ARCANO.

OJO POR OJO: VOLVERTE A VER -ÚLTIMA PARTE

     04:35AM: 

     Tahiel se encontraba descansando en el sofá y Jessica en la camilla de hospital hasta que... 

—No! —gritó ella sentándose en la camilla en un mar de lágrimas— no, no, no.

      Producto del susto Tahiel cayó del sofá cual bolsa de papas— ¿Qué pasó? —acercándose a ella y abrazándola— tú corazón late muy fuerte, Jess sólo fue una pesadilla, ¿Por qué estás así?, ya pasó, ey... 

—Creí que estaba aquí —abrazándolo.

—¿Quién? Jessica ya basta de tanto misterio y tanta locura, por favor, sé que me lo ocultas y no me lo quieres decir, pero necesitas contarlo, sabes que estoy aquí contigo, tú me has visto en mis peores estados, Jess sólo te pido que confíes es mi —ésta asintió y luego de unos instantes comenzó a hablar.

—Él es un monstruo Tahiel... Matías es un monstruo, es el diablo en persona —él la oía sin dejar de abrazarla— el día en que tú desapareciste yo no sabía que ese día comenzaría la guerra.

—Mi hermano es una basura... 

—No entiendes, Tahiel, Matías es peligroso, es más que peligroso, luego de que tú te fueras, luego de un tiempo, era de noche, yo dormía en mi cuarto cuando escuché un estruendo muy fuerte, bajé las escaleras corriendo y ahí estaba Matías apuntándome con un arma en la cabeza, él sólo decía 'Lo más preciado, lo más preciado' yo no entendía, mi hermano bajó, luego mis padres, recuerdo que mi hermano dijo 'Amigo ¿Qué haces? es Jess' creo que esa fue la única vez en la vida en la que él estuvo de mi lado, Matías no respondía nada, mi padre y mi madre sacaron sus armas pero él los mató, así de simple, luego me tomó de los cabellos muy fuerte y me dijo con su voz ronca '¿Dónde está Tahiel' no respondí, sólo cerré los ojos, él luego dijo 'Responde ¿Dónde está Tahiel?' 'No- no lo sé' le respondí como pude, Y es qué en verdad no sabía dónde estabas! aunque si lo hubiese sabido tampoco se lo hubiera dicho.

      Él no me creyó y comenzó a golpearme, mi hermano intentó separarnos, entonces Matías le disparó en la cabeza y mi hermano... su cuerpo cayó sobre mi, su cuerpo ya muerto estaba aplastándome —Jessica no pudo seguir hablando, sólo cerró sus ojos y respiró hondo, Tahiel acariciaba su espalda y rostro, luego le preguntó.

—¿Quieres agua?— ella asintió, luego continuó con su relato.

—Te juro que en... en mi vida he visto gente malvada, gente que está consumida por su maldad, pero Matías era algo más allá de lo perverso, caminó unos pasos y colocó música clásica en el tocadiscos que era de mi abuelo, chasqueaba sus dedos al ritmo, yo como pude ahogué mis sollozos y salí de abajo del cuerpo de mi hermano, pero él me vio, era obvio que me vería, me tomó de mi cabello y ambos salimos de mi casa... sus... sus hombres la incendiaron con mi familia adentro, yo sólo permanecí ahí, de pie y en silencio, luego me susurró al oído '¿Ahora vas a decirme dónde está mi hermanito? anda dilo, no le haré daño, sólo quiero hablar con él' 

      '¿Qué- ¿Qué te hace pensar qué lo sé?' le dije entre dientes.

'Tú eres su maldita obsesión', me gritó 'Todo lo que él hace tú lo sabes, Y eso yo lo sé!' 

     Él, al ver que no respondía nada me tomó de un brazo y caminamos hasta llegar a nuestra casa, nuestra vieja casa abandonada ¿Aún la recuerdas?

—Claro que la recuerdo, los mejores momentos de mi vida pasaron ahí.

—Espero que no los olvides, porque Matías la quemó, ya no queda más nada de lo que alguna vez fue nuestro hogar, yo misma vi como se quemaba todo.