02; ghostface está de vuelta

870 77 4
                                    

CHAPTER TWO
ghostface está de vuelta

El grupo había ido a la residencia de Sam, Tara, Verónica, Madelyn y su otra compañera, Quinn.

Cuando llegaron Verónica fue directamente a su cuarto, ninguno la detuvo, entendían que quisiera un tiempo para que ella estuviese sola.

Se sentía muy ridícula, había hecho que Chad se metiera en una pelea, y eso la hacía sentir fatal.

Dejó su bolso en su mesa de noche, y el sombrero cowboy igual, este con media sonrisa y no tardó en tirarse a la cama rendida. Escuchó unos toques en la puerta, así que giró su cabeza hasta la puerta, donde se encontraba Quinn apretando sus labios.

—Vi que te fuiste enseguida, ¿todo bien? — preguntó la chica, Verónica se levantó sentándose en su cama.

—Hubo un incidente con un idiota, hice que Chad se pelease, y Tara y Sam discutieron sobre que Tara se siente ahogada — resumió Verónica, Quinn suspiró.

—Puedo entender a Tara, ¿sabes? — comenzó a hablar —. Sé muy bien lo que es que te asfixien. Después de que... perdiésemos a mi hermano, mi padre... no me dejaba ni respirar, hasta pidió el traslado a la policía de Nueva York cuando entré a la uni.

La morena le dedicó una sonrisa apenada antes de acercarse más a ella y envolverla con sus brazos, en poco tiempo Quinn se había convertido en su amiga, era un apoyo dentro del piso.

Unos golpes en la puerta hicieron que Verónica girase la cabeza para ver de quien se trataba, al ver que era Chad le sonrió levemente, sintiendo algo de vergüenza.

Quinn también vio a Chad por lo que se giró hacia Verónica con una ceja alzada, ella ya sabía que su amiga estaba enamorada del chico.

—Bueno, mejor me voy y os dejo que, habléis — comentó Quinn sonriendo apretando un poco sus labios, Verónica le sonrió rodando los ojos antes de dejar un beso sobre su mejilla.

—Sabes que si me necesitas estoy aquí, Quinn — le aseguró Verónica, Quinn le sonrió antes de levantarse de la cama y caminar hasta la puerta, donde tomó el pomo para cerrarla, pero antes de cerrarla le guiñó el ojo a su amiga, esta negó levemente rodando sus ojos.

Cuando se cerró Verónica miró a Chad que ya la miraba con media sonrisa.

—Lo siento mucho — habló Verónica un tiempo después apretando sus labios —. No debí seguir a ese tío, fue una estupidez, y encima te tuviste que pelear — Verónica no dejó siquiera que Chad contestase —. No hace falta que te quedes aquí, casi seguro no hay más peleas, pero gracias por lo de hoy.

Chad apoyó sus brazos en el escritorio de la chica aún mirándola con una sonrisa —. Qué pena — contestó él y luego alzó sus brazos fingiendo pegar —. Yo que tenía ganas de calzar unos cuantos golpes mientras podía.

La morena alzó una ceja viendo como Chad se movía hasta sentarse al lado de ella, poniéndola nerviosa —. ¿Sí, machote?

—Sí — afirmó él girando su cabeza para mirarla, encontrándose ya con la mirada de Verónica, y sus labios formaban media sonrisa.

—Atrévete — se burló Verónica.

Chad llevó sus manos detrás de su espalda apoyándose en ellas, bajando un poco la cabeza, volvió a subirla y está vez Verónica estaba más cerca, ambos tenían media sonrisa.

𝐅𝐀𝐌𝐈𝐋𝐘 𝐋𝐈𝐍𝐄, scream ✔︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora