Frutos de amor

𝓔𝓹𝓲𝓵𝓸𝓰𝓸

Mi sueño se hizo realidad.

Narra Percy.

Recuerdo que cuando Dafne volvió, tuve un sueño que dije que me gustaría que fuera mi futuro, lo cual se cumplió. Tenía una linda casa con Dafne, estaba casado con ella, podía llamarla mi esposa sin miedo alguno, y teníamos ya dos hijos.
Estaba en el sillón de nuestra casa buscando una película que ver con mis dos hijos, Nerea de 8 años y nuestros pequeño Dylan de 3 años.

—PAPI.—Grito mi hija corriendo hacia mi, vi su cabello rubio como el de mi esposa, pero rebelde como el mío suelto, cayéndole en la cara. La cargue y la senté en mis piernas.

—Mi niña.—le dije y comencé a hacerle cosquillas.

—No...No...pap...jajajaj...papi.—decía ella mientras se reía.

Escuché una pequeña risa y vi a mi esposa que traía en brazos a nuestro pequeño Dylan, dejé de hacer,e cosquillas a mi hija y centre mi mirada en lo hermosa que es mi esposa, para tener 34 años aparentaba tranquilamente los 28 años, nadie pensaría que ya está en el tercer piso al igual que yo.
Le sonrió y ella me lo devuelve, se acerca a donde están,so y le beso la cabeza a nuestra hija, también la de nuestro hijo y por último me beso a mi en los labios.

—Pecesito, cuida a Dylan mientras traigo las palomitas.—me dijo pasándome a mi pequeño hijo.

—Claro, ya coloqué la película vamos a ver E. T el extraterrestre.

Ella me volvió a besar,

—Adoro esa película, ya vuelvo.

Vi como desapareció para la cocina, y yo vi a mis hijos, me di cuenta que no necesitaba nada más solo a ellos.

Fin