RYDER

capitulo 26

  Las botellas de champán corrían en la zona VIP de Diva. La Elite al completo necesitaba ese momento de diversión después de los días duros que habían tenido. Todo eran risas y bromas, bailes y pisotones por parte de los más patosos. Al verlos juntos se notaban el buen equipo que hacían. Lejos de las miradas indiscretas de los Ryder, La Elite podía comportarse según sus sentimientos, sin mascaras.

Todos se lo estaban pasando de maravillas, todos menos una.

Dakota seguía las risas y bromas de su equipo para que nadie sospechara nada. No se encontraba bien, más bien quería escapar lo más lejos posible.

Después de la llamada de Dereck, un terrible dolor se había instalado en su cabeza. Pero no tenia nada que ver con los terribles dolores que sufría cuando no alimentaba su oscuridad. Este era un dolor diferente. Un dolor cansado.

Miraba uno a uno a todos los miembros de su equipo y sabía que esa gente daría la vida por ella, pero, había un chivato.

Ella sabia que no podría pertenecer a su equipo.

Eran demasiado cuidadosos con esas cosas.

¿Como era posible que uno se hubiera colado en su organización? Es de locos pensó.

Miro su reloj por enésima vez en lo que iba de noche.

3:30h.

Echo un rápido vistazo a la zona VIP y comprobó que ningún miembro de su equipo faltaba. Sonrío y suspiro de alivio cuando sus ojos se encontraron con los de Caleb. Quien quiera que sea el soplón ya debería de salir hacia esa reunión, y, ninguno de ellos parecía que tenia la intención de moverse.

Se acerco a su jefe de seguridad y le susurro al oído.

-        Voy a salir, es importante, necesito que me cubras y que me digas si alguno del equipo abandona el lugar más de 20 minutos.

-        ¿Después me dirás que demonios esta pasando? Pregunto Vincent, aunque más que una pregunta era una afirmación, no iba a parar hasta que Dakota le digiera que era lo que estaba pasando.

-        Claro. Hiciste lo que te pedí

-        Si, tienes la tablet en el coche, en el asiento del conductor, abajo como me pediste.

-        Gracias.

Vin la miro sorprendido, últimamente todos estaban mas que sorprendido con el cambio de actitud que estaba tomando Dakota. Hace unos meses un gracias de su boca era impensable, y aunque con el resto de la gente seguía manteniendo ciertas distancias, con ellos, se había relajado bastante.

Vincent sabia que mucha parte de ese cambio se debía a Caleb. El chico la verdad que cada día le caía mejor, y aunque en un principio no se fiaba nada de el, poco a poco se había convertido en alguien importante dentro de La Elite. No por meritos claro esta, pero si por haber conseguido sacarle sonrisas sinceras a la persona por la cual giraban sus vidas. Dakota.

  Dakota se monto en su coche y soltó una gran bocanada de aire. El chivato iba a pagar por esto, y el agentito del FBI tampoco se iría de rositas.

Condujo hasta el gran edificio que pertenecía al FBI y aparco en la mismísima calle. Total, pensó, ¿que mas daba si ya tenia una foto suya circulando por ahí? Demasiadas veces a lo largo de su vida había soñado con que la metieran en la cárcel, o que la condenaran a cadena perpetua, o mejor aun, a la pena de muerte. Su vida se convirtió en un infierno a partir de los 8 años y esa le parecía una buena solución de escape cuando se hizo mayor de edad.