Lo Que Dicen Tus Ojos >>Bakugo Y TN<< ✅

CAPÍTULO 40

🧡 20/04 🧡

Habían pasado varios días desde el incidente de la prueba, mis quemaduras eran muy superficiales así que se habían curado enseguida, Shoto había estado muy extraño desde entonces pero suponía que era porque seguía sintiéndose culpable, pareció tranquilizarse un poco al ver que yo seguía pasando tiempo junto a él y que no le guardaba ningún rencor. Pero aún así estaba raro y no sabía que hacer, quizás seguía repitiendo la escena una y otra vez, así que decidí enfrentarlo directamente.

Fui hasta su habitación y la abrí como siempre sin llamar, él estaba leyendo así que alzó la vista de su libro y me miró, sus ojos parecían brillar de repente.

- Shoto, ya está bien ¿Se puede saber que te pasa? ¿Porqué estás tan extraño últimamente? - Ya me sabía la respuesta pero quería que saliera de su boca -

- No es nada... Yo estoy normal - Dijo con su tono serio de voz característico -

- Normal no estás, yo se cuando estás normal y ahora no estás normal - Demasiados normales en la misma frase -

Me senté a su lado en la cama, tomé el libro entre sus manos y lo aparté. Él se quedó mirándolo, era cierto que no había pensado en que no llevaba separa páginas y ahora se habría perdido de por donde iba pero esto era más importante ahora.
Tomé sus manos y lo miré a los ojos, él estaba ligeramente sonrojado y me miraba en silencio.

- Shoto, se que todavía te sientes culpable por lo de la prueba - Apartó la mirada cosa que me hizo entender que estaba en lo cierto -

- Solo te causo dolor y problemas... - Habló bajito pero lo oí perfectamente -

Esa frase me rompió el corazón, me acerqué un poco más a él y apreté un poco sus manos.

- Eso no es cierto y lo sabes. -

- Claro que es verdad TN, siempre tienes problemas con mi familia o sufres daño por mi culpa - Escucharlo hablar así me ponía triste -

- Shoto basta - Tomé su rostro y lo miré a los ojos - Deja de culparte por lo que haga tu família, deja de lamentarte por lo que ellos hagan. No me hace daño ser tu amiga y no me importan los problemas en los que me meta, solo quiero estar a tu lado y si eso conlleva enfrentar a tu padre, pues eso haré. Así que porfavor deja de culparte -

Sus ojos me miraban con insistencia, conocía ese gesto, estaba analizando mis palabras y comprobando si le decía la verdad o solo hablaba para tranquilizarlo.
Pero él lo sabía, sabía que yo no le guardaba ningún tipo de rencor y eso era un alivio pues no quería que pensase de ese modo.

Se acercó un poco a mí y agachó un poco la cabeza, él era como un niño pequeño en el fondo. Puse mi mano sobre su cabeza y acaricié su colorido cabello con suavidad, luego lo acerqué a mí y lo abracé. Él ocultó su rostro en mi cuello y pasó sus brazos por mi cintura.

- Eres el mejor amigo que cualquiera quisiera tener - Sonreí contenta sintiéndome afortunada de tenerlo conmigo -

- Tú igual, gracias por estar conmigo - Su voz sonaba como de costumbre, en un tono bajito -

Después de unos minutos nos separamos y yo tuve que irme con la escusa de montar todo para el cumpleaños de Katsuki.

Sí, mi rubio cumplía años y aunque no habíamos hablado seriamente del tema él me había dejado caer varias veces que se aproximaba su cumpleaños, se que parece que no quiere una celebración pero en el fondo se que le haría ilusión que sus mejores amigos estuviesen con él en este día.