PASADO: HUGO.

14 1 0
                                    


     Dos semanas después: 

     El tiempo había pasado normalmente, Carla y Claudio estaban más unidos que nunca y eso había generado odio en Hugo quien la observaba a toda hora, ese tipo era insufrible, no quería a Carla pero tampoco quería que alguien más la quisiera o que simplemente ella fuera feliz.

     Ambos habían hablado con los niños acerca de su boda y estos aceptaron felices, la realidad es que apreciaban mucho a Claudio a pesar del poco tiempo en el que se conocían, Matías lo admiraba con locura, mientras que Tahiel lo quería... sí, pero no a tal punto, él sabía perfectamente que no era su padre.

    A menudo todos salían de paseo, pero el regreso de éste sería crucial para ambos, o así lo pensaba Carla.

     Ésta dejó a los niños con Claudio y partió rumbo a la casa de Hugo, tocó varias veces la puerta hasta que el sujeto abrió.

-Hola Hugo...

-¿Y ahora qué? -de mal modo.

-Voy a ser franca contigo, quiero el divorcio.

-No te comprendo, ya estamos separados, tú vive con tus hijos y yo aquí con mi hija.

-No entiendes!, quiero el divorcio, por papeles, quiero divorciarme de ti, voy a casarme y lo necesito, Tahiel y Matías se quedan conmigo.

-No te lo daré y si deseas tanto que nos divorciemos para irte con ese mafioso Vete! pero los niños van conmigo.

-Si hace dos segundos no los querías! Bien claro lo dejaste tú, tú mismo lo dijiste, son mis hijos! Míos entiendes! Hugo te conozco perfectamente, sé que todo esto lo haces para dañarme, por favor no los metas en esto, son inocentes.

-Cállate! -gritó empujándola tan fuertemente que Carla sintió como sus brazos golpeaban el asfalto.

     Ella se puso de pie como pudo- Eres una miseria! Estás muy equivocado si piensas que con esto desistiré, Merezco ser feliz! Y ni tú ni nadie me lo va a impedir! además la madre siempre se queda con los hijos y si optan lo contrario comenzaré a contar todas y cada una de las que tú has hecho, a mi, a mis hijos y a todo el mundo, robando y estafando con tus clientes, basura eres y basura serás.

     Dicho esto Carla regresa a su casa, los niños se habían dormido y Claudio estaba esperándola en el sofá.

-Qué te pasó! -exclamó él poniéndose de pie abruptamente.

-¿Los niños?

-Descansando, los llevé a sus cuartos, ahora dime ¿Qué diablos te sucedió? 

-Ven a la cocina, no quiero que se despierten y me vean así, no sabría cómo explicarles esto.

-Entonces explícamelo a mi.

    Y es que en verdad no estaba nada bien, había llovido hace poco por lo que Carla cayó directo al barro ensuciándose toda y raspando sus brazos y piernas dado que traía pantalón corto, eso sin contar que caminaba muy dolorida.

    Llegaron a la cocina y Claudio fue el primero en hablar- No preguntaré quien fue, es obvio que fue Hugo, pero... me hubieras dicho y ambos lo hubiéramos resuelto, sólo me dijiste saldré.

-Esto era algo que debía resolver yo, casándome o no, debía divorciarme de él, si no hay amor ¿Qué sentido tiene el matrimonio? 

-Mírate como estás, ese miserable... Carla -acercándose a ella tomando sus mejillas entre sus manos- ¿Hugo te hizo algo más? ¿Te golpeó o insultó? dime por favor, dime ¿Intentó propasarse?

ARCANO.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora