
La mirada de Jay, era profunda y penetrante, cualquiera se sentiría intimidado al ser visto por mucho tiempo por él, pero a la vez, se podía admirar notablemente el brillo de sus ojos, Sunoo se sentía tan temeroso y tan atraído por esa mirada... Más bien, hipnotizado.
—Sunoo, come un poco, está vez Jake se lució con la comida.—Dijo al ver el plato delante de él, sintió que había pasado muchos tiempo aunque realmente solo habían pasado pocos segundos, Jay tan solo le había dado dos cucharadas a su comida
—Hola volví, ¿Qué tal te pareció la comida?, Hoy me esforcé demasiado cocinando porque el tonto de Jay no quiere que te lleves una mala experiencia aquí.—Dijo mientras tomaba asiento a un lado de ambos, era un comedor pequeño tan solo para cuatro personas
—Oh, perdón, no le he dado ningún bocado... Está un poco caliente.—
—Puedes soplar, tal vez así se enfríe... Pero cuidado con Jay tal vez te robe un be...—Fue callado cuando sintió una patada en su pierna, viendo a Jay mirándolo con una sonrisa forzosa
—Me retracto... Tomate tu tiempo.—Jake comenzó a comer
Sunoo dió sus primeros bocados y realmente sintió que la comida estaba rica, con sus gestos y sonrisa tanto Jay como Jake se dieron cuenta que estaba disfrutando de la comida.
—Está muy rico, gracias por la comida Jake... Y gracias por la invitación, Jay.—Dijo antes de llevar otro bocado de arroz a su boca
—Pronto vas a probar la comida que hago y verás que realmente yo soy el amo de la cocina, Jake si acaso se defiende.—Dijo de forma retadora, haciendo que Jake le diera una mirada asesina
—¿Tú?, ¿Cocina?, No no no, esas palabras no van juntas.—Dijo Jake dando más bocados a su comida
—Sabes que lo hago rico.—Jay miro de reojo a Sunoo, quien se sonrojo y posiblemente haya mal interpretado el comentario, aunque ese era su objetivo
—¿Seguimos hablando de cocinar y comida verdad?, Porque si nos vamos a poner a hacer chistes de sexo me levanto y me voy a mi habitación.—Delató a Jay, quien se sonrojo intensamente
—¡¿QUIÉN DIJO CHISTES DE SEXO?!, Seguimos hablando de comida Jake, eres un puerco de mierda.—Regañó a su amigo, quien parecía estallar en cualquier momento de risas
—Mejor cállate y trata de no espantarlo... Sunoo, no le hagas caso a este rarito hormonal, él solo quiere meterlo.—Dijo Jake señalando a Sunoo con el palillo
—Bueno...—Se encogió en hombros y sus mejillas aún ardían, ¿Qué clase de almuerzo casual era este?
—El que va a espantar al pobrecito de Sunoo eres tú con tus comentarios asquerosos. Por eso ni una mosca se te para.—Le sonrió de forma victoriosa, conocía los problemas amorosos que tuvo su amigo así que sabía que le había dado un golpe bajo
—Auch, nunca pensé que fueras así de cruel...—Jake fingió dolor
—¿Puedo ir al baño?—Sunoo rompió las risas que se escuchaban, Jake y Jay se miraron y ambos dijeron un "si"
—Sigue derecho y la puerta a mano izquierda, ahí es el baño.—Dijo Jake dándole las indicaciones, Sunoo hizo una reverencia y fue casi corriendo al baño
—Maldita sea Jake, lo estás espantando.—
—¿Yo?, Más bien mira que nada malo le esté pasando, ¿Seguro qué no lo obligarte a venir?—
—No... Tal vez solo se siente mal y ya, cualquier cosa lo llevaré hasta su departamento así sea cargado.—Dijo Jay caminando hacia el baño
Jake tan solo se quedó sentado mirando el plato de Sunoo, estaba casi vacío, ¿Cuánto tiempo habrán tenido esa pelea tonta como para que el menor hubiera casi terminando su plato?
Por otro lado, Sunoo encendió la llave del lavamanos y tomo un poco entre sus manos, mojo su rostro y se miró al espejo, dándose cuenta que muy en el fondo sabía que iba a terminar diciéndole mentiras a su mejor amigo.
«¿Por qué vine?, Sé que él está aquí... Está aquí... Él... Está en todos lados.» Sunoo miro con preocupación su reflejo, no quería que Sunghoon le hiciera algo por haber ido a otro lugar sin su permiso o sin él.
«Él me va a encerrar y me va a atar... Él me va a golpear... Él...» sus lágrimas amenazaron con salir, hasta que se percató de los sonidos de la puerta del baño siendo golpeada y Jay llamando a su nombre repetidas veces.
—Sunoo, Sunoo... ¿Estás bien?, Si quieres puedes irte a tu casa... Yo te acompaño.—Dijo Jay un poco triste haciendo que Sunoo negará por completo al ver aún su reflejo
—¡No!, Es solo que comí muy rápido y me sentí mal, solo me vine a mojar el rostro y a calmarme un poco... La estoy pasando genial, tú y Jake son muy amables.—Dijo sin poder despegar su mirada de su reflejo
«Vamos... Deberías irte... Él nos está observando... Él está en todos lados... Él es nosotros.» Sunoo se atemorizó al ver cómo su reflejo le estaba hablando, haciendo que este abriera espantado la puerta del baño y salió agitado, siendo seguido por Jay quien lo miro de una manera extraña pues no había visto esta faceta de él.
Sunoo... Un pequeño muñeco de porcelana que esconde sus grietas bajos su linda piel pintada y su ropa.
★
Quiero hacer un capítulo del pasado de Sunghoon y Sunoo, bueno, de hecho son alguno que tengo en mente y más que todo serían como una pequeña muestra de los traumas que Sunghoon le creo a Sunoo.
Recuerden que ustedes son libres de corregirme algún error ortográfico.
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CONDANNATO ; SUNGSUN - JAYSUN
Fanficestaba ciego y confundido, su mejor amigo de la infancia lo torturaba sin que él se diera cuenta de la realidad, mientras que que desde la distancia, un jóven quería salvarlo de lo que se consideraba como el peor castigo humano. "condannato" condena...