Lo Que Dicen Tus Ojos >>Bakugo Y TN<< ✅

CAPÍTULO 38

¿Podrías irte?

Al volver a las habitaciones entré en la de Katsuki y la vi vacía así que fui a la mía directamente encontrando una bolita de pelo rubia saliendo de la sabana y un bulto en mi cama. Reí un poco y tras cambiarme me metí junto a él.

- Ya estás aquí? - Dijo él con la voz ronca y adormilada dandose la vuelta -

- Sip, aqui estoy - Sonreí y me acerqué, él me abrazó metiendo sus manos bajo mi camiseta y me acarició la espalda apoyando su cabeza en mis pechos - Buenas noches Kacchan - Dije con una boba sonrisa acurrucándome junto a él en las suaves y calidas sábanas -

A media noche desperté al sentir una pequeña punzada en la parte baja de mi vientre, sabía lo que significaba eso así que me asusté.

- Oh mierda! - Salí de la cama corriendo empujando a Bakugo que me estaba abrazando y entré rápidamente al baño -

Bajé mis pantalones y mi ropa interior y efectivamente, me había bajado la regla por la noche, me quería morir ahora mismo.
Rezaba por que no hubiera manchado la cama, moriría de vergüenza si Bakugo veía eso.

- ¿Pato? - Escuché a Katsuki hablar al otro lado de la puerta tras tocarla un par de veces -

- ¿Q-que? - Dije nerviosa sujetando la puerta para que no la abriera -

- ¿Va todo bien? ¿Que pasa? - Dijo con preocupación -

Me sabía muy mal preocuparlo de ese modo pero no sabía como decirle lo que pasaba sin que muriese de vergüenza.

- E-estoy bien pero... ¿Podrías irte? - Sabía que se iba a enfadar conmigo por haberle dicho eso pero no tenía más remedio -

- ¿Irme? ¿Pero, porqué? TN ¿que está pasando? - Parecía confundido y no muy contento -

- E-es que me da vergüenza... - Confesé por fin -

Sabía que mi comportamiento estaba siendo muy infantil y que con estos temas no tendría que sentir vergüenza, pero era involuntario, me era imposible no sentirme avergonzada, era la primera vez que me bajaba la regla mientras dormía con otra persona. ¿Y si le daba asco? ¿Y si quisiera alejarse de mí? Pues si lo hacía era un imbécil, pero no quería que eso pasase.

- Vergüenza el qué patito, no entiendo - Bakugo se quedó callado durante un rato y pareció alejarse de la puerta del baño, vi como encendía la luz porque pude ver el resplandor por la pequeña rendija bajo la puerta - Enserio? Era esto lo que te daba vergüenza? - Lo escuché hablar y luego como abría una puerta que supuse era del armario - Abreme patito -

Su voz sonaba mucho más suave, lo que me dió algo de confianza y abrí un poquito la puerta dejando ver solo parte de mi cara.
Lo miré y tenía en la mano un pijama limpio y unas braguitas muy feas pero de esas que se guardan para estos días que aunque sean horribles son lo más cómodo que existe.

- He manchado la cama verdad?... - Dije apenada y él asintió -

- No te preocupes por eso, cambiate mientras yo pongo sábanas limpias - Pude ver una tierna sonrisa por su parte cosa que me emocionó, abrí un poco más la puerta para que pudiera coger el pijama que me estaba dando y cuando lo tuve volví a cerrar -

- No tienes porqué hacerlo, yo las cambiaré si te da asco - Dije pero no hubo respuesta -

Me cambié de ropa y me puse una compresa, una vez lista salí despacio del baño con la cabeza un poco agachada y vi a Katsuki sentado en la cama con las sabanas ya cambiadas, las sucias las había arrugado y dejado en una esquina en la que dejé también mi ropa manchada para lavarla por la mañana.