vi ; Seguo i tuoi passi, non importa se non sono al tuo fianco

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Para ser sinceros no estaba prestando atención a la clase del señor Kim, en su mente solo rondaba la escena de Sunghoon dándole de comer con la mano, aún amarrado y encerrado en esa habitación tan fría y vacía.

Solo podía escuchar las manecillas del reloj moverse lentamente, incluso si en el salón había ruido de su maestro y sus compañeros. Iba a enloquecer en cualquier momento, se sentía extraño.

Cuando la clase dió por terminada unos minutos después se levantó para ir a lavar su rostro en el baño, corriendo por los pasillos hasta que pudo entrar al baño más cercano.

Abrió el grifo y tomo con sus manos juntas agua, acercándose a lavamanos para mojar su rostro y sentir el agua fría sacándolo de sus extraños pensamientos. Cuando se levantó pudo ver a Jay viéndolo fijamente.

—Hola Sunoo, pude verte entrar como si estuvieras preocupado o intentaras escapar de algo o de alguien, ¿Todo está bien?—Preguntó acercándose hacia él

—Jay... No te preocupes estoy bien... Solo un poco cansado por el fin de semana, Sunghoonie hyung y yo hacemos aseo todo el fin de semana.—No iba a mentir cuando su apariencia realmente parecía demacrada, no durmió bien en dos días al igual que tuvo poca alimentación, Sunghoon solo lo saco de ahí para volver a sus clases

—Está bien... Oye, cuando salgamos de clases podemos irnos juntos con Sunghoon, está mañana no los pude alcanzar porque salí tarde y...—Su conversación fue interrumpida cuando un tercero abrió la puerta

Sunoo trago en seco al darse cuenta que quien abrió la puerta era Soobin, quien tenía una ojeras muy notorias y en sus ojos cargaba el cansancio de no dormir bien por varios días, se sentía tan culpable, aunque sabe que el accidente de su maqueta no fuera su culpa.

Jongseong solo miro a Sunoo mirar al chico sin decir nada, el ambiente se había notado incómodo aunque parecía que el tercero ignoraba por completo a los otros dos.

El menor parecía solo estar en silencio, sin decir ni mover un solo músculo, el tercero solo le dió una mirada a ambos y se acercó a un lavamanos para mojarse la cara y salir lo más rápido de ahí, no quería ver a Sunoo por el momento, hasta que pudiera arreglar su inconveniente trataría de resolver todo con él.

—Bueno... Eso fue, ya sabes, un poco extraño... ¿Entonces te suena la idea de irnos juntos?—Jay parecía esperar una respuesta positiva, quería ayudar a Sunoo en lo que sea que le esté pasando

—Lo pensaré, por el momento tengo que ir a clases... Te avisaré más tarde.—Hizo una reverencia y luego salió del baño, dejando a Jongseong en el baño

«Le está pasando algo raro, lo sé.» pensó quedándose solo en aquel baño, Sunoo era extraño, pero muy lindo y adorable, y Jay haría todo lo que esté a su alcance para ayudarlo y obvio, para conquistar su corazón.

La hora de salida había llegado, Jay iba acercándose al salón de la facultad de Sunoo para preguntar nuevamente si aún estaba en pie la salida, aunque freno cuando vio a Sunghoon hablándole a Sunoo.

Luego de que le diera un abrazo vio que él se fue por un camino diferente decidió acercarse para hablar ahora él con su menor, quien se sorprendió al verlo ya que ahora tenía vía libre para irse con él.

—Hola, ví que estabas hablando con tu mejor amigo y no quise interrumpirlos, ¿Pero Sunghoon no se irá contigo?—Preguntó con una sonrisa, aunque no le daría inconvenientes la presencia de Sunghoon era mejor ir solos los dos

—Oh, es que Sunghoon hoy tomará algunas de sus clases en la tarde, vino a decirme que me fuera solo al departamento y me entrego las llaves.—

—Entonces, ¿Quieres que te acompañe?, Un bello joven como tú no debería estar solo por ahí, cualquier cazacorazones puede intentar ligarte.—Intentó hacerse el coqueto, haciendo que Sunoo soltara una risita tímida agachando la cabeza

—Me parece bien... Vamos.—Comenzó a caminar hacia la salida mientras que Jay venía detrás suyo

«Se ve tan lindo cuando está sonrojado, ojalá pudiera verlo así todos los días cuando le de sus buenos besos.» Jay veía de reojo a Sunoo ahora caminando por su lado ignorando la expresión preocupada del menor.

«Sunghoonie se molestaría mucho si se entera que estoy yendo a casa con Jay... No quiero que me vuelva a encerrar en la habitación del castigo.» Ignorando por completo la charla que Jay le estaba intentando hacer, Sunoo solo podía pensar en que cosas podría hacer Sunghoon si se llegará a enterar que estaba siendo acompañado por alguien.

Antes de que iniciará su clase, Sunghoon saco su teléfono y fue al link que aquel tipo le había enviado hace algunos días que fue a comprar el collar.

«Si ese maldito me estafo los voy a asesinar, ese collar no parecía ser un rastreador sino algo simple y ya.» espero que se instalará la aplicación del link.

Sunghoon no era cualquier estúpido, él sabía que Sunoo se estaba viendo con Soobin otra vez, ni saboteando la estúpida maqueta de Choi pudo quitárselo de encima.

«Maldito Choi Soobin, ojalá te pudiera matar.» apretaba la mandíbula viendo la pantalla de su teléfono aún instalando la aplicación, hasta que unos minutos después termino la instalación e ingreso de una vez en ella.

No era la mayor cosa, solo le pedía la dirección del rastreador para poder localizar dónde se encontraba, Sunghoon dió los datos de este y rápidamente se abrió un mapa de su ciudad, un punto rojo se encontraba caminando por la ruta donde ellos siempre iban... Entonces suspiro aliviado porque su compra no había sido en vano.

«Oh, mi pequeño Suni, yo siempre voy a estar a tu lado incluso si no lo estoy.» sonrió viendo la pantalla, tendría vigilado a Sunoo de cualquier otra forma, porque no podía permitir que él se volviera a escapar de su lado... No dejaría que cualquier idiota se quedaría con su felicidad... Porque él mismo se prometió dejar de matar si Sunoo estaba a su lado.

Pasaron unos minutos mientras aún veía la pantalla de su teléfono, hasta que vio que Sunoo paro, posiblemente compraría algo ya que por esos lados hay muchas tiendas y restaurantes. Lo que no sabía es que en ese momento no se encontraba solo, un hermoso chico estaba con él y si se enteraría de ellos se volvería loco.

Por otro lado, Jay quiso que Sunoo le diera un poco de atención así que decidió decirle que le compraría un helado, así que lo llevo a una tienda para comprar uno y bueno, tal vez sentarse por ahí a comer y hablar.

—Oye, ¿De qué quieres tu helado?, ¿Paleta, cono o sandwich de galleta?—Preguntó el mayor, ambos al frente del congelador

—Uno de cono está bien, gracias... Aunque no era necesario.—

—No me importa gastar mi dinero, al fin y al cabo quiero que nos conozcamos un poco más... Ya que no me escribes entonces tengo que esforzarme en la realidad, ¿No?—Soltó una risa imaginando a Sunoo teniendo un debate si escribirle o no Jay, aunque todo era totalmente diferente

—Perdón... No soy mucho de usar el móvil, solo a veces lo uso para alguna consulta o para escribirle a Sunghoon.—Se sintió un poco avergonzado al recordar que Jay le había dado su número hace algunos días atrás y no pudo contactarlo

—Nah, no te preocupes por eso, siempre y cuando pueda verte sonreír me conformo con eso.—Le guiño el ojo, nuevamente haciendo que Sunoo se sonrojara por eso

Él no era tan tonto, sabía que Jay le estaba intentando coquetear y que podría buscarse problemas con su mejor amigo... Pero muy en el fondo, se sentía un poco atraído por Jongseong.

Hola que tal reviví, perdón es que no he tenido buen internet para publicar o para escribir jajan't.

Recuerden que ustedes son libres de corregirme algún error ortográfico.

CONDANNATO ; SUNGSUN - JAYSUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora