Extra 1, Nammin; Extraordinario.

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La primera vez que vio a Namjoon creyó que era un tipo genial pero que no era tan impresionante como su compañero Jungkook había comentado, es decir, sí tenía un extraño atractivo pero no podía entender dónde estaba lo "impresionante" que todos veían en él, no podía verlo y tampoco le quitaba el sueño por las noches, solo que ese día, justamente ese día de práctica estaba más que curioso.

Jimin veía como ese hyung se reía con los demás y miraba con atención a su coreógrafo intentando marcar los pasos, a simple vista no era uno de los mejores bailarines como lo era Hoseok, otro de los chicos del entrenamiento o como Chansun, uno de sus bailarines de respaldo, estaba claro que esa no era la grandeza de la que le habían hablado. Al verlo resbalar al tropezar con uno de sus pies rodó los ojos y se puso a practicar.

Tiempo más tarde en su práctica de canto, mientras Jimin estaba dedicándose de lleno a llegar a sus notas altas, al fondo de escuchaban chillidos de un animal en agonía (si es que con algo podría ser comparado), volteó su rostro y observó como justamente ese hyung cantaba o por lo menos lo intentaba. Él no era el increíble cantante como lo era Jungkook o Hyunbin, otro de los practicantes pero al menos se esforzaba en sacar lo mejor de su voz. Unas platicas más tarde supo que Namjoon estaba ahí para ser parte de un grupo de raperos y terminó de entender todo.

Al salir de la empresa dirigiéndose al departamento que compartía con todos los aprendices se preguntaba: ¿Si Namjoon hyung no es buen bailarín y mucho menos un buen cantante qué tiene de increíble? Porque había observado tanto tiempo a ese muchacho que no había podido siquiera conseguir un encanto si se ponía a pensarlo bien, aunque se integraba a algunas conversaciones no siempre era él quien hablaba y tampoco salía gran información de su boca así que en serio si alguien le estaba jugando una broma que se lo dijera ya.

Cuando despertó la mañana siguiente seguía pensando en qué habilidades tenía Namjoon para que todos alabaran su persona y supo entonces que tenía que escucharlo rapear ¿Eso era no? Un rapero.

Durante las prácticas los separaban en grupos de diez y desafortunadamente cuando a él le tocaba ir a baile, Namjoon tenía que ir a canto así que ese día tampoco tuvo nada de suerte.

La perspectiva hacia Namjoon cambió cuando una noche después de sus prácticas, el mayor se había quedado en letras y composición para avanzar un par de tareas que tendrían que entregar la próxima semana a su maestra. Ese día Jimin se había ofrecido a hacerle compañía.

- ¿Qué tanto escribes, hyung? - Trataba de husmear Jimin en la libreta donde estaba escribiendo el mayor y sin lograr su objetivo preguntó.

El más alto le sonrió y tomando su libreta en manos se la tendió para que le echara un vistazo. Para Jimin haber leído el contenido de esa libreta había sido una bendición, había quedado sin palabras, solo podía pensar en cómo a alguien se le podría ocurrir algo tan magnífico como lo que había leído. Y sin siquiera querer levantar la vista de la libreta le preguntó.

- ¿Tú-tú es serio escribiste esto? - Tartamudeó un poco porque ni las palabras podían formularse completamente debido a la impresión.

- Hace una semana en composición.

Luego de haber compartido ese momento, Jimin terminaba por cruzarselo a todos los lugares donde iban, a canto, a composición, a letras, a instrumental y descubrió que Namjoon no solo escribía bien, si no que también era todo un experto en el rap.

Parecía todo un chiste pero Namjoon había pasado de ser lindo a ser atractivo. A sus dieciséis años nunca le había llamado tanto la atención una persona pero ahora no podía apartar su mirada del mayor, incluso su amigo Taehyung (quien por sorpresa resultó ser uno de sus compañeros de secundaria), le preguntó si tenía un cierto interés por Namjoon, él rápidamente lo negó y Taehyung había decidido en no decir nada más.

BABY.  《nammin》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora