Frutos de amor

𝓒𝓪𝓽𝓸𝓻𝓬𝓮

¿Quieres ser la señora Jackson?

Narra Percy.

Llegamos a las 7 de la noche, una hora bastante decente cuando llegamos yo estaba al volante, ya que había cumplido el turno de Dafne y el mío propio, ella estaba a mi lado y veníamos recordando todo el viaje la primera vez que estuvimos en este lugar.

—Por fin llegamos.—Dije cuando me levante del asiento del conductor y me estiraba.

—Gracias por conducir por mi.

Dijo Dafne empinándose y besándome, todos salimos y todo seguía igual, solo había algunos árboles nuevos, pero el muelle sigue igual.

—Este lugar sigue igual.—dijo Sally.

—Un lago.—Dijo Estella muy feliz, se acercó corriendo a donde estábamos Dafne y yo y tomó la mano de ella.—DAFNE VAMOS AL LAGO.

Dafne se fue feliz de la mano de mi hermana, yo la veía con una sonrisa, era lindo que se llevaran tan bien.

—Deberías ir y pedírselo de una vez hijo.—Dijo mi madre tocándome el hombro.—¿Trajiste el anillo?

—Claro que lo traje, está adentro, estoy muy nervioso.

—Hijo es normal, pero están desde los 12 años juntos, mi hija te ama y tu la amas a ella, te recomiendo ve y pídeselo de una vez antes de que me arrepienta de darte mi bendición.

—Ve y pídele a la mujer que amas que sea tu esposa.—Me dijo Paul.

Solté un suspiro y con una sonrisa dije.

—Lo hare.

Fui rápido a donde estaba mi maleta y saqué la caja de color negro, la abrí para asegurarme que el anillo siguiera ahí, saqué mi celular de mi bolsillo y lo coloqué al lado del de Dafne, se me había ocurrido algo para cuando diga que si. Metí la caja en mi bolsillo y salí, vi y ella seguía con mi hermana.

—Ustedes toman las fotos, por favor.—les dije a los tres.

—Claro mi Niño, ahora ve.

Con esas palabras de aliento de mi madre camine hasta donde estaban ambas, estaban inclinadas con las manos en el agua, Dafne fue la primera en verme y me sonrió.

—Estella mamá te necesita.—le dije a mi pequeña hermana.

Ella se levantó y se fue a donde estaban los adultos, ayude a Dafne a levantarse y la abracé de los hombros, ella me abrazo el torso.

—Aquí me dijiste que te gustaba.—comentó.

—Si, 13 años después te lo puedo seguir diciendo, me sigue s gustando cada vez más.—tome su mano y la apreté, dejé un beso en sus nudillos y tome aire para decirle.—Te quiero decir algo.

—Dime.—dijo viéndome a los ojos.

Yo también la vi y antes de hablar me agaché y la bese, saboree sus labios con parsimonia.

—Dafne, Te amo y más De lo que puedes imaginar, Te amo además Como nunca nadie jamás lo hará.—sus ojos comenzaron a brillar.—En este momento te estoy dando mi corazón...Amor más que amor, es el nuestro y te lo vengo a dar.

—Percy...que lindo.—dijo Dafne.

—Te miro y más te quiero mirar, Te amo y sabrás Puro sentimiento y no hay nada más, sueño llegar A tu alma tocar.—Dije de abrazarla y tome sus manos, bese ambas.— Ruego a los Dioses tenerte a mi lado Y entonces poderte abrazar, Si no estás aquí algo falta, Yo por ti pelearé hasta el final, y así será hasta que de mi último aliento, mi último aliento a tu lado.

Quite una pequeña lagrima de los ojos de Dafne, saqué la cajita de mi bolsillo y me incliné en una rodilla, Dafne abrió los ojos y llevó su mano a su boca, yo abrí la caja revelando el anillo.

—Percy...me estás...

—Dafne Wright, quieres cambiar tu apellido a Jackson, ¿Quieres ser la señora Jackson?

—SIII.

Dafne grito, tanto que nuestros padres escucharon, en medio de los aplausos le coloqué el anillo en su dedo y me levante muy rápido, la tome de la cintura y la bese con mucha fuerza, la incline un poco permitiéndome saborear sus labios, se escuchó un Pop haciendo que nos separáramos, ambos vimos al mar y había grandes corazones brincando en el agua.

—¿Esto también lo hiciste tú?—Me pregunto Dafne con una sonrisa enorme.

—No, creo que es un regalo de mi padre para nosotros. —La mire a los ojos y me vi reflejados en ellos.—Te amo mucho.

—Yo mucho más.

La bese y con cuidado me fui acercando al mar, la sujete fuertemente de la cintura y así besándonos caímos en el mar, yo hice una burbuja para que ella respirara y la bese.
Salimos a la superficie nuestros padres estaban en el muelle con toallas, mientras no las daban nos felicitaban.

—Tenemos mucho que organizar para esta boda.—dijo mi madre.—Debemos ir a ver el vestido.

—Estoy demasiado feliz.—dijo Dafne sin separarse de mi pecho.

—Mis dos hijos se casarán.—dijo Harry abrazándonos a los dos.

—Estoy demasiado feliz.—dije tome la cara de Dafne y la bese con mucho amor.

—Muy bien futuros señores Jackson.—Dijo Paul haciendo que sonriéramos.—Cámbiense para que hagamos un asado para celebrar esto.

—Claro, ya volvemos.—dijo Dafne tomando mi mano.

Y así ambos entramos a ese auto donde nos colocamos pajama, nos pusimos unas pijama si aguines que tenemos

Salimos donde comimos una deliciosa carne, Dafne y yo estábamos tan Felices que a donde iba uno iba el otro, ella estuvo sentada en mi regazo casi todo el tiempo, hasta que se durmió con una manta encima de mi, en brazos la lleve al auto y la acosté en la cama que nos tocó, los demás aún no se iban a dormir, las únicas que estaban dormidas eran Estella y Dafne, pensé en salir de nuevo y quedarme bebiendo y hablando con ellos, pero quería estar con mi prometida abrazados.

—Oigan, me voy a dormir, nos vemos mañana.

No espere que me contestaran, me acosté al lado de Dafne y la abracé atrayéndola a mi pecho, bese su frente, nariz, mejilla y su cuello. Sabía que estaba dormida pero me acerqué a su oído y le dije.

—Te amo Dafne Jackson.

Creyendo que no me contestaría me acosté, pero ella dio la vuelta y me abrazo se recostó en mi pecho y con los ojos cerrados y una sonrisa me dijo.

—Te amo Esposo.