↬ʙᴏʏ ᴍᴇᴇᴛꜱ ᴇᴠɪʟ♛ [ᴛᴀᴇᴊɪɴ || ʏᴏᴏɴᴊɪɴ]

ᴅɪᴇᴄɪɴᴜᴇᴠᴇ.

La felicidad es efímera.

El amor fácilmente puede confundirse con la obsesión.

TaeHyung estaba decidido, armado hasta los dientes y con la locura sacando lo mejor de él, sabía que se estaba encaminando a una misión suicida.

Pero ya no le importaba, lo único que quería era llevarse con él a ese mocoso mimado.

Montado en su automóvil y con "I'll Be There For You" sonando con fuerza por los parlantes, TaeHyung sabía que solo era cuestión de tiempo para que el infierno se desatara.

— ¿HoSeok? –Contestó aquella llamada con tranquilidad.

— ¿¡Qué demonios, Kim TaeHyung!? –Gritó quien había sido su mano derecha. — ¿Qué significa este maldito informe? ¡Todo el departamento se ha vuelto loco y vas tras de ti!

Así es... Antes de irse, el oficial Kim había dejado un informe detallado de todos sus movimientos y los de Park JiMin, ahí se podía encontrar la última actualización del paradero de Kim SeokJin y su futuro destino. Así como la estrategia de ubicación en la que ya se encaminaba para salir a su encuentro antes de que llegaran a la frontera con Corea del Norte.

—Es lo que es, Hoba. Si quieres atrapar a ambos líderes mafiosos entonces ponte en marcha, ve tras Park mientras yo voy tras Min. –En la línea solo podía escucharse una fuerte respiración. Sabía que HoSeok estaba conteniendo las lágrimas.

— ¿Sabes lo que esto significa? –El pelirrojo preguntó derrotado.

TaeHyung sonrió aunque el otro no pudiera verlo. —Fue bueno trabajar contigo, amigo.

Entonces la llamada finalizó y TaeHyung lanzó el aparato a la calle donde en segundos fue destruido por el pesado tráfico.

— ¿Qué carajos? –JungKook gruñó cuando el auto se detuvo abruptamente.

—Hay un auto invadiendo el camino, jefe. –Informó el conductor.

JungKook observó a través de la ventana del auto, al otro que estaba estacionado al frente, con los vidrios polarizados era imposible ver de quién o qué se trataba.

Era imposible que hubieran caído en otra emboscada, ¿cierto?

—Bajemos. –Instruyó, con su arma cargada y el chaleco antibalas puesto.

—Espera. –YoonGi dijo. —Si damos un paso en falso puede ser fatal, ¿qué si es un auto bomba?

— ¿Entonces cómo demonios sabremos si es un enemigo? Que estoy seguro que lo es, seguramente es un enviado de Park. No pudo ser tan estúpido de dejar una bomba en un paso fronterizo aunque sea un punto ciego.

—Parece que ya podemos obtener la respuesta a esas preguntas. –Fue la observación que SeokJin hizo cuando la figura de un hombre se materializó fuera del auto.

Jin inmediatamente lo reconoció y no podía ocultar su sorpresa. ¿Quería eso decir que fueron atrapados por la policía?

— ¿Quién es ese? –JungKook mordió.

—El agente Kim TaeHyung. –Jin respondió sin poder apartar la mirada del hombre que había visto mejores días.

— ¿El tipo de quién me hablaste? –YoonGi susurró observando a detalle la reacción de su chico.

Entonces SeokJin salió del auto abruptamente siendo reprendido por YoonGi y JungKook quienes lo siguieron inmediatamente.

—Hasta que te atreves a darme la cara, Gacelita. –Fue el duro saludo del agente Kim hacia el menor.

Al mismo tiempo varias camionetas negras los rodearon y SeokJin se dio cuenta que habían perdido la oportunidad de huir. Habían estado tan cerca.

Tan malditamente cerca...