xvi ; il nome di quella dipendenza

170 19 13
                                    

"Con el tiempo me he dado cuenta que por más que te aleje de las personas van a aparecer otras nuevas a querer alejarte de mí. No les puedo dar el gusto, nunca más les voy a dar el gusto... Te aleje de tu madre porque sabía que ella no te quería cerca mío, te aleje de tus amigos en aquel lugar donde vivíamos antes, te aleje del mundo para que tú solo me dieras la atención a mí. No sabes cuánto te necesito, no sabes cuánto he arriesgado por ti, desde el momento en que te acercaste con esos ojitos de zorro en busca de tu pelota supe que solo serías para mí... Serías mi cura y a la vez mi enfermedad. Sunoo... Seonwoo... No sabes hasta donde he llegado y hasta donde pienso llegar, porque si es necesario exterminar a toda la humanidad, lo haré."

Años atrás

Sunoo jugaba con su pelota solo en el parque, su madre, la señora Kim lo vigilaba desde la distancia mientras realizaba una llamada telefónica.

En algún momento lanzo su pelota y está fue a parar dentro de unos arbustos, frunció su ceño y fue a buscar su pelota, odiaba a cuando está se iba lejos de él.

«Que pelota tan tonta.» pensó el pequeño mientras se abría paso entre los arbustos, cuando llegó al centro de estos se dió cuenta que había otro niño, el cual ignoraba por completo la pelota al lado suyo.

Se comenzó a acercar a paso lento y silencio para ver qué estaba haciendo el otro niño, cuando se acercó lo suficiente alzó un poco la cabeza, para ver el acto atroz que estaba pasando. Aunque, en su pequeña mente no entendía que era lo que estaba haciendo con aquel inocente bicho.

El otro niño tenía una tijeras en mano, cortando y despedazando a la pobre salamandra que estaba agonizando en el suelo al perder sus extremidades.

Sunoo no comprendía que estaba pasando, así que solo fue a un lado para recoger su pelota pero está vez, el niño se dió cuenta de su presencia .

¿Qué estás haciendo aquí tonto?, Este es mi arbusto.—Reclamó con enojo, Sunoo no quería pelear con otro niño porque eso lo hacía llorar

—Y-yo solo vengo por mi pelota.—Sus ojos comenzaron a aguarse, fue en ese momento cuando el otro niño lo miro y pido admirar su belleza

El contrario se levantó y se acercó a Sunoo, pasó su dedo pulgar en los ojos de este y limpio las lágrimas que se encontraban acumuladas ahí, no entendía porque se había puesto a llorar de la nada.

—No llores, los que lloran son niños tontos y patéticos.—Dijo el otro niño, Sunoo sintió pena por mostrarse débil ante otro

—No soy tonto ni parerico...—

—Es patético.—

—¿Cómo te llamas?—Preguntó Sunoo enrojecido por la situación

—Me llamo Park Sunghoon, vivo cerca del parque así que puedo venir solo aquí.—Dijo mineras guardaba las tijeras en su bolsillo

—¿Qué le estabas haciendo a esa pobre salamandra?—Preguntó al ver el cuerpo agonizando del animal

—Solo le di una mano... Un gato la traía entre su boca así que se la quite pero estaba muy herida, así que solo la ayude a que su dolor cesará.—Se agachó para tomar una piedra, camino hacia al frente del cuerpo y lo aplastó con esta, Sunoo, no entendió nada, pero estaba asustado

CONDANNATO ; SUNGSUN - JAYSUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora