Una Luz se Desvanece parte 4: Recuerdos

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Bluey todavía recordaba esa noche en que todo su mundo cambió para siempre.

Recordó la risa maniática de Donatella mientras golpeaba su cabeza contra el suelo, recordaba al amor de su vida, herido de bala en un costado.

La rabia y la desesperación que sentía porque Donatella se las arregló para arruinar la noche más especial, pues esa noche le iba a decir a Mackenzie que estaba esperando un hijo de él.

Recordaba la mirada de sus padres cuando llegaron al hospital después de que Bingo les avisara que fué lo que pasó y como sus padres la regañaron por haber ido a buscar a Mackenzie sin ayuda de la policía aún sabiendo lo desequilibrada que era Donatella.

Recordó como subió a la ambulancia junto con Mackenzie mientras tomaba su mano.

Llegando a su casa fué que hizo todos los preparativos. Compró ramos de flores y se dirigió al cementerio.

Ahí se paró frente a las tumbas de los Collie. No podía aún asimilar lo que había pasado. No podía creer que ya no estuvieran ahí para ver crecer a los gemelos.

Fué por eso que consiguió que Jean Luc, el jefe de policía y esposo de Coco, le permitiera acabar con Donatella.

Aún recordaba la mirada burlesca de Donatella cuando la vió. Esa mirada que odiaba.

Aun recordaba como lo preparó todo para que la muerte de Donatella pareciera un suicidio.

Sabía que aunque haya acabado con la existencia de Donatella, eso no le devolvería lo que perdió.

Y por eso es que decidió también, que Brandy pudiera adoptar a Michel, el cachorro no tenía la culpa de la loca de su madre.

Y tampoco quería que le pasara algo al niño ya que al final, Michel también era hijo de su esposo. Un hijo nacido de la locura de alguien obsesionada con ella.

Solo deseaba que Michel tuviera una buena vida y sabía que podía confiar en su tía Brandy.

Sentimientos (Un fanfic Bluey X Mackenzie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora