CAPÍTULO 24

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Fiebre

No sabía como afrontar esto, tenía a mi novio rompiéndose en pedazos entre mis brazos y yo no sabía que hacer.

- No merezco ser el número uno, no te merezco a tí - Cuando dijo eso sentí como mi corazón se paraba, tomé su rostro y lo miré, sus ojos estaban hinchados y las lágrimas caían por su cara, ya ni se apartaba para que no le viera, parecía tener la mirada pérdida, como si no estuviera aquí conmigo -

- No se te ocurra volver a decir eso - Dije con seriedad y entonces fue cuando obtuve su atención -

- Es la verdad TN, no te merezco, soy una mierda de persona, tengo un carácter de mierda, soy un puto cobarde y un inútil, lo único bueno que tengo es mi quirk y ni siquiera se usarlo al máximo, y si algún dia aprendo, me quedaré sordo - Su voz no era como de costumbre, no sabría explicar como era, pero estaba distinta -

- KATSUKI BAKUGO!!! - Le grité con rabia, yo no había dejado de llorar pero no podía más -

Él me miró sorprendido al ver como le había gritado.

- No voy ha permitir que sigas hablando de tí de ese modo, eres el puto Katsuki Bakugo, eres el mejor estudiante de la UA, eres el ganador del festival deportivo, tienes uno de los mejores dones de la academia y ¿aún así te atreves a decir que eres patético e inútil? - Él agachó la mirada, parecía un niño pequeño siendo regañado por su madre - Mírame - Tomé su mentón e hice que me mirase - Solo yo puedo decidir quien me merece y quien no, quien es bueno para mí y quien no. Y tú Katsuki, me da igual si eres bueno o si me mereces, te quiero, y punto, no creo que haya nadie mejor que tú en este mundo y si lo hay no quiero conocerlo, quiero que tú seas mi heroe número uno, aunque no seas el de Japón o el del mundo. Pero se el mío, se mi héroe número 1, sigue siendo tú, se el chico explosivo al que nadie puede plantarle cara - Acaricié sus mejillas limpiando sus lágrimas - Kacchan, te secuestró la liga de villanos porque tienes un quirk espectacular y tienes un gran dominio de él, lo hicieron porque no hay nadie mejor que tú. -

Esa información pareció no gustarle demasiado, pero era la realidad, iba a volver a esconderse pero lo detuve.

- Es normal tener miedo, es normal sentirte como te sientes, eres humano, y por muy bueno que seas o por muy fuerte que seas, no dejas de ser un chico de 17 años que está estudiando, así que después de un evento tan traumático como ese es normal que tengas miedo a esas pesadillas y es normal necesitar ayuda, por eso no te vuelves un cobarde, no te vuelves patético ni inútil - Su mirada parecía relajarse y me miró muy fijamente a los ojos -

Su llanto que había cesado ligeramente volvió a intensificarse, tomó mi rostro entre sus manos y me acercó a él basándome bruscamente, pero lo que empezó siendo un beso con rudeza de pronto era uno realmente suave y dulce, mis manos bajaron a su pecho y lo acaricié ligeramente sintiendo bajo mi palma su corazón latiendo a gran velocidad.
Cuando nos quedamos sin aire se alejó y volvió a abrazarme ocultando su rostro en mi pecho, sus grandes manos acariciaron mi espalda, suspiré aliviada de ver que estaba mucho mas calmado.

- Puedes... Puedes acariciarme el pelo? - Dijo bajito, sonreí enternecida y eso hice, acaricié su cabello como tanto le gustaba que hiciese -

Nos quedamos así durante un rato, luego cambiamos de posición y él se sentó apoyando sus manos en el suelo detrás de su espalda y yo me apoyaba en su pecho viendo de nuevo las estrellas.
Pero poco a poco me fue ganando el sueño y aunque le dije que me quedaría despierta con él, no pude evitar dormirme sin darme cuenta.

NARRA BAKUGO

Odiaba verme vulnerable ante la gente, pero con ella todo era muy distinto, podía ser yo, sabía que no me iba a juzgar por llorar, sabía que no la iba a decepcionar por decir que tenía miedo. Cada vez me sentía mas enamorado de ella, todas esas palabras de motivación que salían de su boca, sus lágrimas que salían por verme a mí mal, me demostraba que realmente yo le importaba, y que no le importaba solo mi quirk fuerte, o mi físico, si no que iba más allá.
La miré a los ojos y no pude evitar darle un beso que en ese momento lo significó todo para mí, estaba mas que seguro, yo ya le pertenecía, tenía ganado mi corazón y estaba completamente a sus pies.

Lo Que Dicen Tus Ojos >>Bakugo Y TN<< ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora