Boy Concubine || ChanSoo [Terminada ]

Epílogo

Tres años después de la gran batalla y Redsone estaba por primera vez luego de millones de años de constantes guerras totalmente en paz, cada reino estaba constituido bajo las normativas en pro de la armonía y el amor. Los niños eran entrenados por academias especializadas para controlar de manera adecuada sus poderes, y se incentivaron las actividades culturales para que los pobladores pudieran demostrar sus conocimientos, tradiciones y alimentos típicos. Los reinos trabajaban de la mano para el mejoramiento continuo de la sociedad.

A pesar de que los eventos sociales y de planificación eran muy habituales, el rey Chanyeol siempre lograba mantenerse cerca de su familia pues de acuerdo a sus propias palabras, más que el soberano del reino Fuego era esposo y padre, lo cual era mucho más importante. "Un hombre que no sepa amar a los suyos no es capaz de reinar con humildad", era un fragmento de su discurso más valorado.

Kyungsoo servía como sabio Dragón ante la corte unificada de los distintos reinos, ahora ya no lo hacía en secreto, sino que decidió hacer de la verdad un pilar para el manejo colaborativo de los miembros de la corona. Su trabajo era valorado, respetado y por primera vez desde que poseía memoria humana los créditos de sus decisiones iban hacia él, y no hacia un tercero.

El reino Fuego era uno de los más fructíferos a nivel educación y de relación culturales, a pesar de tener todavía un importante arsenal militar ya no destacaba únicamente por muertes en combate sino por el talento innato de sus habitantes. El próximo heredero del reino Fuego era un guapo y talentoso semidragón el cual nombraron Kyungmin, uno de sus ojos era negro como la noche y el otro rojo como el mar cercano al territorio de los dragones. Un precioso niño que no dejaba de sonreír al ser abrazado y besado por sus dos padres.

El reino Viento y Agua se habían unificado por completo, con algo de trabajo mágico lograron unir ambos palacios en uno central que servía como puente comercial. Los pobladores del reino viento se adecuaron a la maravilla con los del reino agua, y con el paso de los meses eran uno mismo. El cielo azul, los árboles altos y el sonido coqueto del agua pura bañaba desde la punta de las montañas del reino más lejano hasta el valle más solitario en todo Redsone. Ya no había razón para vigilar con recelo los recursos, todos trabajaban con respeto la tierra. Solo lo necesario.

Tras el esfuerzo continuo del príncipe Yixing el reino Médico y el reino Hielo habían formado una alianza premarital, ambos herederos de la corona decidieron ceder sus derechos de administración a representantes selectos que servían como comisionados ante la corte. Pues los dos estaban más interesados en viajar y reencontrarse como seres humanos, aún eran jóvenes y no deseaban sentarse por el momento en un trono.

El reino Trueno había establecido un punto de control en los cielos, realizaban contiendas mágicas entre reinos para motivar a valientes guerreros que se atrevieran a pulir los rayos y amar las nubes. Jongdae había tomado en consideración el ejemplo de sus colegas, a pesar de mantener a su gran cantidad de concubinas se encargaba de amarlas, respetarlas y escucharlas. Un gran hombre con una importante labor en Redsone.

Por su lado el príncipe Baekhyun había decido abandonar su posición, dejando que su hermano mayor se hiciera cargo de reinar y luego de tantos engaños hacía si mismo decidió buscar suerte en el reino Tiempo. Él no sabía la grandeza de su poder, y como la luz podía ser de tanta ayuda para el intrépido príncipe Jongin, el cual comenzaba a desarrollar interés por conocer mundos alternativos. Ambos, tomados de la mano exploraban nuevas formas de comunicación a larga distancia, los beneficios de la magia y como mantener en equilibrio la balanza de poderes en todo el territorio.

Aunque a veces surgían problemas variados o el cansancio les hiciera doler los hombros lo cierto es que los príncipes y el rey estaban más felices que nunca. Y para ser feliz no significa que debían reír todo el tiempo, solo era necesario estar tranquilo y en Redsone solo había espacio para la tranquilidad perpetua.

El rey Chanyeol siempre permanecería junto a su amado dragón Kyungsoo y a su pequeño hijo de corazón puro, pues eran el motivo constante de su felicidad, tranquilidad y la fuente inagotable de su poder.