Cuando pensaba en Yoongi todo sinónimo para él era referido a algo bueno, una persona inspiradora, llena de humildad y bondad, perseverante y motivadora.
Tenerlo sollozando en su pecho no se le había pasado por la cabeza ni en el momento más delirante. Se veía desamparado y desesperado, queriendo escapar de él mismo. Ni siquiera habían alcanzado a llegar al sofá cuando el pelinegro cayó de rodillas en la misma sala arrepintiéndose de todo lo que le aquejaba en ese momento.—Soy u-un tonto... ¿Po-porqué me tuve que enamorar? El amor... el amor es horrible...
—No siempre es así— él hablaba con total tranquilidad.
—Para mí sí... Jimin... Para mí siempre será así porque jamás estaré con la persona que amo... me duele no poder decirle lo que siento y... y también me da miedo decirlo y tener que alejarme de ambos porque Taehyung me va a odiar... y Naerim no me va a perdonar...
—Yoongi... Respira un segundo y piensa lo que dices... son tus mejores amigos antes que cualquier cosa... podrán distanciarse pero siempre volver a reencontrarse.
—No...Cada vez será más doloroso... Ahora tiene novia, pero luego será una boda— sus ojos estaban hinchados por tantas lágrimas que había botado, dolía su cabeza a sobremanera por la deshidratación y la presión por aguantar el llanto, —hijos, una familia... ¿Cómo voy soportar tanto? ¿Cómo voy a poder mirarlo a la cara?
—Ni siquiera sabes lo que él piensa sobre ti. Taehyung aún es solo un niño.
—No es un niño... Lo vi... Vi lo dulce que era con ella... L-le hizo el amor...
—Yoongi— apartó su rostro desde su pecho para poder mirarlo a los ojos, —basta, no quiero que te sigas torturando así... Si no es Taehyung alguien más llegará a tu vida y serás feliz porque es lo que mereces ¿Está bien? ... Apenas tienes diecinueve años, solo diecinueve... Tu vida está recién comenzando, mi querido productor.
—Tú... Cuando lo hicimos...
—No Yoongi, no saques ese tema ahora.
—Necesito saberlo...
—Es que lo nuestro es completamente distinto, Yoongi. Yo...
—No. Escúchame... Yo lo hice en serio... Yo... Yo te hice el amor, Jimin, yo... a veces solo pienso en ti y Taehyung se vuelve mi pasado... mi fantasía— hablaba con sinceridad, sin quitar lo confundido que se sentía a la vez. Y aunque ya no lloraba, su rostro seguía humedecido y enrojecido. Ahora toda su atención estaba en lo que intentaba decirle su corazón. —Y si...
—No.
—Tú ¿Sentiste algo...? Por favor, no me digas que no significó nada.
—Yo... Ya sabes... — esquivó su mirada y se puso de pie. No debía mostrar ni una pizca de interés hacia él porque así se lo había dispuesto, sería su compañero de vida, solo eso. Yoongi merecía a alguien mucho mejor que él, a alguien que le diera exclusividad, confianza y fidelidad. Él no era esa persona.
—¿Me quieres? Jimin... — también se puso de pie observando su espalda.
—Yoongi, ya sabes cómo funcionaron las cosas... Te aprecio mucho, pero...
Pero no quería escuchar lo que seguía. —Tranquilo —lo interrumpió porque ya lo sabía. Así que solo carraspeó la garganta, recobrando un poco tanto la postura como la cordura y agregó: —Perdóname... Ehm~ me iré a dormir, estoy muy cansado— sorbió su nariz y se mantuvo todo el tiempo mirando el suelo hasta que se encerró en su habitación. Intentó no pensar en nada. Se puso ropa cómoda y apenas su cabeza tocó la almohada no supo de nada hasta el amanecer. Se incorporó sobre la cama y sintió el peso en su cabeza. Había llorado, recordó de inmediato, tanto que sentía su boca seca y su rostro entumecido. Salió hacia el pasillo apenas abriendo los ojos, llegando a la cocina para, de un sorbo, acabarse un vaso lleno de agua.
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Vanilla & Blood | OT7
Fanfic¿Por qué los de tercero debían despedir a los de último año? Estar como verdaderos esclavos por un diez en inglés, era patético, pero lo necesitaba. Él era irreal, resplandecía aún más con ese traje azul. Lo miraba, estudiaba cada paso que daba. Su...