Un nuevo día había llegado a la ciudad de Brisbane.
En casa de la familia Heeler-Collie había agitación pues los gemelos ya habían cumplido los 6 años de edad.
Y era el primer día en su nueva escuela.
-Christine y Enzo, bajen rápido que ya se les está haciendo tarde para la escuela!- Gritó Bluey.
Los pequeños bajaron rápidamente las escaleras emocionados por que por fin iban a tener su primer día de escuela.
Bluey decidió que debían ir a la misma escuela a la que asistieron ella y su amado esposo.
Aunque trataba de disimular que estaba nerviosa. No pudo evitar que sus hijos notaran la preocupación en los ojos de su madre.
-No estes nerviosa mami, todo estará bien 😁!- dijo Enzo con una sonrisa.
-Oh, no estoy nerviosa, estoy emocionada por que mis hijos ya son grandes y van a ir a su primer día de escuela - dijo Bluey.
Subieron a la camioneta y se dirigieron a la escuela de la profesora Calypso. Que a pesar de su avanzada edad, aún seguia impartiendo clases.
Cuando llegaron a la escuela, Bluey abrazó a sus hijos, eran la muestra del gran amor inmortal de Bluey y Mackenzie. Y deseaba que tuvieran el mejor futuro posible.
Hacia ya algo de tiempo que Bluey no hablaba con sus padres pero lo que se enteró de que su tía Brandy había adoptado a un pequeño cachorro cuya madre había muerto cuando este nació.
Se sentía feliz por Brandy ya que aunque no era como esperaba, ella había cumplido su mayor anhelo que la genética no le permitió: ser madre.
Aunque se preguntaba quién era la difunta madre del pequeño Michel, no podía hacer nada más que ser feliz por ellos dos. Es por ello que no se sorprendió cuando vió a su tía Brandy llegando a la escuela para dejar a su hijo adoptivo.
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-Brandy, que sorpresa verte por aquí!- saludó Bluey.
-Hola Bluey! Cuánto tiempo ha pasado, pero que grandes están tus hijos, se parecen mucho a los dos - dijo Brandy.
-Gracias tía, también Michel se ve que ha crecido mucho este año- dijo Bluey mientras abrazaba a su primo.
-Hola prima Bluey!- saludo el pequeño Gollie.
-Cuando vas a pasar a visitarnos?- preguntó Brandy.
-Estaba pensando en pasar a verlos en las vacaciones de verano de los niños - dijo Bluey.
-Hoy es su aniversario, no es así?- preguntó Brandy.
-Si, hoy es nuestro aniversario de bodas - respondió Bluey.
-Espero que sea un maravilloso día, no todos los días se casa uno - dijo Brandy a modo de despedida.
-Me dió mucho gusto verte Tía Brandy, pronto vamos a visitarlos- dijo Bluey.
-Eso espero - dijo Brandy.
Después de esta conversación se dieron un abrazo y cada una se fué a su hogar.
